(Enviado especial).- El obispo de Bariloche, Juan José Chaparro, envió un mensaje claro a la comunidad mapuche del Lof Lafken Winkul Maipu que ocupa terrenos de Parques Nacionales en Villa Mascardi en una entrevista con Infobae: "No queremos que haya tanta obcecación y dureza; si no, siempre pierde el más débil".
Las palabras de Chaparro son relevantes si se tiene en cuenta que como representante de la Iglesia fue uno de los convocantes a la mesa de diálogo que se armó ayer entre las comunidades indígenas y el gobierno nacional a partir de la muerte de Rafael Nahuel en un enfrentamiento que hubo del Lof Lafken Winkul Maipu con la Prefectura.
Además, el obispo de Bariloche dijo que dialogó con el papa Francisco sobre el conflicto que hay en el sur entre los mapuches y el gobierno nacional, y el mensaje que le emitió el Sumo Pontífice fue directo: "el Papa está al tanto del tema y siempre nos da directivas para mantener la paz y el diálogo, que no es fácil".
—¿Qué se puede esperar de esta instancia de diálogo para la resolución del conflicto en la toma de tierras de Villa Mascardi?
—Lo importante es armar este espacio de diálogo. Se empezaron a poner los temas sobre la mesa. Y hay un variopinto de temas. Pedidos de la gente del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) y de las comunidades. El tema no es fácil ni sé si llegaremos a buen puerto. Pero es importante esta mesa de diálogo porque pacifica, hace que nos escuchemos y una vez iniciado este ámbito se dan las garantías para que no haya un enfrentamiento. Por eso auspiciamos el diálogo desde distintos sectores de la sociedad, las universidades, los defensores del pueblo, la Iglesia. No sabemos si llegaremos a buen puerto, pero esperanzas tenemos siempre.
—¿Cree que esta mesa de diálogo puede frenar cualquier intento de violencia o un accionar judicial que termine en una situación más complicada?
—Es una posibilidad. La idea es atenuar la violencia. Esperemos que se busquen instancias de recomposición. Por ejemplo, de visitar a los detenidos, asistir a los heridos… Se está dialogando todo. La presencia del INAI también es importante y esto es una gran oportunidad para sentar un buen precedente de diálogo. No es un proceso fácil.
—¿Pero qué se puede resolver ante la postura intransigente de los mapuches que dicen que no van a desalojar las tierras de Parques Nacionales?
—Hay que corregir. No son todos los mapuches los que plantean esto. Es una comunidad la que hace ese planteo. No es un tema de todos los mapuches que están obcecados y encerrados en sus posiciones. En las comunidades también hay búsqueda de soluciones, consenso. Si no, no nos sentaríamos en una mesa. Creo que la inmensa comunidad mapuche que está en todas partes quiere caminos de paz.
—¿Y usted como referente de la Iglesia qué les dice a los que resisten en Villa Mascardi puntualmente?
—No queremos que haya tanta obcecación y dureza porque si no, siempre pierde el más débil. Ya vimos con una muerte cómo terminó ese camino. Lo que pido es que se cuide la vida de todos. El Estado entiendo que lo quiere hacer en el marco de la legalidad. Por eso hay un juez que está trabajando. Eso es lo más concreto que tenemos. Hay que buscar caminos para acercar posiciones.
—¿Se comunicó con el papa Francisco para hablar de este tema?
—No tenemos un mensaje concreto para esta situación. Él está al tanto del tema y tuve comunicaciones con él antes. Hacemos lo que nos pide que es estar cerca de la gente, de las comunidades y tratar de resolver todo esto por la vía pacífica. Siempre el Papa nos da las directivas de mantener la paz. No es fácil el camino pero hay que recorrerlo. Estamos tratando de llevar ese mensaje.