Paolo Guerrero ha caído de pie en La Victoria. Está dejando atrás cualquier tipo de cuestionamiento -ya sea por edad avanzada o manera de juego- para posicionarse como el nuevo líder que necesitaba Alianza Lima en sus filas. A esa característica, además, le ha añadido su infalible olfato goleador, con el que aún mantiene a los suyos en la lucha por el Torneo Clausura 2024.
Desde su llegada a Matute, luego de una ingrata experiencia en la Universidad César Vallejo, el Depredador ha demostrado que sigue con la pólvora más vigente. Y tendrá unas evaluaciones más para sostener esa faceta, luego de que el capitán Hernán Barcos diera por terminada su participación en la presente temporada por un desgarro muscular de segundo grado.
O, por lo menos, eso es lo que se prevé a partir de sus impactantes estadísticas con respecto al resto de atacantes aliancistas. En solo 6 apariciones, Guerrero ha concretado 4 goles y 1 asistencia, lo que lo convierte en el delantero más eficaz y descollante del equipo. Sus celebraciones se dieron contra Sport Boys (x1), Universidad Técnica de Cajamarca (x1) y Sport Huancayo (x2).
El resto de compañeros no está a la altura de Paolo. Apenas el único que le lleva una ligera ventaja es el panameño Cecilio Waterman con 5 dianas, pero estas se concretaron en 15 apariciones. Además, conviene mencionar, ya no verá más acción en el año por una lesión. Detrás aparecen muy relegados Matías Succar, Pablo Sabbag, Kevin Quevedo y Víctor Guzmán.
El encaje de Paolo dentro de los planes del entrenador Mariano Soso está siendo satisfactorio, más aún si se tiene en cuenta que recién en la jornada 15° pudo totalizar los 90′ minutos reglamentarios. En Matute han querido dosificar los tiempos de su participación, pero su impecable ritmo de juego, pese a sus 40 años, convenció a todos para que asuma el liderazgo.
En resumidas cuentas, más allá de los registros cosechados en su primera incursión en la Liga 1 de Perú, la longevidad de Guerrero nos está dejando una lección: no importa los años que alguien tiene encima, lo que realmente vale es su experiencia en situaciones decisivas.