Acercar posiciones de la agenda bilateral, avanzar en "relaciones diplomáticas maduras" y compartir estrategias militares comunes para la región. Bajo estas directrices que delineó el Gobierno llegará este lunes el jefe del Ejército de los Estados Unidos, Mark Milley, quien mantendrá una breve agenda en Buenos Aires con la cúpula del Ejército argentino y con autoridades del Ministerio de Defensa.
La visita de Milley se encuadra en la serie de reuniones que hubo en los últimos dos meses de parte de autoridades militares norteamericanas en la Argentina y apunta a reforzar los lazos entre ambos países sobre una visión común de lucha contra el terrorismo y el narcotráfico en la región.
El jefe del Ejército de Estados Unidos arribará a Buenos Aires el lunes próximo por la noche y el martes temprano mantendrá una agenda de trabajo con su par argentino, el general de brigada Claudio Pasqualini, y con autoridades de Defensa, según señalaron a Infobae fuentes oficiales. Luego de esos encuentros Milley partirá a Santiago de Chile y a Brasil como parte de una ronda de acercamientos que se propuso hacer en la región.
"Hay idea de continuar y profundizar las relaciones bilaterales en el campo militar con Estados Unidos por una visión común que hay sobre la región y en función de la cumbre de presidentes del G20", dijo un encumbrado funcionario del Gobierno al referirse a la visita de Milley.
La llegada del jefe del Ejército de Estados Unidos se sumará a la visita que hizo hace menos de 15 días el jefe del Comando Sur, el almirante Kurt W. Tidd, quien se reunió con el ministro de Defensa, Oscar Aguad, y participó de un encuentro con jefes militares de América, con la excepción de Venezuela. En aquel encuentro con la cúpula de cada Estado Mayor Conjunto de la región se abordaron dos temáticas concretas: la asistencia coordinada ante catástrofes naturales y el mantenimiento de operaciones mundiales para las misiones de paz conjuntas.
Antes de esta visita estuvo en Buenos Aires el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, quien calificó a la Argentina como “un socio y amigo” de Estados Unidos, y pidió un trabajo conjunto con el gobierno de Mauricio Macri para una “colaboración militar estrecha para la seguridad de nuestros pueblos”.
En esa oportunidad, el jefe del Pentágono le ofreció a la Argentina todo el apoyo logístico, la presencia de buques, aviones y radares de Estados Unidos en Buenos Aires para garantizar a fines de noviembre la cumbre de presidentes del G20 en la que ya adelantó que participará el presidente Donald Trump.
Durante su estadía en la Argentina, Mattis destacó la necesidad de “estrechar las relaciones conjuntas en ayuda humanitaria y en actividades estaduales”, como las que realizan las fuerzas de seguridad militar de la Asociación de Georgia con soldados argentinos.
“Esto es construir relaciones de confianza y transparencia para la seguridad de nuestros pueblos”, señaló Mattis en el salón San Martín del edificio Libertador, acompañado por Aguad, quien lo recibió con toda la cúpula del Estado Mayor Conjunto.
Según pudo saber Infobae, en todos los encuentros de la jefatura militar norteamericana se dejó un claro mensaje hacia la Argentina: Estados Unidos está dispuesto a colaborar con el gobierno de Macri y estrechar lazos para desterrar el terrorismo o el narcotráfico en la región. Pero también se alertó sobre el avance de China en la región y particularmente en la Argentina.
Concretamente, en el encuentro con Aguad en el piso 13 del Ministerio de Defensa el jefe del Pentágono alertó sobre la base espacial de China que está en Neuquén y que por 50 años estará comandada por representantes del Ejercito Popular de China. Tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea desconfían del “uso pacífico” de esa estación espacial y creen que la antena instalada en Neuquén servirá para uso dual y eventualmente para interceptar satélites.