Ositran responde ante supuesta pista incompleta en el nuevo Aeropuerto Jorge Chávez

El periodista Paolo Benza denunció que la terminal de la avenida Morales Duárez opera con pista incompleta, lo que impide despegues seguros de aviones internacionales transoceánicos

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Desde limitaciones críticas en la pista de aterrizaje hasta fallas logísticas y riesgos de seguridad, el nuevo terminal del aeropuerto internacional enfrenta cuestionamientos por su falta de preparación operativa y planificación técnica. (Exitosa)

El debate sobre la operatividad completa del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez continúa cobrando fuerza ante nuevos señalamientos sobre presuntas deficiencias en su infraestructura.

Paolo Benza, periodista y director del medio La Contra, cuestionó la ausencia de la calle de rodaje L1, una conexión vital entre el nuevo terminal y la cabecera norte de la pista antigua. Esta situación afectaría la longitud disponible para el despegue de aeronaves, sobre todo aquellas de largo alcance.

Ante ello, la presidenta del Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositran), Verónica Zambrano, se pronunció para aclarar el panorama y responder ante la inquietud generada.

En entrevista con Exitosa, explicó que la infraestructura entregada corresponde fielmente al diseño aprobado por Lima Airport Partners (LAP), operador del terminal, el cual ha sido evaluado y certificado por las autoridades aeronáuticas peruanas.

Zambrano precisó que existe un plan de desarrollo en fases para la nueva infraestructura. La etapa actualmente en operación corresponde a la denominada “1A reducida”. Posteriormente, están previstos los hitos “1A” y “1B”, los cuales se ejecutarán de acuerdo a un cronograma establecido desde la fase de planificación.

“Nosotros tenemos un diseño, que ha entregado LAP para efectos de construir este nuevo terminal, y lo que está en su diseño es lo que se ha visto plasmado en la infraestructura que se ve ahora. Que, además, todavía no está culminado porque hay dos entregas más que tiene que hacer LAP para completar”, detalló.
La pista del Nuevo Aeropuerto
La pista del Nuevo Aeropuerto Jorge Chávez no tiene la longitud requerida para vuelos internacionales con aviones transoceánicos

Según la autoridad, la ausencia de la conexión L1, mencionada por Benza, forma parte de las fases pendientes a desarrollar y no de una omisión improvisada. Zambrano recalcó que las etapas están definidas por el diseño inicial y no corresponden a medidas tomadas sobre la marcha.

“Hay fases: 1A reducida, 1A y 1B, y están mapeadas. O sea, no son fases que yo estoy sacándolas de debajo del sombrero, sino que ya están establecidas en el diseño”, subrayó durante su intervención.

En cuanto al impacto operativo, Zambrano explicó que estas etapas progresivas obedecen a la demanda de vuelos y pasajeros que recibe el aeropuerto. Actualmente, en la fase “1A reducida”, el aeropuerto está preparado para atender 27.5 millones de pasajeros al año. El paso a la fase “1B” permitirá incrementar esta capacidad a entre 37.7 y 40 millones de pasajeros anuales, de acuerdo a lo previsto en el desarrollo del proyecto. Hasta ese momento, la operatividad responde a los parámetros de seguridad y demanda presentes.

Sobre los señalamientos referidos al uso parcial de la pista, Ositran sostuvo que la infraestructura existente cuenta con todas las certificaciones requeridas. “No estamos en un escenario de infraestructura incompleta porque eso sería poner en riesgo y no hubiera, ni siquiera, obtenido el certificado de operaciones”, aclaró Zambrano. El aeropuerto cuenta con el aval de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y otras entidades especializadas, quienes han verificado el cumplimiento de las normas internacionales de seguridad.

El nuevo Jorge Chávez también utilizó sus canales oficiales para desmentir alertas sobre un posible riesgo operacional. Aseguró que el diseño de la pista y los procedimientos de rodaje, despegue y aterrizaje fueron revisados y aprobados por las autoridades, por lo que el tráfico aéreo continúa bajo los estándares exigidos por la industria.