El título de la Liga Nacional de vóley 2023/24 está a un solo partido de definirse, pero -sorprendentemente - Regatas Lima quedó descartado de esa lucha por la gloria poco antes de lo esperado. Al vigente campeón del torneo femenino no lo quedará de otra que ceder su trono a Alianza Lima o la Universidad San Martín de Porres, tras no poder acceder a la final del torneo, lo cual ha representado un fracaso en la presente temporada.
A inicios de la campaña, no habían dudas de que el club chorrillano era uno de los principales candidatos -sino el mayor candidato- al título. Su meritorio tricampeonato le respaldaba por completo para nuevamente acechar la corona. Sin embargo, a la hora de la verdad, las dirigidas por el argentino Horacio Bastit no llegaron a cumplir las expectativas.
Sobre la misma base de la temporada anterior, e incorporaciones interesantes desde Chile (Florencia Giglio y Karen Morales) y Estados Unidos (Kaylee Oscarson y Shaney Lipscomb), Regatas formó un sólido plantel, buscando repetir el éxito de las tres campañas anteriores.
No obstante, el nivel declinó considerablemente. Desde la primera etapa del campeonato, el elenco chorrillano ya anunciaba un cierre de temporada no tan positivo, al perder frente a sus dos máximos oponentes: Alianza Lima y Universidad San Martín. La historia no cambió en la segunda etapa, donde volvió a caer.
En medio de ese contexto adverso, el equipo comandado por Bastit no logró voltear la página en el momento más decisivo del torneo. Si bien superó con facilidad a Circolo Sportivo Italiano en los cuartos de final, poco o nada pudo hacer para salir victorioso en la semifinal frente al contendiente aliancista.
En esa llave, Regatas se ilusionó al ganar el primer partido (3-2), pero Alianza Lima lo dio vuelta en la revancha y el ‘extra game’ (3-0 y 3-1). Así, el club chorrillano quedó relegado de la ansiada definición del título y se tuvo que conformar con disputar el cruce por el tercer lugar. Sin embargo, contra todo pronóstico, tampoco logró el bronce.
La batalla por el podio fue contra nada menos que Géminis, que dio el batacazo al quedarse con el tercer lugar, triunfando en dos partidos corridos (3-2 y 3-1). El cuadro de las chorrillanas, por tanto, no solo fue excluido de su propio trono, sino que se quedó con las manos vacías en la presente campaña. Y le tocará ver como este domingo 28 de abril, otro equipo levantará el trofeo.
Un fracaso que tendrá secuelas
Las cosas no funcionaron bien de inicio a fin. Más allá de lo deportivo, existieron diferentes factores que llevaron al Regatas al fracaso en esta temporada. De todas maneras, mucho tiene que ver la tensión que se acrecentó partido a partido entre el entrenador y las propias jugadoras.
La frustración de no conseguir un buen desempeño o los resultados esperados salió a relucir a flor de piel. De hecho, Kiara Montes, una de las figuras del equipo, estuvo en el ojo de la tormenta luego de una discusión con Bastit. A partir de entonces, surgieron innumerables críticas y especulaciones sobre el ambiente interno del plantel.
Esto, sin dudas, también influyó en el resultado final. El cuarto lugar es tan inesperado como -seguramente- meritorio. El ocaso de Regatas es una realidad y eso tendrá algunas secuelas. Thaisa Mc Leod, protagonista del club chorrillano en los últimos cuatro años, ha sido la primera en anunciar su salida. Y no será sorpresa que algunas jugadoras más también se despidan en los próximos días.
Es inevitable. Regatas necesita restaurarse para poder levantar cabeza y volver al lugar al que perteneció en los últimos años.