El asesinato de Enrique López Albújar: el día en que el terrorismo acabó con la vida de un exministro peruano

Un ataque perpetrado por integrantes del MRTA cobró la vida del exministro de Defensa, quien fue emboscado cobardemente mientras conducía a su oficina, en San Isidro.

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Un fatídico retraso de su
Un fatídico retraso de su escolta dejó al general vulnerable ante un embate armado del MRTA, marcando uno de los capítulos más oscuros del país. (LUM)

Enrique López Albújar Trint, destacado militar y exministro de Defensa del primer gobierno de Alan García, fue brutalmente asesinado a tiros el 9 de enero de 1990. Aquel día, el general, quien iba de civil y sin custodia personal, fue atacado mientras llegaba a su oficina en San Isidro.

Los responsables fueron tres sujetos miembros del comando del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) que abrieron fuego contra su vehículo, causándole la muerte.

López Albújar, quien había sido una figura clave en la lucha contra el terrorismo, dejó una marca indeleble en la historia militar y política del Perú. Su asesinato fue un golpe devastador al país.

Prefirió las armas a la pluma

Desde su graduación como Alférez
Desde su graduación como Alférez Espada de Honor en 1953, Enrique López Albújar Trint se consolidó como un líder militar. Su formación internacional y sus ascensos marcaron su legado en la defensa nacional. (La República)

Nacido en Chiclayo el 2 de junio de 1930, la vida de Enrique López Albújar Trint estuvo marcada por un claro compromiso con el país. Desde temprana edad, se inclinó por el servicio militar, siguiendo los pasos de su padre, el escritor indigenista Enrique López Albújar.

A pesar de las expectativas de su entorno familiar, que querían que continuara el legado literario, él eligió la Escuela Militar de Chorrillos. Se graduó como Alférez Espada de Honor en 1953, consolidando su lugar en el Ejército. A lo largo de su carrera, fue reconocido por su profesionalismo y dedicación, ascendiendo rápidamente en los rangos.

El general López Albújar también tuvo una formación internacional destacada. Estudió en instituciones de renombre como el USAR CARIB en Panamá, Fort Knox en Estados Unidos y el British Army College en Inglaterra.

Esta preparación fue clave para enfrentar las amenazas que se avecinaban en el Perú en los años posteriores. Entre 1987 y 1989, asumió la cartera del Ministerio de Defensa, un rol crucial durante la lucha del país contra los grupos terroristas más destructivos de la historia reciente del Perú, como el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) y Sendero Luminoso.

Un ataque inesperado

El general López Albújar fue
El general López Albújar fue abatido por un comando del MRTA en pleno día. A pesar de ir sin custodia, el ataque dejó una marca imborrable en la historia del Perú, causando su trágica muerte. (La República)

El 9 de enero de 1990, Enrique López Albújar Trint vivió lo que sería su última jornada. Aquel día, debido a un retraso del chofer y la escolta que normalmente lo acompañaban, el general decidió conducir su propio automóvil. A primera hora de la mañana, se dirigía a su oficina en el distrito limeño de San Isidro. El destino, sin embargo, tenía otros planes para él.

En las cercanías de la calle Central, mientras se aproximaba a un estacionamiento, el general fue interceptado por un comando armado del MRTA. Los atacantes, con subametralladoras y pistolas de alto calibre, dispararon sin piedad más de 30 balas contra el vehículo de López Albújar.

El ataque fue extremadamente violento y dejó al exministro gravemente herido. El general fue trasladado de inmediato al Hospital de la Fuerza Aérea, pero a pesar de los esfuerzos por salvarlo, falleció en pocas horas, dejando a un país entero conmocionado.

El atentado fue parte de una serie de acciones terroristas que marcaron una de las épocas más oscuras de la historia peruana. El grupo MRTA, al que pertenecían los atacantes, había sido responsable de múltiples actos de violencia en diversas regiones del país. La muerte de López Albújar, quien se había destacado en la lucha contra este tipo de organizaciones, fue vista como una represalia por parte del grupo terrorista.

La respuesta de las autoridades

Tras el asesinato de López
Tras el asesinato de López Albújar, el gobierno reaccionó rápidamente. El presidente Alan García y otros altos funcionarios rindieron homenaje al general caído, decretando un día de duelo nacional. (El Nacional)

El asesinato de Enrique López Albújar desató una rápida y conmocionada respuesta del gobierno peruano. A lo largo de la tarde, varios altos funcionarios acudieron al hospital para rendir homenaje al general caído.

Entre ellos se encontraba el presidente Alan García, quien, visiblemente afectado, expresó sus condolencias a la familia y reiteró el compromiso del gobierno con la lucha contra el terrorismo. Otros miembros del gobierno, como el ministro del Interior Agustín Mantilla y el canciller Guillermo Larco Cox, también se sumaron a las muestras de apoyo.

El cuerpo de López Albújar fue trasladado a la sede del Ejército, donde se le rindieron los honores militares correspondientes. En un gesto de respeto y reconocimiento por su servicio al país, el gobierno decretó un día de duelo nacional, alzando el pabellón nacional a media asta en todos los edificios públicos, cuarteles y hasta en los buques de la armada. Las ceremonias y homenajes fueron multitudinarios, reflejando el impacto que tuvo su muerte en la sociedad peruana.

Este atentado, perpetrado por el MRTA, dejó en evidencia la vulnerabilidad del país ante el accionar de los grupos terroristas, que durante esas décadas sembraron el miedo y la destrucción. La muerte de López Albújar fue un recordatorio del costo humano de esa lucha, y la nación se vio obligada a replantear sus estrategias de seguridad.

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