Interna sindical: Hugo y Pablo Moyano lanzan su frente para meterle presión a la CGT a días del paro general

La división marca la relación del movimiento obrero con el Gobierno

El camionero Pablo Moyano junto al bancario Sergio Palazzo (izquierda) y Ricardo Pignanelli (derecha), en la conferencia de prensa del martes.

Sin la presencia de su padre Hugo, Pablo Moyano desplegó nueva tropa: sumó antiguos aliados con peso propio en la pelea interna por desplazar a la actual conducción de la CGT. En una conferencia de prensa realizada en la biblioteca del sindicato de Camioneros del barrio de Caballito, pidió por una central obrera que "esté a la altura" de las circunstancias y ratificó la movilización a Plaza de Mayo del 24 de septiembre junto al paro "extra largo" de 36 horas que el moyanismo y las CTA arrancarán durante el mediodía del lunes y se extenderá hasta la medianoche del martes.

Lo novedoso de la cita fue la aparición de los secretarios generales del gremio metalmecánico SMATA, Ricardo Pignanelli, jefe de uno de los sindicatos industriales más poderosos del país, y el de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), Juan Pablo Brey. Son las flamantes incorporaciones al "Frente Sindical para el Modelo Nacional", el espacio que encabeza Camioneros junto a la Corriente Federal del titular de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo. El primer plenario de representantes sindicales ocurrirá mañana a las 16, en la tierra neutral del Microestadio del Club Ferrocarril Oeste.

En su raid mediático tras ser internado de urgencia el mes pasado por una descompensación, Pablo Moyano fue insistente en el apoyo de sus nóveles compañeros de ruta y los "más de 70 gremios" en su cruzada por lograr una conducción cegestista más confrontativa con el Gobierno que el triunvirato actual, integrado por Héctor Daer (Sanidad), Carlos Acuña (Estaciones de Servicio) y Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento).

Mientras su hijo pone en valor el armado sindical, Hugo Moyano está abocado en dejar atrás los resquemores con la ex presidente Cristina Kirchner, después de la foto del 3 de agosto que marcó la reconciliación entre los otrora enemigos. El líder camionero se reunió esta mañana en La Plata con el bloque de diputados y senadores bonaerenses de Unidad Ciudadana, con Teresa García y Florencia Saintout como anfitrionas.

Acompañado del jefe canillita Omar Plaini, Moyano llamó a "unir al peronismo, la fuerza de los sectores nacionales y populares, para ver si en 2019 podemos ser nuevamente Gobierno y salir de esta situación tan perjudicial".

Hugo Moyano y Omar Plaini en La Plata

El moyanismo apela al descontento creciente en las bases obreras para traccionar a los cuadros sindicales de la industria y las seccionales del interior de la CGT. En ese operativo de seducción, si bien pudo acercar a los metalmecánicos del Smata, Camioneros no pudo convecer a los metalúrgicos de la UOM, una de las actividades más castigadas. En julio pasado se cumplieron tres meses consecutivos de contracción en el sector manufacturero, alcanzando una caída 5,7%. Y septiembre perfila en ser otro período recesivo.

Las maniobras de los jefes camioneros son minimizadas por quienes están en la vereda en la interna sindical. "El triunvirato tiene mandato por cuatro años y el apoyo de un montón de gremios. Solo algunos quieren irse, eso es parte del debate democrático. Pero hay algunos que quieren ser siempre estrellas", señaló a Infobae el secretario de Prensa de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Mario Calegari.

Intentando hacer equilibrio entre las posturas opuestas en la central obrera, Pignanelli consideró que "la desavenencia en la cúpula de la CGT fue histórica, pero hay algo que los dirigentes siempre respetaron y fue la unificación de las regionales del Conurbano e Interior". Según el dirigente metalmecánico, esta opinión es constantemente desoída y es "lo que está empujando a tomar medidas de acción en común".

Protesta de los trabajadores del Astillero Río Santiago en el ministerio de Hacienda bonaerense.

Las dificultades en el sector metalúrgico también se replica en las ramas ligadas a la producción, algo que alimenta la tensión en el sector público. Un ejemplo de esto son las protestas en la ahora secretaría de Agroindustria por despidos de personal y la toma del Ministerio de Economía de la provincia de Buenos Aires por parte de empleados del Astillero Río Santiago.

