La tarde del pasado sábado 4 de enero, el distrito de Laredo, en la provincia de Trujillo, región La Libertad, fue escenario de un violento ataque que dejó tres fallecidos. Este acto criminal, que ocurrió alrededor de las 6 de la tarde, marca las primeras víctimas mortales del año por hechos violentos en la zona.
El hecho se registró en la chingana El Trigal, un local ubicado en la intersección de las calles Los Jazmines y José Ignacio Chopitea, en el cercado de Laredo. Testigos aseguran que sujetos a bordo de una motocicleta irrumpieron en el lugar y abrieron fuego contra tres hombres que se encontraban compartiendo bebidas alcohólicas.
Las víctimas fueron identificadas como Walter Magán, Jahir Vásquez y Brayan Magán. Walter Magán falleció en el acto, mientras que Jahir Vásquez perdió la vida en el hospital de Laredo. Por su parte, Brayan Magán murió camino al hospital Belén. Hasta el momento, las autoridades no han confirmado las causas del ataque, aunque no se descarta que esté relacionado con disputas entre bandas delictivas. La Policía Nacional del Perú (PNP) ha iniciado un operativo para identificar a los responsables, utilizando las grabaciones de cámaras de seguridad en la zona como evidencia clave.
Actos de violencia aumentan en Trujillo
El incidente en Laredo se suma a una serie de actos violentos registrados en Trujillo. El pasado 25 de noviembre, dos sicarios ingresaron a la discoteca White Power y dispararon contra Overt David Bazán Villanueva, alias ‘Chato Oré’, y Richard Anderson Mines Acevedo, dejando dos muertos y seis heridos. Este hecho ocurrió durante un concierto en el establecimiento ubicado en la calle San Antonio 339.
En las últimas semanas, también se han reportado al menos tres detonaciones en establecimientos y viviendas relacionadas con extorsionadores. Además, el alcalde del distrito de El Porvenir, Juan Carranza Ventura, denunció haber recibido amenazas directas contra él y su familia. “A mi hijo le han mandado los mensajes. A mi familia, amenazaron toda mi familia. A mi niño de 7 años y a mi esposa (...) el tema ya está en investigación y esperamos que haya resultados”, declaró Carranza.
Según el burgomaestre, las amenazas provienen de criminales de la zona conocida como ‘Nuevo Florencia’, y estarían motivadas por el inicio de una obra que podría generar la llegada de nuevas personas al asentamiento humano.
Extensión del estado de emergencia
El gobierno nacional ha extendido el estado de emergencia en la provincia de Trujillo, así como en Virú y Pataz. Esta medida, formalizada mediante decretos supremos, suspende derechos constitucionales como la inviolabilidad del domicilio y la libertad de tránsito. La declaratoria incluye el despliegue conjunto de la Policía Nacional del Perú (PNP) y las Fuerzas Armadas para mantener el orden.
Según los decretos publicados en el Diario Oficial El Peruano, la medida estará vigente hasta el 10 de marzo. El estado de emergencia en Zarumilla, Tumbes, comenzó el 5 de enero, mientras que en las provincias de Virú, Trujillo y Pataz entrará en vigor a partir del 9 de enero. Estas regiones se consideran zonas de alta incidencia delictiva, especialmente por la proliferación de extorsiones y crímenes organizados.
La medida responde a las recomendaciones de la Comandancia General de la PNP, basadas en informes reservados de la Unidad de Planeamiento y Educación de la Dirección Nacional de Orden y Seguridad de la PNP, así como de las direcciones de las regiones policiales de Tumbes y La Libertad. Con esta prórroga, el estado de emergencia en Zarumilla alcanzará los 14 meses, mientras que en Trujillo y Pataz serán 13 meses y en Virú 8 meses de restricción.
Sergio Vílchez, alcalde de Laredo, ha solicitado mayor presencia policial para combatir los crímenes que afectan a su distrito. “Necesitamos apoyo inmediato. La población está aterrorizada”, afirmó el burgomaestre.