Ahora, el Gobierno también posterga la reforma laboral desdoblada para evitar peleas en el Congreso

Dejará para más adelante el debate que la Casa Rosada tenía previsto en dos tramos. Quiere armar una "agenda light" para lograr consensos con la oposición

Guardar
(Presidencia)
(Presidencia)

Ni el texto completo ni un proyecto desdoblado. Nada de eso. El Gobierno postergará el debate de la reforma laboral para más adelante con la excusa de evitar una confrontación con la oposición en el Congreso y apuntar a lo que Mauricio Macri denomina una "etapa de consensos" legislativos y debate abierto.

Las principales espadas de Cambiemos en la Cámara de Diputados y en el Senado coordinaron hoy con la Jefatura de Gabinete un temario tentativo de proyectos del oficialismo para avanzar en el Congreso y sugestivamente no están incorporados en ese listado los proyectos de la reforma laboral.

Desde el Ministerio de Trabajo que lidera Jorge Triaca admitieron a Infobae que la postergación de este proyecto conflictivo es un hecho. "Todo está en manos de lo que definan los legisladores nuestros como estrategia en el Congreso. El ministro ahora está abocado a cerrar las paritarias", se limitó a decir un allegado a Triaca. De hecho, hoy se cerró la paritaria con los colectiveros de la UTA.

La decisión de Triaca de concentrarse en el debate de paritarias en este momento del año y no abrir otro foco de conflicto con los gremios también es uno de los temas que se abordaron a la hora de definir la postergación de la ley de reforma laboral.

El punto que aún debe resolver el Gobierno ante esta decisión es el de frenar la molestia de los empresarios. Sucede que la nueva ley de formalización laboral podría eximir del pago de multas a los empresarios que regularicen la situación de sus trabajadores y el Estado reconocería a cuenta los aportes al sistema previsional por los años en los que el empleado haya estado en la informalidad.

Pero en el Gobierno y entre las espadas del oficialismo en el Congreso creen que es más factible evitar un frente de conflicto en el Congreso que resolver los reclamos empresariales.

De este manera, el Gobierno, en coincidencia con los legisladores de Cambiemos, sostiene que "no es bueno arrancar el año legislativo con duras confrontaciones". La traumática experiencia de un diciembre virulento con el debate de la ley previsional dejó en el oficialismo una marca profunda que no quiere volver a transitar.

Por otra parte, el período de "luna de miel" que vive Macri con los gremios alejados de Hugo Moyano y del resto de la CGT confrontativa son señales inequívocas de que un debate por la reforma laboral sería inoportuno ahora.

Es que hace menos de una semana los gremios antimoyanistas dieron un mensaje de distensión con la Casa Rosada al no concurrir a la marcha convocada en la Avenida 9 de Julio por Moyano y las dos CTA para repudiar medidas del Gobierno.

Si bien el triunvirato de la CGT avaló en su momento la idea de desdoblar en varias leyes el proyecto de reforma laboral, lo cierto es que hay sectores del gremialismo que creen que el primer paquete de la iniciativa oficial que prevé un nuevo esquema de indemnizaciones junto con el blanqueo laboral no es una buena medida.

Tanto el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, como el titular de la Cámara baja, Emilio Monzó, al igual que los jefes de las bancadas del PRO y la UCR en ambas cámaras creen que no es un buen momento político para iniciar el año con una dura confrontación con la oposición. De esta manera, consensuaron con la jefatura de Gabinete un "temario light" en la primera etapa del año que no contempla la reforma laboral ni siquiera desdoblada.

En el listado esbozado en estos días en la Casa Rosada y el Congreso para avanzar con leyes oficialistas en al Parlamento se prevé, entre otros temas, la reforma política, el nuevo Código Penal, la ley de mercado de capitales y el proyecto de compre argentino, entre otros temas.

SEGUÍ LEYENDO:

 
Guardar