De no pasar pruebas en 4 clubes peruanos, a hacerle gol a River Plate con Alianza Lima y ser dirigido por Ricardo Gareca: la historia de José Manzaneda

El atacante peruano reveló las peripecias de los inicios de su carrera y la manera como afrontó los desafíos desde su niñez. El futbolista habló con Infobae Perú en exclusiva

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La historia de José Manzaneda:
La historia de José Manzaneda: de no pasar pruebas en 4 clubes peruanos, a hacerle gol a River Plate, ser dirigido por Ricardo Gareca y ahora en búsqueda de relanzar su carrera.

Mucho se critica la vida acomodada de los futbolistas profesionales, dadas sus jugosas ganancias. Sin embargo, pocos consideran los sacrificios que hicieron desde niños para alcanzar el éxito, renunciando a muchas cosas que otros de su edad disfrutaban. Pero como reza el dicho, solo perseverando se logran los grandes triunfos. Tal es el caso de José Manzaneda, quien transitó un duro camino siendo rechazado por 4 clubes peruanos en su infancia, experiencias que forjaron su carácter. Lejos de desistir, hoy, tras 11 años de carrera, es una estrella indiscutida de Los Chankas en la Liga 1.

En una entrevista para Infobae Perú, el extremo izquierdo de 30 años contó cómo fueron sus inicios en este deporte, el gol que le hizo a River Plate, cuando fue dirigido por Ricardo Gareca, su etapa en Alianza Lima, el título de Liga 2, entre otros temas.

José Manzaneda halló regularidad en
José Manzaneda halló regularidad en Los Chankas. - Crédito: Liga 1

José Miguel Manzaneda Pineda nació el 10 de setiembre de 1994 y, desde muy pequeño, empezó jugando al fútbol en Puente Piedra, en canchas de loza y de tierra, a la par que estudió la primaria en el colegio estatal ‘Los Sauces’. La experiencia en esta zona de Lima hizo que valore las cosas y quiera trasladarles esas enseñanzas a sus hijos.

Sin embargo, la mudanza a Jesús María le chocó y cuestionó esta idea. El jugar a la pelota en la calle, salir con los amigos y otras actividades se habían acabado. Evidentemente, esto conllevó a un cambio, con nuevos amigos, nuevo colegio y más cosas, que luego entendió. “Iba a mejorar mi calidad de vida”, comentó, agregando que desde niño tuvo el sueño de ser futbolista profesional.

El delantero colocó el esférico en un lugar imposible para el portero 'celeste'. (Video: Liga 1 Max)

Ahí se inscribió en el Club Deportivo Zela, donde hizo menores, entrenó en canchas de grass y tierra de fútbol 11, hasta que, con un grupo de amigos, probaron suerte en varios equipos, antes de anclar en Academia Cantolao.

“En (Esther Grande) Bentín, Alianza Lima, Sporting Cristal, Cienciano, en la ‘U’... en ninguno me quedaba. Hasta que pasó lo de Cantolao, que nos vio y nos dijo que vayamos a su club, pero el tema era la distancia (hasta el Callao). Ahí creo que lo más importante, por más que tenga talento, si no eres perseverante, no vas a llegar. Porque me ha pasado. Tenía amigos con mucho talento, que jugaban muy bien y que iban conmigo y viajábamos juntos, pero no llegaron porque no iban a entrenar y se quedaron en el camino”.

José Manzaneda formó parte de
José Manzaneda formó parte de las divisiones menores de Academia Cantolao, donde jugó con Ítalo Regalado (derecha) y Alexander Succar (izquierda). - créditos: Difusión

Posteriormente, sus padres le dieron un año para ver si podía dedicarse al fútbol o empezaba a estudiar. Tal y como José Miguel cuenta, la angustia le llegó hasta noviembre, cuando apareció Juan Aurich y, tras pasar una prueba, se fue a Chiclayo para firmar su primer contrato profesional e integrar el plantel de reserva el 2013.

“Me independicé y dejé a mi familia preocupada. Porque yo estaba estudiando en Lima, y de la noche a la mañana, tenía un contrato profesional para dedicarme al fútbol y en provincia. Mi mamá me quería asesinar (risas). Y mi papá peor todavía, porque eso no estaba en los planes. El fútbol siempre fue visto como algo paralelo. Pero de chiquito me preguntaban, ‘¿qué quieres ser de grande?’, y yo decía ‘futbolista profesional’. Al principio me costaba decirlo, me avergonzaba, pero dentro mío sabía que iba serlo. Así empezó mi carrera como profesional en Juan Aurich, donde estuve tres años”, relató.

