El entramado de nombres y sociedades offshore alrededor del ex secretario privado de Nestor y Cristina Kirchner, Daniel Muñoz, y su viuda Carolina Pochetti, investigados por enriquecimiento ilícito y lavado de dinero, sigue expandiéndose.
Las revelaciones de los cuadernos de Oscar Centeno echaron luz sobre el rol que cumplió Muñoz como el encargado de recibir los bolsos con cientos de miles de dólares en el departamento de Recoleta del matrimonio presidencial y la residencia de Olivos.
Pero si bien la Justicia ya no puede investigarlo por presunto enriquecimiento ilícito, luego de su fallecimiento en mayo del 2016, sí a su entorno. Y este entorno se fue ampliando a otros nombres sospechados de ser sus presuntos testaferros y/o intermediarios en millonarias operaciones inmobiliarias en Estados Unidos.
La mayoría de ellas fueron adquisiciones de unidades en lujosos condominios en Miami, concretadas a nombre de una docena de sociedades con vinculaciones en Uruguay, Miami, Delaware, Nevada, Andorra, Seychelles, Nueva Zelanda y Suiza.
Según información de la Unidad de Información Financiera (UIF) en manos desde hace varios meses del juez federal Luis Rodríguez – a cargo de la investigación por presunto enriquecimiento ilícito y lavado contra Muñoz y Pochetti- hubo 16 operaciones inmobiliarias en Miami y Nueva York, entre abril de 2010 y diciembre de 2015, por USD 70 millones.
La Justicia está detrás del origen de los fondos con los que fueron adquiridos, y de su posible recupero si se comprueba que fueron comprados con dinero de la corrupción. Rodríguez envió un exhorto a Estados Unidos pidiendo datos sobre 11 empresas registradas en Miami y otra en Delaware, sospechadas de haber actuado como pantalla para ocultar a quienes serían los verdaderos dueños de las propiedades: Muñoz y Pochetti.
Según pudo saber Infobae de fuentes judiciales, ni el ex secretario privado de los Kirchner ni su hoy viuda informaron bienes o ganancias en el extranjero en sus declaraciones juradas ante la AFIP, pese a que en abril del 2016 el Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación (ICIJ) hizo público en los Panama Papers que eran accionistas de Gold Black Limited. Esta offshore fue registrada en 2011 en las Islas Vírgenes Británicas por el estudio panameño Mossack Fonseca con acciones al portador, que pasaron a nombre del matrimonio en enero de 2015.
Como director de Gold Black Ltd aparecía el empresario marplatense Sergio Esteban Todisco, quien le admitió al equipo argentino de ICIJ que figuraba en ese cargo por su "amistad" con Muñoz. La Justicia sospecha que actuó como testaferro de Muñoz y Pochetti, para la compra de propiedades en Estados Unidos que no podrían haber adquirido con sus ingresos declarados. Todisco habría cumplido ese rol junto a su mujer, María Elizabeth Ortiz Municoy, de la que se separó a principios de 2015.
Todisco dirige la empresa marplatense Textilana SA y Municoy se dedica a la actividad inmobiliaria en esa ciudad. Ambos habrían adquirido inmuebles en Mar del Plata a través de sociedades recién constituidas , en operaciones que están en la mira de la Justicia.
Todisco, a su vez, está bajo investigación de la Fiscalía Federal 1 de Mar del Plata a cargo de Laura Mazzaferri en la causa de las cuevas financieras de esa ciudad, por transferencias por USD 2.100.000 realizadas desde un Banco de Andorra a Estados Unidos. Los movimientos fueron hechos a cuentas a su nombre o de sociedades de Miami a las que estaba vinculado. Una de estas sociedades, North Golden Inc, compró en octubre del 2013 un departamento en el complejo Turnberry Ocean, en la Collins Avenue.
Todo queda en familia
En febrero de 2015, cuando las alertas habían empezado a activarse, Todisco y Municoy renunciaron y fueron reemplazados en las sociedades vinculadas a Muñoz, por Perla Aydée Puente Resendez como nueva directora.
Esta mexicana -tal como reveló el sitio periodístico Border– es la mujer de Carlos Adolfo Gellert, hijo de la ex diputada provincial santacruceña Blanca Blanco, ex esposa de Daniel Peralta, a cargo de la gobernación de esa provincia entre 2007 y 2015. Gellert es primo hermano de Pochetti, hija de Stella Maris Blanco.
De 36 años, Gellert trabajó en el Instituto de Energia de Santa Cruz entre principios de 2012 y fines de 2015.
El matrimonio Puente Resendez-Gellert tiene en el estado de Texas, donde declara domicilio, un local de peluquería y salón de belleza de la franquicia Shear Madness, a nombre de la firma LA IDEAS LLC. También informa otra vivienda en Monterrey, México.
