El abogado Alejandro Vanderbroele, considerado por la Justicia como testaferro de Amado Boudou, pidió declarar y se presentó ayer en el juicio oral y público que determinará la responsabilidad del ex vicepresidente en el proceso de compra de la ex imprensa Ciccone.
Se trató de su primera declaración como imputado luego de haber ingresado al programa de protección de testigos a fines del año pasado. En aquel momento, y según reveló Infobae el 21 de diciembre de 2017, el abogado dio información sobre la trama de corrupción que terminó con la compra de la ex Ciccone Calcográfica.
Durante la audiencia, en la que también estuvieron presentes Boudou y su socio José María Núñez Carmona, Vandenbroele ratificó lo que declaró en calidad de arrepentido al fiscal federal Jorge Di Lello. En esa fiscalía están radicadas las causas en las que Vandenbroele está imputado: el caso Ciccone, la asociación ilícita por la que fueron detenidos Boudou y José María Núñez Carmona, y el negocio entre la empresa The Old Fund y la provincia de Formosa, una "simulación" para repartirse $ 7,6 millones.
Al inicio de su exposición, el abogado contó cómo se reencontró con Núñez Carmona. Fue en el segundo semestre de 2009. "Me encuentro ocasionalmente con el señor Núñez Carmona. Lo conocí en Nueva York; era novio de una prima hermana mía. No tenía vinculación con él en Mar del Plata. Estaba tomando algo con dos amigos míos, nos golpea la ventana y nos ponemos a hablar. Me hace una mención a que 'Aimé' (Boudou) era Ministro de Economía. Yo sabía que eran muy amigos", detalló.
Y amplió: "A partir de este encuentro, Núñez me contacta porque tenía algunas operaciones y necesitaba asesoramiento legal. Lo asesoré para la potencial compra del canal 10 de Mar del Plata y de Telefé. Ahí conocí a Martín Cortés y a Gabriel Blanco. Y también me menciona la posibilidad de una operación con la reestructuración de la deuda de Formosa y que iba a necesitar formar una sociedad. Frente a eso habló con mi contador, que conocía a una persona que tenía una empresa que ya no la usaba, era The Old Fund. La sociedad la compré a nombre mío".
Sobre la reestructuración de la deuda de Formosa, Vandenbroele recordó que "la operación estaba avanzada; la llevaban adelante el gobernador (Gildo) Infrán y el ministro de economía Amado Boudou. Solo había que simular un asesoramiento con la provincia para cobrar una comisión".
Sobre este punto, el abogado añadió que "el 21 de mayo de 2010 se paga el contrato. El monto era de 7.600.000 mil pesos, eran unos 1.900.000 dólares. Eran 800 mil dólares por parte: Martín Cortés con la provincia de Formosa y la otra parte Nuñez Carmona-Boudou. Yo iba a cobrar 200 mil dólares. Yo le di la parte a Nuñez Carmona en mano. Compré los dólares en el banco Macro sucursal Sarmiento 447 y se la di a Núñez en el sector de cajas de seguridad en el subsuelo del banco".
Durante su declaración, también explicó su relación con el departamento de Boudou en Puerto Madero: "Núñez Carmona me ofrece el departamento de Boudou gratuitamente y me pide que consiga una empresa extranjera para armar el contrato de alquiler y justificar los ingresos. Así es que llamó a un amigo, Fabián Carozo Donatiello, que por hacerme un favor lo metí en un problema en el que no tiene nada que ver. En enero, febrero de 2011, decido irme del departamento porque me parecía una locura después de lo que habíamos hecho con Formosa y porque yo ya era presidente de Ciccone".
En cuanto al rol de la AFIP en toda la operatoria, Vandenbroele relató que "hubo dos momentos claves: cuando da conformidad para el levantamiento de la quiebra y la aceptación de los dos planes de pago de la empresa. Según los dichos de Núñez Carmona, Ricardo Echegaray tenía instrucciones de las mas altas esferas del gobierno nacional para que actuara de esta manera".
"Núñez Carmona me dijo que Echegaray nos quiere cagar y dejar pegado a Aimé. Me contó, además, que había viejas rencillas entre Echegaray y Boudou desde la época de Mar del Plata y que le tenía mucha desconfianza a lo que hacia. También me cuenta que en el Gobierno decidieron sacar a (la empresa) Boldt de la planta con Guillermo Moreno a través de la Secretaria de Comercio, que le pone una multa diaria de 15 mil pesos si no se iba a de la planta", amplió.
Vandenbrole, en otro pasaje de su declaración, se refirió a su situación personal: "Este tema para mi desde 2012 es un calvario. Estoy en una situación que no se como salir. El año pasado las cosas se pusieron peor cuando la causa se elevó a juicio oral", indicó, y agregó: "Cuando se conreta la detención de Boudou y Núñez Carmona pido entrar a ser arrepentido. Nunca pedí un millón de dólares. Lo único que quiero con esto es poner un punto final, pagar mis culpas, y comenzar a desarrollar de nuevo mi vida".
También habló sobre su situación personal con Laura Muñóz, su ex mujer: "Es muy difícil esta situación porque es la madre de mi hija. Son incesantes reclamos económicos que hizo desde un primer momento, que yo no estaba en condiciones de afrontar. Ella participó del escándalo mediátco. Se presentó en el juzgado de familia y pidió la mitad de Ciccone y de The Old Fund y una mensualidad de 12 mil dólares. Jamas la amenacé ni la maltraté ni a ella ni a su familia".
En total, Vandenbrole declaró durante siete horas, entre su testimonio y las preguntas de la fiscal Marcela Colombo, de representantes de la Oficina Anticorrupción y de la Unidad de Información Financiera. El martes que viene continuará el juicio con la declaración de tres testigos.
SEGUÍ LEYENDO