En medio de la crisis penitenciaria por el hacinamiento extremo en las cárceles peruanas, el presidente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Javier Llaque Moya en conversación con RPP, informó que se descartó la ampliación del penal de máxima seguridad Challapalca, ubicado en la región de Tacna, debido a la resistencia de la población local.
No obstante, el funcionario destacó avances en la construcción de nuevos penales y reiteró la necesidad de aumentar el presupuesto destinado al sistema penitenciario que se ve superado su capacidad en un 140%.
El penal Challapalca, reconocido por su ubicación remota y destinado a albergar internos de alta peligrosidad, continuará con su capacidad actual de 200 reclusos. Javier Llaque explicó que la decisión de cancelar su ampliación se fundamentó en la oposición expresada por las comunidades cercanas.
“La ciudadanía tiene mitos y leyendas de que un penal trae delincuencia. Eso no está probado. Si fuera cierto, el mismo poblado de Challapalca, que está cerca al penal, tendría violencia y no es verdad”, afirmó en una entrevista con RPP. Según el jefe del INPE, no hay evidencias que relacione la presencia de la cárcel con un aumento de la delincuencia en la zona.
“No hay violencia en el poblado de Challapalca, en el más cercano tampoco. [...] Pero los pobladores se oponen, ya no vamos a ir por la ampliación de Challapalca. El penal se queda con sus 200 internos de capacidad de albergue. Igual será el penal donde llevemos a internos de extrema seguridad”, agregó.
Nuevos proyectos penitenciarios en marcha
En un esfuerzo por reducir el déficit de espacio en las cárceles, Llaque Moya anunció que este mes se iniciará la construcción del penal de Abancay, tras haberse adjudicado el contrato correspondiente. “La primera piedra del penal de Abancay ya la colocamos. Tenemos los recursos para la construcción”, precisó.
Asimismo, adelantó que el INPE busca reactivar las obras paralizadas de los penales de Arequipa y Pucallpa, que permanecen detenidas desde hace años. “Ya terminamos el expediente técnico para el penal de Pucallpa. Ahora le pediremos al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) más recursos, demostrando nuestra eficiencia, para iniciar la construcción de estos proyectos”, expresó para el citado medio.
Hacinamiento en las cárceles
El sistema penitenciario peruano enfrenta un hacinamiento alarmante del 140%. Las cárceles del país tienen capacidad para albergar a 41 mil 700 internos, pero actualmente resguardan a 99 mil 550 personas privadas de libertad, lo que genera un déficit de 58 mil espacios.
Javier Llaque describió la situación como una “enorme brecha difícil de cubrir”. No obstante, subrayó que la construcción de nuevos penales es esencial para mitigar el problema, aunque reconoció que esto requerirá recursos significativos y una ejecución eficiente. El funcionario enfatizó que la eficacia demostrada por el INPE refuerza su solicitud de mayores recursos al MEF para atender la creciente demanda de infraestructura penitenciaria.
“Le pediremos al MEF, con la demostración de eficiencia, que nos den pronto más recursos e iniciamos la construcción del penal de Arequipa, obra paralizada, y el penal de Pucallpa, también obra parada, ya terminamos el expediente técnico”, agregó.
A pesar de las limitaciones presupuestarias, el INPE ha logrado un nivel destacado en la gestión de sus recursos. Según Llaque Moya, la institución alcanzó el 100% de ejecución presupuestal en inversiones por segundo año consecutivo.
Wanda del Valle en Santa Mónica
Finalmente, Llaque Moya se refirió al caso de Wanda del Valle, expareja del delincuente conocido como “Maldito Cris”, quien se encuentra en prisión preventiva en el penal de máxima seguridad de Chorrillos.
El funcionario detalló que Wanda del Valle cumple un régimen penitenciario estricto, con restricciones en sus horas de patio y visitas limitadas únicamente a familiares directos. “Las horas de patio son más restringidas. Tienen tres niveles de clasificación: A, B o C. El nivel A, que es el más duro, se aplica en este caso”, explicó.