Por orden del juez federal Claudio Bonadio efectivos de la Policía Federal realizaron dos allanamientos en Río Gallegos, vinculados con la búsqueda de documentación en la ruta del lavado de dinero de la causa "Los Sauces" que sigue en contra de la familia Kirchner.
Uno de los procedimientos se realizó en la inmobiliaria Sancho-Sanfelice en calle Kirchner al 400 y el segundo se llevó a cabo en calle Maipú 2200 de la capital santacruceña, donde funciona una radio del grupo comercial que está bajo sospechas de lavado de dinero. Fuentes judiciales indicaron que en el primer procedimiento no se encontró información sobre la firma Idea S.A. En tanto, en el domicilio fiscal de Negocios Patagónicos fueron hallados papeles administrativos.
Los interventores tienen extrema dificultad para conseguir la documentación de ambas sociedades. Por tal motivo, Bonadio ordenó los procedimientos con la intención de incautación de documentación probatoria que le den una pista sobre el cruce de depósitos y movimientos de fondos entre las empresas sospechadas.
La causa
La firma "Los Sauces" recibió casi con exclusividad pagos por alquileres de parte de empresas de Lázaro Báez y Cristóbal López, dos empresarios que recibieron enormes beneficios durante los 12 años de kirchnerismo.
Un peritaje contable ordenado por Bonadio y firmado en conjunto por los peritos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, los aportados por la fiscalía a cargo de Carlos Rívolo, y los puestos por los imputados, determinaron que las empresas de López pagaron por el 63% de lo facturado por "Los Sauces", en tanto las firmas de Báez aportaron un 25%. La sociedad les extendió en conjunto a López y Báez el 88% de sus facturas. Desde que comenzó a funcionar en 2006 hasta la realización del peritaje, el año pasado, la sociedad "Los Sauces" consolidó un patrimonio de 12 millones de pesos.
Bonadio designó interventores en "Los Sauces" y en la Sucesión de Néstor Kirchner. Y también interventores informantes en las sociedades de Cristóbal López y Lázaro Báez. Y también, en las del socio histórico en los negocios de los Kirchner: Osvaldo Sanfelice. Bonadio tomó esa determinación al haber corroborado en la causa una maraña de operaciones en las que se cruzaban todas las sociedades y en las que las mismas personas aparecían en diferentes estructuras jurídicas que interactuaban entre sí.