Por segunda vez, en menos de 40 días, la Cámara Federal le ordenó al juez federal Sebastián Casanello para que decida si llama o no a declaración indagatoria a la ex presidenta Cristina Kirchner en la causa de la ruta del dinero K. El tribunal intervino a raíz de una fuerte disputa entre el magistrado y la Unidad de Información Financiera (UIF), que viene reclamando una definición sobre la situación procesal de la ex presidenta.
Los integrantes de la Sala II, Martín Irurzun y Eduardo Farah, cuestionaron en duros términos el avance de la investigación y las respuestas del juez ante los pedidos de las querellas. "En todas estas idas y vueltas lo que con evidencia deja de lado es que, en ese marco y en la etapa preparatoria del procedimiento penal vigente, la tarea de recolección de pruebas es responsabilidad del Juez –y del Fiscal en su caso- con independencia de los aportes que puedan realizar las restantes partes", dice la resolución de apenas cuatro carillas.
La disputa no es nueva. Hace más de un año, la Cámara intimó al juez a no dilatar "innecesaria e indefinidamente" con medidas con "predecible destino de fracaso" la causa y le ordenó que investigue a la ex presidenta. "Es de la lógica más elemental sospechar acerca de la íntima relación existente entre la cuantiosa adjudicación de obra pública a Báez (y su grupo económico) y las referidas relaciones del nombrado con los ex Presidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández", aseguró el tribunal en ese momento.
Pero el juez mantiene su postura y reclama documentos oficiales que confirmen que la ex presidenta participó del lavado de dinero que hizo el empresario Lázaro Báez.