- En ese lapso que dijiste que pasaste por pruebas en menores en Cristal, Alianza, Bentín y luego en Cantolao, ¿en algún momento pensaste a tirar la toalla?

La verdad que no, era muy chico y decía que todavía tenía tiempo. Aunque sí era chocante, saber que juegas bien, pero a veces, por nervios o cosas así, no lo haces bien porque tienes un día de prueba, en algunos clubes era así. Había más de 100 jugadores y no dicen tu nombre… Felizmente, lo que me pasaba a mí, también era a mis amigos, así que compartíamos esa desgracia (risas). Hasta que en Cantolao me pude desarrollar bien.

- ¿Cómo se dio tu debut en Primera División con Juan Aurich?

Fue más o menos lo mismo. Lo que te digo que, una vez que llegas a Primera División, el talento, no sé si es tan importante. Cuenta mucho, pero empiezan a haber otras cosas. Me acuerdo que yo era uno de los mejores en mi categoría (94), debo haber sido de los primeros también que le hacían un contrato profesional en Primera División cuando tenía 17 o 18 años. Veía que debutaban todos en Aurich, yo no y me sentía un poco mal. Puede ser por la posición en la que juego también, donde en ese tiempo era el mejor momento de Aurich, había tremendos jugadores arriba y yo tenía pocas oportunidades. Me tocó debutar con el ‘profe’ Roberto Mosquera contra San Simón el 7 de junio del 2014. Jugué de ‘5′, no sé si con ‘Conan’ Rojas o con Junior Viza. Había un montón que estaban por delante como ‘Neka’ Vílchez, Mariño, ‘Wally’ Sánchez, ‘Maradonita’ Merino, Germán Pacheco, el ‘Búfalo’ Ovelar, el panameño Tejada, jugadores que tienen nombre y peso. Encima venían de ser campeones. Nosotros ganamos el Torneo Apertura y jugamos la final contra Cristal en Trujillo, donde perdimos. Pero Aurich peleaba arriba siempre, eran años gloriosos.

José Manzaneda debutó como profesional
José Manzaneda debutó como profesional con Juan Aurich el 2014. - créditos: Difusión

- ¿Qué pasó para que fueras a jugar a Segunda División con Cantolao? ¿En algún momento lo sentiste como un retroceso?

Sí, claro, fue como un retroceso. Lo pensé. Estaba en ‘Muni’ y me hicieron un contrato de tres años luego de venir de Aurich, que me quería renovar por tanto dinero. Yo dije ‘no, ya me tengo que ir’, me fui y me pasó lo mismo que en Aurich. ‘Muni’ había invertido demasiado en jugadores: Pablo Lavandeira, Maximiliano Velasco y otros jugadores extranjeros. Como yo, había otros jóvenes que llegaron al club. Pero había prioridades y no tenía chances, hasta que hablé con el ‘profe’ Francisco Melgar. El campeonato había empezado y los resultados no se le daban al equipo, encima que yo no jugaba. Le dije de frente si es que me iba a usar o no, sino para irme a otro club. Entonces salió la opción de Cantolao en Segunda División, que había quedado subcampeón en la Copa de Perú. Tomé una decisión arriesgada, porque te puede salir mal. Si te vas a Segunda y no campeonas, es como si no hubieras hecho nada. Perdiste el año, prácticamente, porque lo más probable es que pases a un equipo de Segunda, pero no vas a escalar en tu carrera, es poco probable que te contrate un equipo de Primera. Gracias a Dios, se dio un año espectacular, se formó un grupo lindo que siempre tiraba para adelante. Éramos todos jóvenes, había un grupo que no eran conocidos en Primera, pero ahora ya tienen su recorrido. Estaban Gerson Barreto (César Vallejo), Kevin Paico (Comerciantes Unidos), Ítalo Regalado (Comerciantes Unidos), el colombiano Jefferson Collazos, Federico Nicosia (San Martín), ‘Coco’ Araujo (tricampeón con Universitario), Carlos Cabello (César Vallejo), Diego Pizarro; había buenos jugadores. Eso hizo que podamos salir campeones porque mantuvimos una regularidad durante el año. Empezamos mal, pero luego nos acomodamos y campeonamos. Teníamos todo en contra, estaba Mannucci, Sport Ancash, Sport Loreto, ellos tenían más chances que nosotros por la localía, la altura, el calor. Al final nos repusimos y lo sacamos adelante con el ‘profe’ Carlos Silvestri.

