La procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, quien está procesada por presuntas irregularidades en la compra de un edificio del organismo, presentó hoy su renuncia que tendrá efectos a partir del 31 de diciembre.
"A esta altura de los acontecimientos estoy persuadida de que mi permanencia en el cargo redunda en decisiones que afectarán de manera sustancial la autonomía del ministerio Público Fiscal", escribió la funcionaria.
En este sentido, Gils Carbó manifestó que deja el cargo "con la esperanza de que esta decisión disuada de reformas que rompan el equilibrio que debe regir el sistema de la Justicia".
Además, afirmó que trabajó "incansablemente" para "jerarquizar" la institución que dirige "como una autoridad de la Nación independiente y autónoma".
"Las mismas razones que inspiraron mi accionar durante veinte años en la institución motivan hoy mi alejamiento", señaló.