Susana Balbo es la chair del Women 20, el grupo de afinidad abocado a la perspectiva de género dentro del G20, que este año preside la Argentina. El trabajo ha sido "intenso" pero "muy positivo" y se llevó la mayoría de su tiempo, al punto que renunció a su banca como diputada por Cambiemos para cumplir con sus compromisos internacionales sin interferir en los intereses del Congreso. Ahora, todo esa ardua agenda de debates se sintetizará en un documento final que, espera, sea incluido en la declaraciones de los jefes de Estado de fin de año… Y tiene muchas chances, ya que el gobierno de Mauricio Macri identificó la cuestión de género como un eje transversal del foro.
"Hay razones muy poderosas para que los líderes del mundo nos escuchen", dice entusiasmada y explica: "El 50% de la población mundial somos mujeres. De ese 50%, solo la mitad tiene un trabajo registrado e ingresos propios. El 60% de esa mitad de la población mundial son graduadas universitarias y, sin embargo, somos sólo un tercio de la población laboral, hay lucro cesante".
Balbo explica que incluir a las mujeres en el mercado laboral supone un impacto monumental. "El Banco Mundial afirma que el PBI global podría incrementarse un 19% y el PBI del G20, en un 25%", dice e insiste: "Esto sacaría a cientos de millones de personas de la pobreza".
Balbo elige hablar de números porque de eso se trata este foro. El G20 discute temas económicas y los datos son abrumadores. Es que el G20 agrupa a los países que representan el 85% del producto bruto global, dos tercios de la población mundial y el 75% del comercio internacional. "Te hago el cálculo, hay más de 1.000 millones de mujeres del G20 que no trabajan. Hay que incorporarlas porque la mayoría están sumergidas en la pobreza y si se incorporan, mejora su vida y la de sus familias… en definitiva, mejora todo el planeta".
Sobre todas estas cifras se discutirá en la cumbre del W20 que se desarrollará entre el 1 y el 3 de octubre en el CCK. Hasta allí llegan delegadas de los 24 países del foro, un verdadero éxito si se tiene en cuenta que durante la presidencia alemana del G20, en 2017, solo 7 países participaron de la cumbre del grupo. El 3, en el cierre del evento, el presidente Mauricio Macri recibirá el comuniqué final.
Balbo revela que llegan a la cumbre con el texto ya consensuado y remarca que cumple con el objetivo inicial de su gestión al frente del W20: "Es concreto". Tiene sólo una carilla y media pero viene acompañado por un anexo de políticas públicas específicas. "Cada frase de nuestro comunicado tiene una política pública concreta ya probada y en funcionamiento en otros lugares, que demuestra que ha hecho impacto y que tiene sentido", explica. Quiere dejar en claro que la intención es que el trabajo del año tenga un verdadero impacto en las mujeres del G20, que no sean solo palabras o promesas.
El W20 focalizó su labor en cuatro ejes: la inclusión laboral, financiera, digital y de la mujer rural. Realizó un foro nacional en marzo pasado y varias mesas redondas internacionales. Además, se desarrollaron webinars mensuales y la plataforma que cuenta con 140 delegadas, de las cuales unas 90 participan activamente. "Vamos a dejar como legado una plataforma hasta fines del año que viene para que las delegadas sigan trabajando. Japón la va a heredar de forma gratuita, con los datos de todas las delegadas. Así garantizamos que este diálogo continúe", cuenta orgullosa.
"No hay estadísticas desagregadas por género, pero yo veo que mundialmente hemos llegado a un punto en el que ya no hay camino hacia atrás en el avance de los derechos de las mujeres", dice optimista y augura: "Esto es positivo porque, además, se van a acelerar la velocidad de los cambios".
Seguí leyendo: