"Es muy difícil. No sé… Habría que tener algo muy contundente. Qué sé yo… ¡Una foto de ella contando plata! No la veo", aseguraba a última hora de la semana pasada uno de los principales dirigentes del oficialismo en el Senado, acomodado en uno de los sillones de su despacho de la planta baja de la Cámara alta.
La decisión del juez Claudio Bonadio de pedir el desafuero y la detención de la ex presidenta Cristina Kirchner no cayó simpática en la cúpula del poder y descolocó a los senadores de Cambiemos, abocados en estos días a intensas negociaciones con sus colegas de la oposición relacionadas con el paquete de leyes que la Casa Rosada quiere sancionar antes de fin de año, y por el que se espera la publicación del decreto presidencial de llamado a sesiones extraordinarias que Mauricio Macri ya tiene a la firma en su despacho.
La situación de la senadora y ex presidenta no es igual, según razonan desde el oficialismo, a la de Julio De Vido, cuyo desafuero fue impulsado por el macrismo en Diputados. No solo por cuestiones judiciales –la resolución de Bonadio por "traición a la patria"–, sino hasta por razones políticas: la Casa Rosada no quiere presa a Cristina Kirchner. Cambiemos se siente cómodo en la confrontación permanente con ella. Le dio oxígeno en estos primeros dos años de gestión. La ex presidenta divide al peronismo, fundamental para el proyecto de reelección del jefe de Estado.
En ese plano, el Gobierno se enfrenta a una disyuntiva. ¿Cómo explicarle a su núcleo duro de simpatizantes, activos colaboradores en el ensanchamiento de la grieta, un eventual rechazo al desafuero de la ex presidenta cuando hace unos meses impulsó, por ejemplo, el del ex ministro de Planificación K? La respuesta que ensayan altísimas fuentes de Casa Rosada es que "el Senado tiene una lógica distinta" de Diputados.
Más allá del análisis interno de la situación, el Gobierno va a esperar los primeros rebotes de la noticia en el PJ. "Va a ser clave qué es lo que empiecen a decir sus senadores", explicaron fuentes oficiales de trato cotidiano con el peronismo.
blockquote class="twitter-tweet" data-width="550">Ante el pedido de desafuero por causa AMIA, corresponde estudiarlo con seriedad y fijar una posición no partidista sino institucional.
— Federico Pinedo (@PinedoFederico) December 7, 2017
A media mañana, el pedido de desafuero de Bonadio aún no había ingresado en el Senado. A pesar de eso, el senador Federico Pinedo fue el primero en fijar posición. "Ante el pedido de desafuero por la causa AMIA, corresponde estudiarlo con seriedad y fijar una posición no partidista sino institucional", escribió el presidente provisional de la Cámara alta en su cuenta de Twitter.
En ese sentido, los presidentes de bloque -incluida Cristina Kirchner- deberán analizar el pedido del juez y la mecánica de tratamiento. Según la Constitución, es un tema que debe ser tratado en sesiones ordinarias. La resolución judicial se da en vísperas del llamado a extraordinarias de Macri, que incluirá las reformas fiscal, tributaria, laboral y previsional y el Presupuesto 2018, entre otros proyectos.
Sin embargo, una alta fuente oficial le confió a este medio esta mañana que la investigación por "traición a la patria" por la que Bonadio pide el desafuero de la ex presidenta y por la que detuvo a un puñado de ex funcionarios y dirigentes K "no es una causa para que el Senado avance". "Hay que ver qué dice el peronismo", agregó la fuente. "A las 12 tenemos reunión en la Casa Rosada, seguro lo vamos a analizar ahí. Es delicado, se trata de una ex presidente. Debemos ser muy cuidadosos en el tratamiento de este tema", abundó el senador Humberto Schiavoni, presidente del bloque de Cambiemos en el Senado, en declaraciones a Radio Mitre.
Como con el combo de leyes que el Poder Ejecutivo pretende sancionar por estos días, para el oficialismo será clave el rol de Miguel Ángel Pichetto, el referente del PJ en la Cámara alta. Un dato fundamental: el senador defendió el memorándum de entendimiento con Irán cuando Cristina Kirchner lo envió al Parlamento.
Así lo recordó la ex presidenta en la conferencia de prensa que ofreció en el Instituto Patria en los primeros días de octubre, antes de las elecciones. Mostró un video editado a la perfección en el que fustigó al juez que ahora pide detenerla y pasó un fragmento de la sesión en la que Pichetto fundamentaba su voto positivo al pacto con Irán.
En Casa Rosada están convencidos de que el senador y el resto de los legisladores peronistas no acompañarán el desafuero. Al menos así lo interpretó un importante ministro después de charlas informales con ellos en los últimos meses. "No es la tradición del Senado", argumentaron.