Las lluvias intensas en Perú, previstas para el verano de 2025, ponen en peligro a millones de habitantes, señala un informe reciente del Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred). Según su documento técnico, titulado “Escenarios de Riesgos de Lluvias para el verano 2025″, un total de 2 millones 382 mil 479 personas viven en 40 mil 235 centros poblados distribuidos en los 24 departamentos del país, y enfrentan un riesgo muy alto debido a deslizados, huaicos y otros movimientos en masa. “Estas zonas concentran tanto la densidad poblacional como una alta vulnerabilidad ante eventos naturales derivados de precipitaciones extremas”, informa el Cenepred.
El análisis detalla que las regiones con mayor cantidad de habitantes expuestos a este tipo de peligro son Cusco, con 355 mil 362 personas en riesgo; seguido de Áncash (233 mil 656), Cajamarca (228 mil 978), Puno (203 mil 790) y Huánuco (195 mil 426). Asimismo, el informe alerta sobre la infraestructura de estas áreas: “1 millón 114 mil 862 viviendas, 2 mil 237 establecimientos de salud y 14 mil 643 instituciones educativas están bajo amenaza por los movimientos en masa”, afirma el Cenepred, citando su propio análisis de riesgos.
Inundaciones: otro peligro crítico
El estudio también arroja datos alarmantes sobre el riesgo de inundaciones en diversas regiones del país. El Cenepred precisa que 1 millón 390 mil 557 personas, distribuidas en 4 mil 277 centros poblados de veinte departamentos, podrían verse afectados. Entre las regiones con mayor exposición destacan Ica (330 mil 835 habitantes en riesgo), Cajamarca (237 mil 694), Áncash (184 mil 062), Loreto (116 mil 028) y Apurímac (111 mil 953).
El impacto no se limita únicamente a la población; las cifras indican que “473 mil 438 viviendas, 993 establecimientos de salud y 4 mil 223 instituciones educativas” también enfrentan un nivel de riesgo muy alto frente a posibles inundaciones, detalla el informe técnico, que toma como base los pronósticos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) para modelar los escenarios futuros.
Llamado urgente a la gestión integral del riesgo
El Cenepred ha manifestado la importancia de que las autoridades a nivel regional, local y nacional actúen de manera coordinada frente a estos riesgos. “Es imprescindible que los gobiernos prioricen la reducción del riesgo y acciones de preparación para evitar pérdidas humanas y materiales”, indica el informe. Del mismo modo, se hace énfasis en la necesidad de incluir a la población en la implementación de medidas preventivas, correctivas y de protección “Este esfuerzo no solo recae en las instituciones, sino también en la comunidad, que debe participar de manera activa”, subraya el Cenepred en su llamado a la acción.
Entre las acciones sugeridas destacan el fortalecimiento de los sistemas de alerta temprana, la identificación de zonas habitables más seguras y la planificación adecuada de las actividades agrícolas y de infraestructura, considerando los riesgos climatológicos.
Un problema que incide directamente en la planificación regional
Más allá de las cifras, el Cenepred ofrece este informe como una herramienta de planificación estratégica para las autoridades competentes. Según el organismo, el propósito central de su investigación es alertar a los gobiernos locales y regionales sobre las áreas con mayor exposición y, de este modo, orientar la toma de decisiones en políticas públicas de prevención de desastres y mitigación de impactos climáticos. “Dichos escenarios de riesgo son fundamentales para asignar recursos y priorizar intervenciones”, reitera el informe técnico elaborado por el Cenepred.
No obstante, el reto logístico y económico de implementar estas medidas sigue siendo considerable en un país cuyo territorio presenta una gran diversidad geográfica y climática. En ese sentido, instituciones como el Cenepred sugieren que los proyectos futuros en estas zonas integren un enfoque de sostenibilidad frente al cambio climático y fenómenos recurrentes como El Niño.
Con la temporada de lluvias intensas a la vuelta de la esquina, las cifras presentadas por el Cenepred son un recordatorio de la vulnerabilidad estructural de amplias áreas del país y la imperativa necesidad de actuar rápidamente.