La AFA condicionó la agenda internacional para el encuentro entre Evo Morales con Mauricio Macri en Buenos Aires: la visita que iba a realizar el presidente boliviano el 16 de abril para estar en el superclásico entre Boca Juniors y River Plate en La Bombonera fue postergada sin fecha porque el partido será el 14 de mayo. Sucede que para entonces el jefe de Estado argentino viajará a China a una visita oficial.
Entre otros temas, la agenda entre Morales y Macri iba a incluir las negociaciones por la venta de gas boliviano, el espinoso tema del decreto migratorio del Gobierno para expulsar extranjeros que delinquen y la situación de Venezuela.
En medio de las quejas de Bolivia por el decreto migratorio del Gobierno que surgieron dos meses atrás, el presidente argentino invitó a Morales a ver en la Bombonera el superclásico. Ayer, hubo un encuentro de los vicecancilleres de la Argentina y de Bolivia, Pedro Villagra Delgado y Guadalupe Palomeque de Taboada, respectivamente, y se había acordado que la visita se haría el 14 de mayo, que es cuando dispuso la AFA el partido. Pero inmediatamente los delegados de la Argentina tuvieron que excusarse porque Macri estará viajando para esa fecha a Pekín para reunirse con Xi Jinping.
"Es una lástima que la AFA condicione nuestra política exterior. Pero a veces el fútbol es una razón de Estado que puede más que cualquier cosa", explicó una fuente de Casa Rosada a Infobae en tono irónico pero altamente realista.
Ayer, en la reunión de vicecancilleres de Bolivia y la Argentina en el Palacio San Martín se acordó establecer un mecanismo de consultas políticas a nivel de altas autoridades de ambas Cancillerías, con el fin de fortalecer el diálogo en torno a los asuntos que inciden en la relación bilateral, regional y multilateral de mutuo interés.
A su vez, destacaron la necesidad de convocar a la brevedad una reunión bilateral que incluya a todos los organismos competentes de ambos países para tratar temas de frontera. Se estableció también el compromiso de realizar la VIII Reunión del Grupo de Trabajo Binacional para la Construcción del Puente Yacuiba-Salvador Mazza y las reuniones de los Comités de Integración Fronteriza Yacuiba Salvador Mazza, Bermejo Aguas Blancas, y La Quiaca Villazón, durante el presente año.
Del mismo modo, hubo coincidencias en continuar profundizando la cooperación bilateral para hacer frente al flagelo del narcotráfico y destacaron la importancia de que pueda suscribirse a la brevedad el acuerdo de fortalecimiento interinstitucional de Estrategia Operacional para la Cooperación Policial, actualmente en negociación, a efectos de fortalecer, perfeccionar y optimizar la lucha contra el crimen organizado y narcotráfico en particular.
También Villagra y Taboada suscribieron una carta de Intención sobre Cooperación en Temas Consulares y Migratorios, a través de la cual se comprometen a realizar la próxima reunión del mecanismo de consultas consulares en el segundo semestre del corriente año y el inicio a la mayor brevedad posible de las negociaciones tendientes a la firma de un Acuerdo de Intercambio de Información con fines migratorios, que incluya información judicial y procesal.
Se dejó para la eventual reunión de los presidentes los temas más complicados: la reacción de Bolivia ante el decreto migratorio que fijó el gobierno, las negociaciones por la venta de gas y el tema de Venezuela. Sobre el primer punto, el Gobierno ya explicó que no se trata de una estrategia de expulsión de extranjeros sino una política contra la inseguridad ya que la idea es deportar a aquellos extranjeros que hayan cometido delitos. La negociación por el gas de Bolivia está en plena pulseada. Se debe rediscutir el contrato en términos de la cantidad de gas que está dispuesto a enviar Bolivia este año.
A la vez, Macri quiere abordar con Evo Morales el tema de Venezuela más allá de que ambos tienen posiciones antagónicas y el presidente boliviano respalda abiertamente al régimen de Nicolás Maduro. Pero todo esto deberá esperar para más adelante o para cuando la AFA decida poner los planetas del fútbol en la misma órbita de los presidentes.