- Fuiste el mejor jugador de ese torneo…

Sí, una alegría total. Ahí ya mi madre sabía que iba a ser jugador, ya estaba convencida (risas). Justo ella empezó a ir al estadio cuando yo estaba en Segunda con Cantolao, escuchaba los comentarios de la gente en la tribuna y todo. Ahí ya como que dijo ‘entonces mi hijo sí juega (risas). En la ceremonia de gala fui con ella, estaba súper contenta, orgullosa. Me dieron el premio del ‘mejor jugador’, estuve en el once ideal. Fue un bonito año.

José Manzaneda fue uno de
José Manzaneda fue uno de los artífices del título de Liga 2 de Academia Cantolao el 2016. - créditos: Bruno Enriquez

- Tiempo más tarde llegaste a Alianza Lima, después de Municipal.

Eso también fue un ‘chongo’, porque yo pasé dos años en Cantolao de tres que tenía en ‘Muni’, donde solo estuve un año. O sea, iba a ‘Muni’, hacía pretemporada y me prestaban. Y en uno de esos préstamos a Cantolao, me llamaron a la selección. Es raro. Luego, terminó mi año en ‘Muni’, clasificamos a la Copa Sudamericana y me llamaron. En ese tiempo, me llamó Pablo Bengoechea y quería que vaya, pero después lo sacaron y cortamos comunicación. Igual yo hablé con la dirigencia de Alianza y me llevaron. Estuve con Miguel Ángel Russo en esa primera etapa. Luego viene (Pablo) a mitad de año porque lo sacaron a Miguel.

- ¿Qué me puedes comentar de Miguel Ángel Russo?

Era una experiencia única porque yo sabía la clase de técnico que era. Sabíamos que tenía mucha experiencia en Copa Libertadores, había campeonado con Boca y había dirigido a grandes jugadores. Fue así como me pasó en la selección cuando tuve a Ricardo Gareca, sabes que no tienes al frente a cualquier persona. Es alguien que ha pasado por muchas cosas, que ha campeonado, que tiene su recorrido y es muy respetado. Lo ves de otra manera, me causaba admiración. Yo trataba de aprovechar cada momento que se me daba. Saber que me consideraba bastante me motivaba, me hacía sentir mejor jugador.

Miguel Ángel Russo dirigió a
Miguel Ángel Russo dirigió a Alianza Lima los primeros cuatro meses del 2019. - créditos: Difusión

- Aún se recuerda mucho tu gol a River Plate. ¿Es el más importante de tu carrera?

Sí, ese puede ser el más importante porque también ha generado un montón de cosas. Quedas en la historia, no sé cuántos otros jugadores le han marcado un gol a River o a Boca.

- ¿Fue una jugada preparada?

No. Sino que el ‘Gato’ la saca larga porque tiene esa habilidad. Ahí el defensa también calculó mal y el bote me queda preciso. Ya estaba solo frente al arco, era ponerla en cualquier lado y salió el gol. A ese partido también fue mi madre. Me acuerdo que me contó que, por la euforia, había un señor que se desmayó en el estadio. Tuvieron que llamar a la ambulancia y los bomberos para que lo revivan. El partido fue una locura. Estábamos a punto de ganar, si no nos meten el gol de tiro libre al último minuto. Era el River de Gallardo, que salió subcampeón de la Libertadores.

El extremo peruano le anotó al 'millonario' en el Estadio Nacional de Lima por el torneo de Conmebol. (Video: FOX Sports)

- El 2020 pasaste a César Vallejo, pero luego regresaste a Alianza Lima el 2021, en una situación crítica del club. ¿Cómo valoras esta decisión?

En Vallejo también empecé jugando. Me llamó ‘Chemo’ porque quería que vaya y no lo pensé mucho. Empecé jugando y se dio lo de la pandemia, donde se paralizó el fútbol. Cuando se reanudó, pasaron muchos meses y no me sentía cómodo, no pude explotar todas mis cualidades. No me sentí muy útil para el equipo y, a final de año, se lo hice saber a ‘Chemo’. Luego pasó lo de Alianza Lima, que cuando surgió la oportunidad, no lo pensé mucho. Sentía que tenía que ir, y mi familia se puso contenta de que regresé.

- ¿Con qué te encontraste el 2021 en Alianza Lima?