"Van a tapar todos los conflictos que suceden en el país. Tenemos que ser la voz de los que no tienen voz y de los que no se sienten representados ni por sus propios gremios", anticipó ayer Pablo Moyano en la rueda de prensa realizada en José María Moreno 1224.

Aunque fragmentados al nivel de la cúpula, de aquí a la próxima semana es prácticamente seguro que se mantengan en pie el paro general decretado por la CGT y la jornada de 36 horas del moyanismo y las CTA de Pablo Micheli y Hugo Yasky. "No hay forma que se levante el paro del martes", confirmó Mario Calegari, vocero del estratégico gremio que representa a los choferes de colectivos y que paralizarán el transporte solo ese día.

Si en algún momento hubo una remota chance de acuerdo entre la CGT y el Gobierno, ayer quedó totalmente sepultada con la suspensión de la reunión que estaba prevista con el Ministerio de Producción y Trabajo, a cargo de Dante Sica. "Se levantó porque no hay nada para ofrecer", opinó Calegari sobre ese encuentro.

Estado de paritarias permanente

Fuentes gubernamentales de la secretaría de Trabajo señalaron a este medio que, pese a la convocatoria para una huelga general, el diálogo con los secretarios generales es constante. El foco está puesto en el nivel de actividad y de los salarios, que ya quedaron desfasados luego de que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec alcanzó en agosto una inflación interanual del 3,9% y una acumulada del 24,3% en lo que va del año.

En general, los gremios con mayor alcance de representación que pactaron un 15% de aumento anual entre abril y mayo ya tuvieron una suba actualizada de entre 10 y 15 puntos, luego del decreto firmado en junio por el presidente Mauricio Macri que habilitó a las negociaciones otorgar un 5% adicional. Para los líderes gremiales, ese "alivio" quedó viejo tras la escalada de la cotización del dólar, que superó los $40 durante la última semana.

En este marco de "turbulencia" económica, la secretaría de Trabajo todavía no definió aún una pauta salarial. Sin porcentajes de referencia y con una CGT cuestionada en su interior, cada negociación se resuelve de manera aislada, en su mayoría a la espera de la activación de las cláusulas de revisión.

Los triunviros Carlos Acuña, Héctor Daer y Juan Carlos Schmid. (Maximiliano Luna)

Ramas de actividad como los choferes de larga y media distancia de la UTA, o los estatales de UPCN y municipales de Capital Federal (Sutecba) aún permanecen con los convenios firmados de marzo y abril, cuando la inflación oficial prevista era del 15 por ciento. En ese grupo están los docentes porteños y bonaerenses, que mantienen sus reclamos contra la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.

"Debemos dar la posibilidad de una resistencia ante este avance del ajuste. Muchos trabajadores necesitan contención", señaló Sergio Palazzo. Su gremio es uno de los pocos que tienen relativamente resuelto el año salarial, tras pactar una "cláusula de actualización automática" que se dispara ante cada variación del IPC. En lo que va del año, el aumento de los bancarios llega al 28%, dividido en cuatro cuotas – el último tramo será con la liquidación de septiembre-. El mismo porcentaje fue rubricado hace días por la UATRE, el gremio alineado con Cambiemos que representa a los peones de campo.

Entre los casos fuera de libreto figura el personal bajo convenio de Utedyc, que aglutina a las entidades deportivas, civiles y mutuales. El gremio logró la reapertura de su paritaria que va de enero a diciembre, pese a no contar con una clausula de revisión. A su 18% rubricado para todo el año le sumó un 12% adicional, lo que totaliza un aumento anual del 30,08%. Sin embargo, por ahora el porcentaje no cuenta con el aval de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA): ayer el sindicato marchó a la sede deportiva para reclamar la recomposición salarial.

Después del plenario en Ferro, se espera que el Frente Sindical que encabezan Hugo y Pablo Moyano convoque a una fuerte movilización cuando se trate el Presupuesto 2019. La cita será el Congreso nacional, para "confrontar directamente con el plan económico" de Mauricio Macri. En ese partido se jugará parte de la interna del peronismo. "Vamos a pedirle a los diputados, senadores, y gobernadores que rechacen este presupuesto que va a traer más desocupación, ajuste y flexibilización laboral", advirtió Pablo Moyano.

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