No hubo sorpresas, ni alivio, mucho menos inquietud. En la Casa Rosada siguieron con atención la sesión de Diputados en la que la oposición fracasó en su intento por exigir un límite al aumento tarifario dispuesto por el gobierno.
Desde Tucumán, donde encabezó un acto en el cual se reanudó la venta de limones a los Estados Unidos, el presidente Mauricio Macri le envió un mensaje a la oposición: "No soy mago ni estafador".
"No soy mago, me encantaría porque la verdad es que tengo admiración por los magos, pero no me sale eso. Y tampoco soy estafador. Estoy comprometido a decirles siempre la verdad, y nada que a uno le prometan que viene de regalo puede ser verdad. Todo lo que vale se construye con el esfuerzo personal, ese esfuerzo que te gratifica, que te levanta la autoestima", desarrolló.
Escoltado por el gobernador Juan Manzur y el ministro Luis Miguel Etchevehere con un camión repleto de limones como escenografía, aseguró que lo más importante "es poner siempre la verdad sobre la mesa".
Esta mañana, el jefe de Gabinete, Marcos Peña se había referido también a la cuestión: "La mayor tranquilidad que le queremos dar a los argentinos es que estamos yendo por el camino correcto y el esfuerzo no va a ser en vano".
El ministro de Energía, Juan José Aranguren, también analizó con su equipo las últimas novedades políticas y ratificó que el aumento escalonado de tarifas seguirá. Aunque en la Casa Rosada aclararon que a partir de 2019 "el costo y la tarifa de la energía van a empezar a bajar", siempre y cuando la inflación vaya también en descenso. Esto por ahora es más una expresión de deseos que de realidad concreta ya que el incremento de la inflación en los últimos meses hace pensar que no habrá una baja en la suba de las tarifas de servicios.