Había cambiado todo, con muchos jóvenes y gente experimentada que ahora está en el club. Llegó Hernán (Barcos), (Josepmir) Ballón, (Jefferson) Farfán, el ‘Zorrito’ Aguirre. Es gente que al final suma en tu carrera, en el club, y guiaron un grupo de muchos jóvenes como Jairo Concha, ‘Richy’ Lagos, Sebastián Gonzales Zela, Ángelo Campos, Steven Rivadeneyra. Había un buen grupo y todo se fue dando, terminamos como campeones.

José Manzaneda salió campeón de
José Manzaneda salió campeón de la Liga 1 con Alianza Lima el 2021, compartiendo con Wilmer Aguirre y Josepmir Ballón, entre otros referentes. - créditos: Alianza Lima

- Por otro lado, no has dado el salto al extranjero. ¿En algún momento existió esa oportunidad?

Tuve varias. Aún tengo esa espinita, luchando para que se pueda dar.

- ¿A dónde pudiste llegar?

Pude llegar a la Segunda de Brasil y México.

- ¿Qué pasó?

Lo que le pasa a la mayoría de jugadores. Temas de dirigentes… El tema del fútbol es bien complejo porque sabes que todos tienen que ganar algo, hay muchas influencias. Para que veas a un jugador en tal sitio es porque muchas cosas se han tenido que dar. En mi caso, todas las partes no han estado conformes, así que no se pudo dar lamentablemente.

- Te refieres a comisiones de representantes y dirigentes…

Eso hay en todos lados, es lo más normal. Pero el tema es que se pongan de acuerdo. Lamentablemente, en mi caso no pasó.

- ¿Se pueden saber esos clubes?

Pude haber ido a Lobos BUAP de México, a Xolos de Tijuana, a Coritiba de Brasil cuando descendió. Y cuando me fui a Alianza, la otra opción era Mineros de Zacatecas de México, porque el Grupo Pachuca se contactó conmigo y era decidir entre los dos clubes.

- ¿Cuánto te afectó que no se hayan concretado esas opciones?

En su momento me afectó bastante, porque son cosas que de niño sueñas. Entonces, que se vean truncadas o que no se llegue a dar por diversas situaciones, a veces por cosas ajenas a ti, incomoda y molesta. Hay gente que ni les pasa en la vida, hay jugadores que nunca los llaman del extranjero, y yo te he nombrado algunas. En ese momento me sentí súper bien, orgulloso de estar en la órbita, pero como no se dio, te choca.

Selección peruana

- No tuviste la chance de jugar por las selecciones menores de Perú, salvo en los Juegos Panamericanos, pero sí en la mayor. ¿Recuerdas cómo fue el llamado?

Fue tremendo. Como te dije, fue raro porque me convocaron estando a préstamo en Cantolao, venía de jugar Segunda, era mi primer año en Primera División. Todo se fue dando muy rápido. Aparte, formé parte de la selección que clasificó al Mundial después de tantos años. Fue algo muy emocionante, de mucho orgullo, para mi familia también. Son momentos que no los puedes explicar con palabras, pero que cuando los recuerdas, te llenan de alegría y orgullo.

- ¿Qué rescatas de haber sido dirigido por Ricardo Gareca?

Ricardo es un tipo con una personalidad muy marcada. Creo que eso fue lo que hizo que la mentalidad del futbolista peruano cambie. Eso ayudó un montón, mira todo lo que hizo por la selección, ayudó a que clasificara al Mundial después de tantos años, confió en el futbolista peruano. Era un tipo muy recto y a la vez muy familiar, era como un padre para todos, se hacía querer. Son cosas que al futbolista peruano le gustan. Es chacotero, pero siempre que llega el momento en el que tiene que trabajar serio, él era un tipo así. Creo que ayudó mucho a una generación.

- Varios jugadores contaron que Ricardo Gareca, como una manera de motivar a los jugadores, era comparándolos con otras figuras del extranjero. ¿En tu caso te hizo alguna comparación?

