Se viene el desafío más importante para la selección peruana en la Copa América 2024, buscando una clasificación milagrosa a los cuartos de final. La ‘bicolor’ se medirá contra Argentina, defensora del título continental, con la obligación de quedarse con los tres puntos y, en medio de la trascendencia de este duelo en el Grupo A de la competición, la Conmebol designó como árbitro principal a César Ramos, quien ha estado envuelto en polémicas recientemente.
A través de una publicación oficial, el ente sudamericano organizador de este campeonato comunicó que el réferi mexicano -categoría internacional FIFA desde el 2014- será el encargado de impartir justicia en el choque entre la ‘blanquirroja’ y la ‘albiceleste’ este sábado 29 de junio en el Hard Rock Stadium de Miami, Florida.
Ramos estará acompañado por sus compatriotas Alberto Morín y Marco Bisguerra como jueces de línea, mientras que los venezolanos Alexis Herrera y Lubin Torrealba serán cuarto y quinto árbitro, respectivamente. Asimismo, el mexicano Guillermo Pacheco será el principal encargado del VAR, asistido por Erick Miranda de su misma nacionalidad.
Es importante mencionar que esta será la primera vez que el réferi de 40 años dirija un partido oficial tanto de la selección peruana como de Argentina. Eso sí, en el 2015 se encargó de un amistoso de la ‘albiceleste’ con su similar de Bolivia, que terminó en triunfo con contundente goleada por 7-0 del elenco entonces dirigido por el ‘Tata’ Martino. Lionel Messi logró un doblete en ese cotejo.
A la ‘bicolor’ no le dirigió nunca antes, ni si quiera en un amistoso. Pero desde el entorno nacional se espera que César Ramos esté a la altura del enfrentamiento, que será determinante para las aspiraciones del cuadro dirigido por Jorge Fossati. Al combinado patrio solo le sirve una victoria para soñar con la siguiente fase de la competencia.
Un debut con polémica en la Copa América 2024
César Ramos ya dirigió un partido en la Copa América 2024. Su debut como juez principal en la presente edición del torneo continental fue en el choque entre Brasil y Costa Rica por el Grupo D de la competencia, que finalizó en empate sin goles (0-0). En esta contienda transcurrieron jugadas controversiales que perjudicaron al ‘scratch’: un gol anulado por posición adelantada y una falta en el área contra Vinicius Júnior, que no fue pitada.
“El árbitro estuvo en vuelto en la polémica por anular el gol de Marquinhos por offside y no cobrar un penal ante Vinicius. El mexicano permitió el juego físico por parte de los centroamericanos y no se detuvo en cobrar demasiadas infracciones. La ‘verdeamarela’ terminó con 13 faltas cometidas y los Ticos con 10″, detalló el portal argentino TyC Sports en un artículo sobre el réferi mexicano.
“Más allá de los antecedentes, su designación despertó polémica porque México es un posible próximo rival del campeón del mundo, si es que este termina primero del Grupo A (lo más probable, con un punto le alcanza) y los aztecas le ganan el mano a mano a Ecuador por la plaza que resta definirse en el B. Llegado el caso, sus hipotéticas decisiones disciplinarias podrían influir directamente en ese posible duelo de cuartos de final”, añade sobre la probabilidad de que el combinado azteca enfrente en la siguiente ronda al equipo de Lionel Scaloni.
Fuerte cruce con Cristiano Ronaldo
César Ramos tiene una amplia trayectoria en el fútbol internacional. Ya ha dirigido dos Copas del Mundo e incluso fue protagonista en la semifinal de Qatar 2022 entre Francia y Marruecos. Asimismo, en Rusia 2018 tuvo una complicada experiencia en el enfrentamiento entre Portugal y Uruguay, donde sostuvo un fuerte cruce con Cristiano Ronaldo.
Aquella vez, el astro portugués le reclamó airadamente al mexicano por sus decisiones en la cancha, lo que le hizo ganarse una tarjeta amarilla. Al respecto de esa discusión, el réferi reveló en un podcast de Youtube con Alejandro Ayala que al final del choque, el mismo ‘CR7′ le pidió perdón. Además, recibió de regaló una camiseta del histórico goleador.
“El árbitro no puede sentir miedo en la cancha. Ese día a Portugal no le salieron las cosas, no habíamos amonestado a nadie, pero él empieza a gritar ‘¡Míster, míster!’. Se le marcaba la vena (de la frente). Se me planta enfrente. Desde que lo vi correr sabía que venía a decirme algo. Lo que hay que hacer como árbitro, primero es estar en alerta, firme, la mirada recta y fija y sacar un poco el pecho. Se me planta y saco la amarilla, se la pongo y nunca dejo de tener contacto visual con él. Entonces, siente el impacto y se va. Termina el partido y me dice señor muchas gracias una disculpa”, contó.