Ya sea por medio de un "reordenamiento de fondos" o la incorporación de capital privado para suplantar los gastos del Estado, lo cierto es que en el anuncio del gobierno para frenar la suba del dólar el presidente Mauricio Macri decidió recortar gastos para la obra pública de las provincias y esta decisión ya generó un clima de alerta en muchas gobernaciones.
"Nos duele tocar el presupuesto de la obra pública, pero entendemos en este contexto que necesitamos acelerar el camino hacia la convergencia fiscal", explicó el ministro Nicolás Dujovne al justificar la modificación de la meta fiscal del 3,2% al 2,7%, lo que significará un ahorro superior a los 3.000 millones de dólares.
En los hechos, esto implicará un ajuste de unos 30.000 millones de pesos sólo para fondos de obra pública. Sin embargo, horas después del anuncio oficial allegados a Dujovne explicaron a Infobae que el recorte de gastos en la obra pública ya estaba previsto de antemano y que en adelante sólo se hará un "reordenamiento de los fondos". En rigor, este parece ser un eufemismo usado para encubrir una poda real de los fondos para obra pública de la Nación desembarcados en las provincias.
Por otra parte, allegados a Dujovne añadieron que el impacto de este eventual recorte de la obra pública podría ser menor si se amplía la cantidad de proyectos de Participación Pública Pirivada (PPP) que alentó el gobierno el año pasado por medio de una ley. Hasta ahora la adhesión a este plan ha sido baja porque el sector privado no ha mostrado suficiente confianza en el gobierno.
Horas después del anuncio emitido por Dujovne y el ministro de Finanzas Luis Caputo para calmar a los mercados no estaba muy en claro en su alcance en los diferentes ministerios que están a cargo de la obra pública en las provincias. Desde el ministerio del Interior dijeron a Infobae que el recorte no le alcanza a esa cartera en lo que atañe a las obras públicas en las provincias.
"No va a frenarse ninguna obra de las que estamos haciendo actualmente a lo largo y ancho del país, en puertos, rutas, autopistas, aeropuertos, metrobús y trenes de carga y pasajeros. Frente a obras que no han comenzado iremos evaluando a partir de la restricción presupuestaria", le dijo a Infobae el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich
Lo cierto es que una vez concluida la conferencia de prensa de Dujovne y Caputo, las casillas de correo y los celulares de la Casa Rosada estallaron. Muchos gobernadores llamaron a Rogelio Frigerio, a Dietrich y al ministro de Modernización, Andrés Ibarra, para saber cuál sería el alcance del recorte en la obra pública a las provincias.
Según comentó a Infobae un gobernador de Cambiemos que pidió reserva de su nombre, "hacer un recorte de obra pública para frenar el dólar es el peor camino elegido". A la vez, desde la provincia de Buenos Aires un funcionario que está en permanente contacto con la Nación por las obras públicas dijo que "hay un temor generalizado en toda la provincia por el recorte de gastos de obra pública". Aunque admitió que por la cercanía de Macri con María Eugenia Vidal no creen que allí pase la tijera.
Desde las provincias del PJ también expresaron malestar por los alcances de las medidas anunciadas. Nadie sabe a ciencia cierta aun qué provincias serán las más perjudicadas y cuáles menos. El Ministerio de Interior se ocupó en los dos últimos años de hacer un reparto equilibrado de la obra pública. Envió fondos, incluso, en materia de obra pública urbana a más provincias del PJ que de Cambiemos. Se teme ahora que esta máxima pueda trastocarse con el recorte o el "reordenamiento de fondos".
El anuncio llega en el peor momento para el gobierno si se tiene en cuenta que Macri preveía un acuerdo con varios gobernadores, entre ellos los peronistas Juan Schiaretti (Córdoba), Juan Manuel Urtubey (Salta) y Gustavo Bordet (Entre Ríos), entre otros para convencer a los senadores y diputados opositores de no avanzar con una ley para moderar los aumentos tarifarios para no dar una mala señal al inversor extranjero.
Este mediodía, el dirigente de la UCR y crítico del gobierno Raul Alfonsín graficó lo que muchos gobernadores piensan y no se animan a decir: "Enfrentar los problemas económicos, no es solo un asunto técnico; antes que nada es político. Una respuesta técnica precisa de condiciones políticas. Y una sobredosis de medicamentos puede dañar más al paciente".