Me acuerdo que teníamos charlas personales, de videos. No me acuerdo exactamente con qué jugadores me comparó, porque había varios, pero sí lo hacía. Yo decía, ‘pero estos no juegan acá, sino en Europa ¿cómo me están comparando con estos? (risas)’. Te hacían ver que no estabas alejado del nivel, que estabas compitiendo, y tenías casi los mismos datos que jugadores que estaban en el extranjero, en equipos muy grandes, a nivel de selección. Eso te motivaba también. Creo que esa ha sido una parte muy importante de Ricardo. Me acuerdo que hubo un partido con Cantolao ante Alianza en Matute. Ahí ya estaba en la selección y los ‘profes’ fueron al estadio. Al día siguiente que fui a la selección me dijeron ‘esto es lo que tú tienes que hacer todos los fines de semana’. Vi y tenía 17 regates exitosos contra Alianza, un equipo grande. ‘Cada vez que juegues tienes que tener estos datos, 15 a 17 regates exitosos. Eso es lo que buscamos en un extremo’. La semana siguiente había metido 3 regates exitosos (risas), había bajado bastante.

- Estuviste en el amistoso con Paraguay, pero ¿sientes revancha por no haber podido jugar con Perú partidos oficiales?

Sí, siempre se siente ahí alguna revancha por algún momento que no ha sido exitoso. Pero mientras esté activo en el fútbol, todo puede pasar. Puedo llegar al extranjero, ser convocado a la selección. Yo voy a seguir como era de chiquito siempre, luchando por esos sueños que tengo. De chiquito lo hacía y ahora no lo voy a dejar de hacer.

José Manzaneda debutó con Perú
José Manzaneda debutó con Perú en un amistoso ante Paraguay en Trujillo el 2017. - créditos: Getty Images

- Esta temporada veo que tienes buenos números, comparado con otros años. Ya llevas 7 goles y 2 asistencias. ¿En algún momento has tenido conocimiento de que Fossati te ha estado siguiendo?

No, no he tenido conocimiento sobre eso. Pero me imagino que por la forma en que juega, es un poco difícil para los extremos y delanteros, todos están peleando por dos puestos. Pero sí estoy teniendo una buena temporada, he cambiado muchas cosas para estar con este presente, así que en algún momento se dará la oportunidad.

- ¿Qué cosas has cambiado?

Antes era muy descuidado en la alimentación, tampoco hacía trabajos en el gimnasio. Son cosas pequeñas que al final hacen que, por ejemplo, no te lesiones, que puedas jugar todos los partidos durante el año. Al menos que estés activo para cuando el entrenador te necesite, porque puedes ser titular o suplente, pero una cosa es estar disponible y otra es estar lesionado. La verdad, que desde mediados del 2022 que cambié mi forma de alimentarme y empecé a trabajar la fuerza, que mi carrera en un momento en el que estaba mal, empezó a repuntar de nuevo. Lo que pasó este año es algo que he ido formando en estos dos años y medio, y que ahora se están dando algunos resultados. Tengo 7 goles sí, pero pretendo que sean más en las cuatro fechas que quedan para poder estar tranquilo. Terminar bien el campeonato, que el equipo, no solamente se salve del descenso, sino que también pueda tentar un cupo a un torneo internacional.

- ¿Qué pasó en el 2022 para que hayas hecho esa reflexión y decidas hacer un cambio en tu vida?

Me acuerdo que estaba en Cantolao. Volví y pensé que iba a jugar todos los partidos porque me sentía bien. Yo creía que me sentía bien, pero en realidad no porque terminaba mal los partidos, fatigado, no me sentía bien, me lesionaba, jugaba un partido sí y otro no. Cuando había partidos cada tres días, llegaba a uno, pero al siguiente no me recuperaba totalmente, y si lo jugaba, lo hacía a media máquina. Ahí dije ‘no, no puede ser que estoy en Cantolao y me está pasando esto, no hay chance, es ahora o nunca, algo está pasando y debo cambiar, porque sino mi carrera no da para más’. Cambié todo.

- ¿Fue por decisión propia o conversaste con algún familiar o algún amigo?

No, siempre he sido alguien que toma iniciativas, siempre va al frente y toma decisiones, a veces radicales, pero que tienen un rumbo. En ese caso, tomé esas decisiones y me ayudaron un montón. Ahora lo sigo haciendo, ya se crean hábitos y lo voy a seguir haciendo durante toda mi vida.

El atacante de Los Chankas contó que hizo una autoanálisis para ver cómo explotar futbolísticamente a partir de este año. (Video: Infobae Perú / Joaquín Parra)

- ¿Cuál es el techo de José Manzaneda?

