El peronismo vive una etapa de reorganización interna que atraviesa momentos de tensión, eternas horas de negociaciones, y gestiones constantes de los dirigentes de todos los sectores para buscar la unidad del partido. Todo ese trabajo tiene como fin último encolumnarse detrás de un líder y, con un esquema compacto, intentar derrotar al gobierno de Mauricio Macri.
El Congreso del PJ Bonaerense en La Matanza fue un nuevo paso hacia esa unión tan deseada. Un encuentro de dirigentes territoriales que desde hace un año luchan para organizarse, aglutinar fuerzas y tener peso en las decisiones trascendentales que se tomarán para reconstruir el partido.
"Estamos aquí para reconstruir el peronismo y recuperar la provincia", aseguró el jefe del bloque Justicialista en la Cámara de Diputados, Oscar Romero. En el espacio político que representa, las afirmaciones suele derretirse al calor de nuevas discusiones de poder. Sudado y agobiado por los 30 grados que impactaron sobre la chapa del Polideportivo Alberto Balestrini, el legislador le dijo a Infobae: "Estamos haciendo un gran esfuerzo para unir al partido. Cuando llegue el momento, el peronismo se va encolumnar".
En el PJ el horizonte es el mes próximo. No hay sentencias firmes. Hay intenciones de unidad y una discusión de la que participan todos los dirigentes que forman parte del partido: ¿Detrás de quién vamos? Es la pregunta frecuente. En el peronismo se preguntan todo el tiempo quién será el líder que aglutine voluntades y votos.
Fernando Espinoza, presidente del PJ Bonaerense, fue el encargado de abrir el encuentro. "Este Congreso demuestra la unidad del peronismo bonaerense. Esta es la fiesta de la unidad", sostuvo frente a los congresales y militantes que llegaron a La Matanza desde diferentes puntos cardinales de la provincia de Buenos Aires.
El ex candidato a vicegobernador abrió las puertas del partido y convocó a "los que no son peronistas pero la están pasando mal. A los socialistas desencantados y a los radicales arrepentidos de haber votado a Macri". Verónica Magario, la jefa comunal que reemplazó a Espinoza, afirmó que "el congreso es el comienzo de la unidad para recuperar derechos perdidos".
Antes de llegar al Congreso, un grupo de intendentes y legisladores se reunieron en la Municipalidad de La Matanza para terminar de acordar la cantidad y los nombres de los apoderados del partido. Es decir, aquellos que autorizan las listas de candidatos en el momento de la elección. Finalmente se decidió aumentar la cantidad de apoderados para que todos los sectores tengan presencia, y la decisión no quede solo en manos de representantes del kirchnerismo, como lo fue hasta el año pasado.
El nuevo esquema de apoderados quedó armado con Jorge Landau, Eduardo 'Wado' De Pedro. Gabriel Katopodis, Ariel Sujarchuck, Fernando 'Chino' Navarro, Patricio Mussi, Hugo Corvatta, Francisco Durañona, y Pedro Borghini. Además, se renovaron los nombres de la junta electoral del partido. El órgano se amplió de ocho a diez integrantes, y quedó conformado por Hugo Curto (presidente), Verónica Magario, Susana Gordillo, Juan Pablo De Jesús, Patricio García, Néstor Álvarez, Edda Acuña, Miguel Santellan y Facundo Tignanelli.
Uno de los dirigentes más importantes que estuvo presente fue Daniel Scioli. El ex gobernador llegó cerca de las doce del mediodía y, después de sacarse fotos con algunos militantes, se sentó en la punta de la octava fila de sillas de plásticos que estaban en el salón. Minutos después de que empezará el acto, un integrante de la organización lo buscó y lo guió hacia el escenario, donde ocupó un lugar central en la mesa. "Es un gran logro el acuerdo alcanzado", destacó frente a los micrófonos.
Entre medialunas y café, los dirigentes del peronismo bonaerense discutieron el futuro del partido. Los nombres se repitieron en todas las charlas: Daniel Scioli, Cristina Kirchner, Florencio Randazzo y Sergio Massa.
El PJ, por el instinto de supervivencia que lo distingue, caminará hacia el líder que tenga mayores chances de ganar en las próximas elecciones. Algunos consideran que la ex Presidente es la única que puede liderar el espacio y ordenar el partido, después del fraccionamiento que sufrió tras los resultados de la última elección. Otros creen exactamente lo contrario. Un intendente de una localidad del interior lo definió así: "Yo no canto más 'Vamos volver'. ¿Quiénes vamos a volver? ¿Vamos a volver con los que perdieron? Hace falta unidad".