La neutralidad de las autoridades públicas es un debate constante, sobre todo cercano a las Elecciones Generales. Esta vez, se extendió hacia la gobernadora de Moquegua, Gilia Gutiérrez, quien fue captada junto al gerente general del GORE, Abraham Ponce Sosa, participando en un acto político organizado por el partido Perú Primero, con la asistencia de Martín Vizcarra.
La participación de Gutiérrez y Ponce en el evento ha dividido a la opinión pública. Por un lado, algunos ciudadanos consideran que la gobernadora tiene derecho a involucrarse en actividades políticas fuera de su horario laboral, especialmente si estas se realizan en días no laborables. Por otro lado, críticos argumentan que, al tratarse de una figura pública en ejercicio, su presencia en un acto político podría interpretarse como un respaldo oficial a una organización partidaria, lo que pondría en entredicho su imparcialidad.
No obstante, la noticia tomó mayor relevancia ante la denuncia del exconsejero Luis Miguel Caya, quien señaló que trabajadores de la entidad habrían sido obligados a participar del evento, bajo amenaza de no renovar sus contratos laborales. Según indicó, algunos de los asistentes habrían sido presionados para adquirir entradas al evento, cuyo costo ascendía a 49 soles por plato, y llevar consigo a dos o tres familiares.
Sumado a ello, mencionó en diálogo con Willax Noticias que autos pertenecientes a proveedores del Gore habrían sido utilizados para movilizar a Vizcarra, funcionarios y trabajadores hacia actividades políticas en distintas provincias de la región, como Ilo y Mariscal Nieto. “Vemos un control de parte del señor Martín Vizcarra Cornejo, que está utilizando al Gobierno Regional de Moquegua para fines políticos, lo cual debe ser investigado por el Ministerio Público”, afirmó.
“No es un secreto”
Si bien, hasta el momento, la gobernadora Gilia Gutiérrez no se ha pronunciado oficialmente sobre las acusaciones, reconoció su asistencia al evento e indicó que no es ningún secreto su afinidad política y apoyo a la organización política en la que milita.
“El país ve con gran expectativa la candidatura del presidente Martín Vizcarra. Conocemos que ha estado en Moquegua y ayer, como ciudadana, he participado de un almuerzo que me invitaron. Soy una mujer que tiene bien puestos los valores, no me gusta estar escondiéndome y no es un secreto que estoy haciendo vida política en el partido que lidera Martín Vizcarra”, mencionó.
Por su parte, el gerente general invocó al exconsejero a probar sus acusaciones hacia la gestión y negó que se haya coaccionado a los trabajadores del Gobierno Regional. “Yo he ido en carro particular a un almuerzo con mi familia, con mi esposa e hijos. Hemos almorzado y nos hemos retirado. Era un evento del movimiento político, [¿les cobraron?] Totalmente inexacto, tendría que ver donde hay un memorándum, una reunión, una carta donde se señale eso. No tiene absolutamente nada que ver estos eventos con el gobierno regional“, declaró al noticiero de Willax.
Implican a fiscal
En otro momento, el exconsejero también acusó a la fiscal Katia Guillén de blindar al exmandatario. “En el año 2011 - 2014, cuando Martín Vizcarra se desempeñó como presidente regional, fue la responsable de archivar las 46 denuncias que fueron denunciadas por el exfiscal de la Nación, el señor Pedro Chávarry. Y, ahora, protege también a la actual gobernadora y acciones que apoyan y respaldan al partido político Perú Primero”, sentenció.