En medio de un clima de incertidumbre por los recortes presupuestarios que se avecinan y la ausencia de directivas claras para encarar la nueva reforma militar, el presidente Mauricio Macri instó anoche a asumir el compromiso de "saldar la deuda histórica con las Fuerzas Armadas de la democracia".
Macri dejó en claro que la nueva directiva que dispuso el Gobierno en materia de Defensa Nacional instrumentada por medio de dos decretos va a "sentar las bases para avanzar hacia un sistema militar moderno".
Sin embargo, el clima de las Fuerzas Armadas es de incertidumbre y expectativa por lo que vendrá en los próximos meses para el despliegue en terreno de la reforma militar anunciada por el gobierno y por los recortes de gastos del 2019.
El presidente destacó en la cena anual de camaradería de las Fuerzas Armadas que "hay importantes desafíos y oportunidades por delante" en virtud de la reconversión militar que anunció.
Precisamente entre los desafíos por delante se mencionaron en la cena realizada en el salón San Martín del edificio Libertador los lineamientos de recortes de gastos que se vienen para el 2019 en el presupuesto militar. Una calificada fuente del Ministerio de Defensa confirmó a Infobae que la poda de gastos de funcionamiento en Defensa será de 2.500 millones de pesos para el año entrante. Esto representa el 25% del 10% global del presupuesto, ya que atañe solo a gastos de funcionamiento porque la masa salarial y los cargos no se recortarán.
En el gobierno aseguran que estos recortes se darán en todos los ministerios en función del achicamiento del déficit público. Y en el ministerio de Defensa confían en que ello se pueda compensar con un ingreso eventual de unos 200 millones de dólares por la venta de inmuebles militares en todo el país. También se prevé desde el Ministerio de Defensa dar un fuerte impulso a la producción para la defensa. Un ejemplo de ello es el desarrollo en octubre próximo de tres aviones Pampa fabricados en FADEA. De allí que Macri planteó la necesidad de "transformar una industria de defensa con el propósito de convertir empresas eficientes y sustentables".
Ante la cúpula castrense en pleno, Macri destacó que "las Fuerzas Armadas deben estar preparadas ante amenazas de origen externo" pero admitió que "ningún proceso de transformación es fácil y requiere una política de largo plazo".
Por lo pronto, la puesta en marcha de esta reforma militar empezará desde mañana a desplegarse en el terreno y el 14 de agosto llegarán a la frontera norte, específicamente a Formosa, unos 500 efectivos militares para dar apoyo logístico a las fuerzas de seguridad.
A la vez, Infobae pudo saber que habrá unos 600 uniformados militares que custodiarán 50 "objetivos críticos" que son las represas, termoeléctricas y edificios con material sensible del Estado con excepción de las centrales nucleares que seguirán bajo custodia de la Gendarmería.
"Un moderno despliegue territorial va a generar un funcionamiento más eficiente de las fuerzas armadas", instó Macri en la cena de camaradería. Ello implicará, entre otras cosas, la instrumentación de una fuerza de despliegue rápido conformada por unos 10.000 uniformados de las tres fuerzas.
El presidente dejó en claro que se necesitará de "cooperación de las fuerzas armadas en la política exterior y convencernos de la inclusión inteligente en el mundo".
También remarcó la tarea de los militares para "salvar vidas como muchas veces lo han hecho". Ello implicará la tarea de rescate ante catástrofes.
Hacia el final del discurso en la cena de camaradería, Macri recordó a los 44 tripulantes del ARA San Juan. "Es un dolor que llevamos en el corazón", expresó. Hubo un aplauso cerrado y agradecimientos. Pero también quedó flotando en el aire el sabor amargo por los recortes que se vienen y por la falta de un "planeamiento estratégico" para analizar cómo se encara en terreno la reforma que se viene.
En la cena de las Fuerzas Armadas acompañaron a Macri el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y los ministros de Defensa, Oscar Aguad, de Seguridad, Patricia Bullrich, el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, y el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao.
También estuvieron presentes los jefes del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, teniente general Bari del Valle Sosa; del Ejército, general de brigada Claudio Pasqualini; de la Fuerza Aérea, brigadier general Enrique Amrein, y de la Armada, vicealmirante José Luis Villán. Y asistieron el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, y el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, entre otras autoridades.