La presidencia argentina del G20 transita su primer gran desafío de cara a la cumbre de líderes de Estado del 30 de noviembre próximo. Sin problemas de seguridad –no existieron marchas ni escraches–, el principal foco de combate son las propias sesiones de la primera reunión de ministros de Finanzas y presidentes de bancos centrales del foro, el más importante del mundo.
La pelea para que los Estados Unidos den marcha atrás con los aranceles al acero y al aluminio ganó el centro de la escena. Aun cuando el tema no se trató formalmente, está en cada una de las reuniones bilaterales y las conversaciones con la prensa nacional e internacional.
En este escenario, al que se suman las intenciones del mandatario de llegar a un acuerdo comercial con la Unión Europea, el presidente Mauricio Macri hará su aparición en una de las sesiones plenarias en el Centro de Exposiciones y Convenciones de Buenos Aires. Su mensaje apuntará a preservar el foro como un espacio para debatir ideas y avanzar.
Macri abogará por el multilateralismo y la cooperación internacional. Según confiaron a Infobae, el G20 debe permanecer como el lugar donde se discutan políticas para que la sociedad global avance y se perfeccione.
El mandatario remarcará que el foro es el lugar ideal para evitar conflictos y profundizar las relaciones entre los Estados. Insistirá, además, en "preservar" el ámbito de debate.
El mensaje de Macri va en línea con lo que se espera del comunicado del final de esta jornada. A las 15, el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne brindará, en una conferencia de prensa, el texto.
"Multilateralismo" es uno de los conceptos más repetidos por los funcionarios argentinos y gana peso tras la decisión del gobierno estadounidense de imponer aranceles al acero y al aluminio, que abre las puertas a una guerra comercial.
Es que el tema se coló en la agenda argentina del G20 aunque no haya un panel que se titule así. De hecho, ayer, en la sesión de riesgos de la economía global, las "tendencias proteccionistas" fue uno de los dos temas más dominantes. El otro, fue la suba de las tasas de interés en países desarrollados, en particular en Estados Unidos.
El ministro de Hacienda, además, se reunió con el secretario del Tesoro norteamericano, Steve Mnuchin, para reiterarle el pedido para quedar fuera de los aranceles. El argumento es la poca participación de la Argentina en el comercio de estos productos específicos: la importación de acero argentino por parte de Estados Unidos es apenas el 0,6% y en el caso de aluminio llega a 2,3 por ciento.
Luego del comunicado, se espera la conferencia de prensa de Mnuchin, donde quedará oficializada la reacción norteamericana a los reclamos de todos en Buenos Aires.
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