Según información que consta en el expediente judicial, registra operaciones financieras en Estados Unidos, con transferencias de fondos provenientes de sociedades registradas en Panamá, las Islas Vírgenes Británicas y Uruguay, entre otras jurisdicciones.
Infobae intentó comunicarse con Gellert a través de su madre, sin éxito.
Venta de inmuebles
Llamativamente, a partir del desembarco de Puente Resendez en las sociedades bajo la lupa de la Justicia, se registraron varias ventas de inmuebles. Las más significativas ocurrieron después que se hizo pública la investigación de los Panama Papers en abril de 2016.
Según información que consta en el expediente judicial, desde ese momento y hasta principios de 2017, hubo cinco operaciones por USD 35 millones. La última operación se registró en marzo de 2017, con la venta de un departamento en 9005 Biscayne Boulevard, en Miami Shores, por USD casi USD 5 millones. La sospecha de los investigadores es que su finalidad fue evitar los embargos judiciales. El rastreo del dinero ahora será más difícil tras ese cambio de titularidad.
En julio del año pasado, las sociedades en las que Puente Resendez figuraba como directiva, fueron disueltas y solo aparecen activas dos de ellas, que no registrarían propiedades a su nombre.
La investigación que involucra a Pochetti, Todisco, Municoy, Puente Resendez y Gellert sigue abierta en el Juzgado de Rodríguez, principalmente a partir de una serie de informes de la UIF que detallan las sociedades offshore constituidas y sus directivos, las operaciones inmobiliarias en Estados Unidos, información fiscal de los involucrados y los vínculos entre sí. Rodríguez pidió vía exhorto informes de las sociedades a Estados Unidos.
El organismo conducido por Mariano Federici envió este mes copia de esos informes reservados al Juzgado de Claudio Bonadío, a cargo de la causa de los cuadernos. Este magistrado ya le pidió a Rodríguez copia del expediente por presunto enriquecimiento y lavado contra Muñoz y su entorno.
Las sociedades de Pochetti
En Argentina, Carolina Pochetti es dueña del 95% de dos firmas vinculadas a la explotación turística. Una de ellas es Patagon Experience SRL, ligada a un lujoso complejo de cabañas en San Martín de los Andes, Patagon SMA, con 4.000 metros cuadrados de extensión y amplio salón de eventos.
La otra es Patagon Adventure SRL, donde su primo hermano Gellert figuró fugazmente como empleado en 2007, según los registros de Anses. Esta empresa, hace algunos años, fue señalada como parte del supuesto patrimonio negro, a través de familiares políticos, del ex gobernador Peralta. Consultado por Infobae, el ex mandatario santacruceño se desligó de los negocios de su sobrina política y negó tener otro vínculo con Pochetti, más allá del familiar. Afirmó que "no la veía desde 2011", y que perdió todo contacto luego de su separación de Blanco, que se formalizó a fines del 2015 al dejar la Casa de Gobierno santacruceña.
En ambas empresas de Pochetti, el accionista minoritario (5%) es Luis Gugino, un conocido arquitecto santacruceño, a su vez, socio en varias sociedades con Carlos Temístocles Cortez. Este empresario de Río Gallegos, fanático de la pesca con mosca, tiene una llamativa actividad con sociedades offshore en Miami y Seychelles. No es lo único que tendrían en común con Pochetti.
A partir del 2010 Pochetti habría experimentado una creciente expansión empresaria.
Según un informe incorporado al expediente judicial a cargo de Rodríguez, pasó a ser accionista de las firmas Del Pueblo SA, Del Sur SA, Llaneza y Asociados SA, Llaneza y Asociados Río Grande SA, vinculadas al rubro farmacéutico y de perfumería, convirtiéndose así en socia de Cortez y de los empresarios de Río Gallegos Rubén Horacio y Leonardo Daniel Llaneza.
Estos dos hermanos son dueños de la red de farmacias de Río Gallegos que llevan el apellido familiar, con una veintena de sucursales en toda la Patagonia. En este negocio se sumó como socio Cortez. Los tres comparten otra media docena de sociedades ligadas al mercado farmacéutico.
Cortez y la ruta del dinero offshore
Pero Cortez y los hermanos Llaneza no sólo comparten negocios en la Patagonia.
Según los documentos de los Panama Papers a los que accedió Infobae a través del ICIJ y el diario alemán Süddeutsche Zeitung, en enero de 2013 se convirtieron en accionistas de la firma panameña Abaco Holding Group SA, aún activa.
En el formulario de registro, Cortez y sus socios informaron como actividad "holding/Switzerland" (Suiza en inglés). Abaco Holding Group fue inscripta por el estudio panameño Mossack Fonseca y como intermediario actuó el bufete uruguayo Damiani, uno de los favoritos de los argentinos para operar offshore.
