La sopa ‘levantamuertos’ de la década del 50 que se popularizó en un mercado céntrico de Lima

Hoy en día, el caldo de gallina es reconocido como un clásico limeño entre los ‘levantamuertos’. No obstante, en la segunda mitad del siglo XX, otro potaje sobresalía en la capital

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La sopa se sirve acompañada
La sopa se sirve acompañada de yuquitas fritas de carretilla. (YouTube Andre Machuca)

Dicen que, tras una noche de excesos, nada funciona mejor que un plato humeante para devolver el alma al cuerpo. En muchas culturas, existen comidas que se consideran remedios para quienes han enfrentado una larga velada de celebraciones. Estas preparaciones, conocidas coloquialmente como ‘levantamuertos’, tienen la fama de reponer fuerzas, despejar la mente y aliviar los estragos del alcohol.

En Lima, varios potajes son reconocidos como ‘levantamuertos’, pero uno sobresale por su popularidad: el caldo de gallina. Este tradicional platillo es una fuente rica en calcio, vitaminas del complejo B y macronutrientes esenciales, como la proteína, que ayudan a revitalizar el cuerpo y recuperar energías.

Este caldo se encuentra en diversos mercados y restaurantes del Perú, pero en Lima cobró importancia con la llegada de las carpas verdes fosforescentes en las últimas décadas del siglo XX. Estas estructuras, presentes en mercados y calles de los distritos populares de la capital, facilitaron el acceso de los comensales a este plato tradicional.

Caldo de gallina, el revitalizante
Caldo de gallina, el revitalizante nacional consumido en todo el Perú. (Andina)

Hoy en día, el caldo de gallina es reconocido como un clásico limeño entre los ‘levantamuertos’. No obstante, en la segunda mitad del siglo XX, otro potaje sobresalía en la capital: la sopa rachi.

La sopa rachi, el ‘levantamuertos’ de la década del 50

El rachi es un plato tradicional de la gastronomía peruana, elaborado con mondongo (estómago de res). Este ingrediente se limpia cuidadosamente y se hierve con hierbas aromáticas como ajo y hierba buena hasta que quede tierno. Luego, se corta en tiras y se marina con una mezcla de ají panca, ajo, vinagre y especias antes de asarlo en parrilla, lo que le otorga su característico sabor ahumado.

Con el mondongo también se prepara la sopa rachi, un platillo que, en la década de 1950, era considerado por un sector de la población de Lima como un verdadero ‘levantamuertos’. Sobre este tema, Roberto Prieto Sánchez escribió lo siguiente en su libro “Guía secreta: barrios rojos y casas de prostitución en la historia de Lima”.

Así luce la sopa rachi.
(YouTube
Así luce la sopa rachi. (YouTube Andre Machuca)

“El Mercado Central era el sector de la ciudad que el pueblo frecuentaba para aliviar los síntomas de la borrachera anterior mediante una sopa rachi (menjunje de rachi, quaker, papa y otras especias que lo convertía en un ‘levanta muerto’)”, escribió.

El Mercado Central, también conocido como Mercado Municipal Gran Mariscal Ramón Castilla, es un centro de abastos ubicado en el distrito del Cercado de Lima, cerca de la zona comercial de Mesa Redonda. Respecto a la sopa rachi, se debe precisar que este potaje tradicional se ofrecía en un local ubicado en el jirón Ucayali 620, Lima.

En esta locación cercana al mercado, una mujer de ascendencia japonesa comenzó a vender sopa rachi desde 1940. En poco tiempo, el platillo se popularizó tanto que llegó a ser considerado un ‘levantamuertos’, calificativo que según el Diccionario de americanismos de la Asociación de Academias de la Lengua Española significa “comida que restablece a una persona, generalmente después de haber ingerido bebidas alcohólicas en exceso”.

Bajo el rótulo de Restaurante Arakaki, se ofrecían sopas humeantes a un público diverso. En la actualidad, en uno de sus carteles publicitarios se puede leer la inscripción: “La más antigua desde 1940, somos los creadores”.

El Mercado Central, también conocido
El Mercado Central, también conocido como Mercado Municipal Gran Mariscal Ramón Castilla. (Infobae/MML)

El youtuber Andre Machuca logró entrevistar al nieto de la mujer que creó la sopa rachi y compartió los detalles de la conversación en un video publicado en su canal. “Me dijo que su abuela llegó hace más de 100 años al Perú y que ella trabajaba junto a su familia en el campo. (...) Frente a la necesidad, la señora cogió todos los insumos que tenía a la mano, como arroz, cebolla china, frejolito chino y mondongo”, relató.

Con estos ingredientes, preparó un nuevo potaje al que llamó sopa rachi. Su invención satisfizo su necesidad en ese momento y sentó las bases de un negocio que perduraría en el tiempo. Actualmente, el restaurante sigue abierto para beneplácito de los comensales, quienes llegan en busca de recuperar energías después de una larga noche. La sopa se sirve acompañada de yuquitas fritas de carretilla, un complemento que la distingue de otros establecimientos.

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