Por estas horas el intendente de Olavarría, Ezequiel Galli, es centro de las críticas respecto a la organización y las condiciones en que se llevó a cabo el show del Indio Solari, que terminó con dos personas muertas.
Ahora se suman las contradicciones del propio Galli, en cuanto a la gente que dijo que esperaba la ciudad antes del evento y las cifras que dio tras lo ocurrido.
"Se fue de las manos, no se esperaba tanta gente realmente", dijo Galli ayer domingo tras el recital, y agregó: "Siempre se habló de 160 mil, 170 mil personas".
Sin embargo, en diálogo con una radio local días antes del show, el jefe comunal se animaba a arriesgar que habría "200 mil personas" y que inclusive su "padrino político", Jorge Larreche, vaticinaba que habría "350 mil".
Los antecedentes políticos de Galli
Entre las notas que circularon ayer domingo sobre quién es Ezequiel Galli, el hoy tristemente célebre intendente de Olavarría, si bien se mencionaba que en 2015 representó al frente Cambiemos y que acabó con 24 años de gobierno de la familia Eseverri en la localidad bonaerense, se pasó por alto el que fue el foco de las primeras críticas contra el joven jefe comunal.
Apenas asumió su gestión, Galli incluyó a familiares directos en su gobierno, una decisión que generó gran revuelo en todo el arco político opositor y que le valió el mote de "nepotista".
Apenas asumió, Galli designó por decreto a Eduardo Galli (subsecretario de Deportes y Turismo Decreto Nº 3692/15), Hilario Galli (asesor del intendente con rango de subsecretario Decreto 3737/15), Juan Ignacio Galli (director de Deportes Social Decreto 3772/15), y Mariana Galli (Decreto 3872/15).
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