Cortez aparece en los registros de los Panama Papers con otras tres sociedades offshore. Una de ellas es New Dreams LLC, registrada en Las Vegas (Nevada) y Florida. A través de ella, junto con su socio Leonardo Llaneza, adquirieron la unidad 1602 en el imponente condominio 1800 Club ubicado sobre N Bayshore Drive, en Miami.
No fue el único inmueble de lujo que adquirió New Dreams LLC. Hasta 2015 fue dueña de la unidad 603 en el imponente condominio Tao Sawgrass.
Según información en poder de la Justicia argentina, New Dreams LLC le habría dado cheques por al menos USD 75.000 a Dream Golden Enterprises, sospechada de ser una de las sociedades vinculadas a Muñoz y su esposa. El pago habría sido por el alquiler, entre noviembre de 2015 y enero de 2016, de otro inmueble, esta vez en el Condominio Regalia en la cotizada Collin Avenue.
En junio pasado, New Dreams LLC pasó a manos de una ignota fundación privada radicada en Panamá: Fundación Altam Vitae, registrada a nombre de testaferros panameños.
Según los investigadores, otras dos sociedades vinculadas a Cortez – Zulmen International Inc y Yusel Enterprises Inc – también habrían sido utilizadas como vehículo para mover una parte del dinero destinado a comprar el emporio de inmuebles de Muñoz y Pochetti en Miami.
En los Panama Papers aparece un documento en el que consta que Zulmen International Inc hizo al menos una transferencia de U$3.500 entre el banco BSI SA de Lugano, Suiza, y el Citibank de Nueva York. El pago fue por el inicio del trámite de "incorporación de una sociedad", según dice el cable de la transferencia, sin más detalles.
Cortez fue, además, dueño entre 2009 y 2014 de Neptune Commercial Enterprises SA, otra firma registrada también por Mossack Fonseca en las islas Seychelles, un paraíso turístico, a su vez muy requerido por aquellos que buscan ocultar su patrimonio.
Neptune aparece como manager de otra sociedad, Cape Fairweather Commercial Enterprises LLC. Registrada en el estado norteamericano de Florida, esta firma figuró como propietaria de, al menos, cuatro unidades en el exclusivo condominio 1800 Club de Miami.
El exitoso empresario santacruceño es dueño de otro departamento, a solo 100 metros, sobre 1900 N Bayshore Drive, a través de la sociedad SFL PROPS LLC, otra firma de Miami en la que figura como socio de Leonardo Llaneza.
Asimismo, Cortez figura en los documentos de Panama Papers como directivo de Edelmont Limited, registrada en Nueva Zelanda en 2014, junto a Jorge Isaac Shemi, dueño de la empresa de nebulizadores San Up.
Viaje a Uruguay con Pochetti
Cortez y Pochetti no solo coinciden en su actividad offshore. Según los registros migratorios, hicieron un viaje relámpago juntos a Uruguay de poco más de 12 horas, el 20 de diciembre de 2016. Salieron a las 21 desde Ezeiza en un avión de Air France y volvieron apenas un día después, también en avión, a las 15.45.
Infobae se comunicó con Cortez vía Whatsapp, quien si bien leyó los mensajes, prefirió no responder. Este medio también intentó localizar a Pochetti, sin éxito. La viuda de Muñoz cerró todas sus redes sociales.
La causa por enriquecimiento, en la Corte
La investigación por enriquecimiento ilícito contra Muñoz se abrió en 2013 por una denuncia de Elisa Carrió a partir de los dichos al programa Periodismo para Todos de Mirian Quiroga. La ex directora de Documentación Presidencial y muy cercana a Néstor Kirchner, había dicho que el ex secretario de los Kirchner llevaba bolsos con dólares desde Buenos Aires a Río Gallegos, y que el dinero era tanto que "se pesaba".
La causa recayó en el Juzgado de Rodríguez, quien en 2015 sobreseyó a Muñoz, a su viuda Pochetti y al entonces gobernador Peralta, incluido en el expediente por ser el tío político de esta última y también presunto beneficiario del dinero.
Tras una segunda denuncia del abogado Ricardo Monners Sans, el fiscal de la causa, Carlos Stornelli, hizo un nuevo requerimiento por presunto lavado de dinero y abrió así la posibilidad de que la UIF pidiera ser aceptada como querellante, y solicitara el desarchivo de la causa de enriquecimiento. La medida fue apelada por la defensa de Pochetti.
Luego de la intervención de la Cámara Federal y de Casación, la decisión de reapertura del expediente de enriquecimiento está ahora en manos de la Corte Suprema.