No hay techo porque yo me siento un jugador diferente. Quizás en otro momento te hubiera respondido diferente porque al tener lesiones, dolores y no poder jugar partidos seguidos… Ahora creo que he jugado todos los partidos del año en altura, donde es mi primera vez. Físicamente estoy bien, mis estadísticas son buenas. Se puede mejorar, claro, pero me siento un jugador diferente al resto, muy importante en el equipo, porque puedo dar diferentes cosas, jugar en varias posiciones, me siento muy útil para el equipo. Aparte, cuento con habilidades que no todos tienen, eso también me hace tener responsabilidades porque se espera algo diferente de mí, algo más, que meta goles, asistencias, que juegue mejor que el resto. Ahora siento que estoy aportando eso.

En lo que va de tu carrera, ¿cuál consideras que ha sido el técnico que más te ha aportado?

Ha habido varios. No podría decirte uno solo porque he tenido en cada etapa de mi vida, desde que empecé de niño. Técnicos que me marcaron para bien, por ejemplo, en Zela, Sergio Villacorta, que es el que nos inició ese grupo de chicos en el que hay varios en Primera División. Hay otros que ya no están en la profesional, pero en su vida les ha dado un montón por todo lo que ha generado en esas edades, que es tan importante, porque o tomas un buen rumbo o también te puedes ir para cualquier lado si no estás bien guiado. Luego el ‘profe’ de Cantolao, Guillermo Esteves, fue el que nos llevó desde Zela en esa etapa importante de formación. También Carlos Silvestri, que me movió a la posición en la que juego ahora. Ahí tengo una historia. Me acuerdo que llegué a Cantolao en Segunda y yo jugaba de ‘6′ u ‘8′. Entonces, en la pretemporada estuve con Ítalo (Regalado), él de ‘9′. Ahí el ‘profe’ me dijo que mi posición ya la tenía copada. Yo decía ‘no, no puede ser, voy a Segunda y mi posición está copada. O sea, en Primera no juego, en Segunda ya está copada’ (risas). Él también había llevado a tres jugadores que dirigió en la ‘U’: Kevin Paico, José Cáceres y Gerson Barreto. Pero me dijo que me buscaría una posición y, según cómo jugaba, le faltaba uno por izquierda, y me probó. Hicimos partidos con Cristal, San Martín, y anotaba goles, entonces me quedé como extremo. Lo único que me decía era que juegue abierto y que mi responsabilidad era seguir al marcador. Yo soy un poco desordenado y él me facilitó las cosas. Luego está Roberto Mosquera, que me hizo debutar. ‘Chemo’ también, eran espectaculares sus entrenamientos, lástima que hubo lo de la pandemia. Todo era con pelota, el equipo físicamente estaba muy bien, les jugábamos de igual a igual a cualquiera. En ese tiempo, Vallejo estaba muy bien. Llegaron (Yorleys) Mena, (Jairo) Vélez, y ‘Chemo’ fue muy importante. En Sullana también he tenido técnicos como (Carlos) Compagnucci, el ‘profe’ Ágapo que apoyaba bastante a los jugadores. Ahora en Los Chankas, Pablo Bossi, (Juan Carlos) Bazalar que me trajo. Miguel Ángel Russo en Alianza, Pablo Bengoechea. Muy contento de haber trabajado con ellos, me generaron algo importante en mi carrera.

- Aún tienes años de carrera, pero ¿has pensado a qué dedicarte cuando te retires?

Todavía no lo he pensado. Estoy disfrutando este momento, sé que en algún punto se acaba y va a ser duro. Estoy disfrutando cada entrenamiento, cada viaje, cada concentración. Comentándolo también porque hay gente joven que viene de atrás y les digo que aprovechen, que el tiempo pasa volando. Ya pasaron 10 años desde que debuté, tengo como 12 pretemporadas, he viajado. El fútbol me ha dado tanto, te da prestigio, he jugado un montón, he estado en la selección. Ahora aprovechando cada momento para seguir mejorando y que el fútbol me siga dando cosas.

- ¿Un mensaje final?

Agradecer al fútbol porque me ha dado todo lo que soy. Desde muy chiquito quise ser futbolista profesional, lo logré. En el transcurso me dio la posibilidad de estar en la selección, lo logré. Y siempre le voy a estar agradecido por todas las alegrías que me ha dado, a mi familia, a mis padres, a mis hermanas, a los que me rodean. Siempre le voy a estar agradecido al fútbol porque es todo para mí, a lo que me dedico. Si en algún momento no fue así, me dedico ahora al 100% a mi carrera y trato de aprovecharlo cada día para poder sobresalir, para mostrar lo que vengo haciendo en la cancha cada fin de semana, y estoy muy orgulloso de eso. Siempre trato de retribuirlo.

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