El gobierno nacional quiere evitar que Cristina Elisabet Kirchner viaje a Europa. Así se desprende de la presentación que realizó este lunes la Unidad de Información Financiera (UIF) en el juzgado de Julián Ercolini, magistrado que investiga a la ex jefa de Estado por la licitación de obra pública durante su mandato a favor del empresario Lázaro Báez en la provincia de Santa Cruz, y que había autorizado la salida del país de la ex mandataria.
La UIF se presentó, además, en la mesa de entradas del juzgado de Claudio Bonadio, quien investiga a la ex presidente en el caso Los Sauces y aún no se expidió sobre el pedido de autorización para salir del país cursado su abogado.
"La UIF se opone al viaje porque consideran que existe riesgo procesal de entorpecimiento . El entramado externo de sociedades y cuentas bancarias de Lázaro Báez es voluminoso, y el empresario y Cristina Kirchner están procesados en las causas judiciales 'obra pública de Santa Cruz' y 'Los Sauces'. En este contexto, es riesgoso que viaje al segundo centro financiero del mundo", señaló a Infobae una fuente calificada del ámbito judicial.
Para que la ex mandataria pueda salir del país necesita el aval de Bonadio, que había dictado la prohibición al procesarla junto a sus hijos Máximo y Florencia Kirchner -sin prisión preventiva-, al considerarlos jefes de una asociación ilícita, delito que tiene una pena de cinco años (mínima no excarcelable) a 10 años de prisión.
En el caso de que el magistrado otorgue la habilitación, las autoridades de la UIF realizarán una apelación.
La ex presidenta tenía previsto viajar en mayo a Europa para mantener reuniones con dirigentes políticos y brindar charlas en Grecia, el Parlamento Europeo y en la Universidad de Oxford.
Según se informó, fue invitada a Grecia por el Comité Central del partido Syriza para mantener encuentros con el primer ministro griego Alexis Tsiripas y con el presidente del Parlamento, Nikos Voutsis.
El segundo destino era Bruselas, donde tenía previsto reuniones con parlamentarios de izquierda y progresistas, y brindar un discurso y participar de un debate sobre derechos sociales y humanos en Argentina y la región, y del papel de la Unión Europea en ese contexto.
El cierre de la gira era Londres, donde fue invitada por The Oxford Union, la sociedad más grande de la Universidad de Oxford.
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