Senadores del peronismo federal, encabezados por Miguel Ángel Pichetto, manifestaron su respaldo a la CGT frente a cualquier medida que pueda adoptar y coincidieron en el análisis de la situación política y económica del país en lo que refiere a "la pérdida de puestos de empleo y poder adquisitivo" de los trabajadores.
El encuentro se llevó a cabo en la sede de la calle Azopardo, donde el triunvirato de la CGT y el resto de los miembros del consejo directivo recibieron a los senadores peronistas Miguel Pichetto, Inés Blas, Carlos Caserio, Julio Catalán Magni, Teresa González, Pedro Guastavino, Sigrid Kunath, Beatriz Mirkin, José Ojeda, Guillermo Snopek, Rodolfo Urtubey, Norma Durango, Alfredo Luenzo, Mario Pais, Gerardo Montenegro y Mauricio "Camau" Espínola.
Por su parte, los dirigentes de la CGT evitaron dar precisiones sobre la fecha de un posible paro general, que podría decidirse en la reunión del Consejo Directivo del próximo jueves.
A la salida del cónclave, Pichetto dialogó brevemente con la prensa y dejó en claro que el PJ respalda cualquier decisión de los gremios: "Tenemos una participación activa en la vida del peronismo y el mundo del trabajo está integrado al peronismo, así que hay un marco de solidaridad en lo que defina oportunamente la CGT".
También ratificó que evaluarán con ellos los temas relacionados al trabajo que pasarán por el Congreso: "Cada uno de los temas va a ser conversado con ellos y seguir muy de cerca la problemática social e inquietudes que tienen los trabajadores con la pérdida de empleo, la suba de tarifas y pérdida de poder adquisitivo".
Jorge Sola, secretario de Prensa, se expresó en sintonía: "El propio bloque ha puesto a disposición su apoyo a cualquier decisión que tome el consejo directivo el próximo jueves".
Uno de los secretarios generales de la CGT, Héctor Daer, confirmó que lo que se decida el jueves "seguramente será un paro". Y coincidió con las críticas hacia el Gobierno: "En esta preocupación que compartimos nosotros le planteamos la situación crítica y social que estamos teniendo. Para nosotros existen las condiciones objetivas, sociales, gremiales y políticas para la realización de una medida de fuerza".
Con respecto a realizarlo en época del Mundial, el gremialista fue contundente: "Si es una variable que puede perjudicar o no la consciencia de los trabajadores, estamos mal. Que haya un partido y que todos estemos pendientes de los resultados no tiene nada que ver con la realidad social que estamos pasando".
"Esto es una caída del consumo, del poder adquisitivo, ampliado por despidos. Nos han señalado innumerables cantidad de empresas del interior que están suspendiendo o bajando sus persianas, y esto tiene un impacto negativo en las economías y en la sociedad", agregó.
También rechazó el acuerdo con el FMI: "Todavía no tenemos noticias de cuál es el acuerdo, pero el protocolo clásico es siempre el mismo. Primero acotar las cuentas fiscales, y esto tiene que ver con un ajuste, la baja del déficit fiscal, un ajuste sobre las provincias y los sectores de menos recursos".