El 31 de diciembre, las calles de Perú se llenan de actividad y esperanza. Las personas, con rostros iluminados por la emoción, se preparan para recibir el Año Nuevo con tradiciones cargadas de significado. Por ejemplo, muchos portan una prenda amarilla para atraer la prosperidad o roja para el amor. En los hogares, las uvas están listas para pedir un deseo por cada una, mientras se sienten los nervios y la ilusión de un futuro mejor.
En el seno de una familia, las opiniones sobre las cábalas del Año Nuevo varían. Algunos, con satisfacción, aseguran que la cábala que practicaron el año pasado les dio buenos resultados, mientras que otros, desanimados, prefieren no repetirla. Estos últimos, decepcionados, sienten que no les trajo lo esperado y buscan nuevas alternativas.
En medio de la incertidumbre que reina entre algunos miembros de la familia sobre si practicar o no una cábala, alguien podría irrumpir en la conversación con una sonrisa confiada. Con tono firme, mencionaría que, según su experiencia, existe una cábala económica y “efectiva”. Se trata de la tradición de las lentejas y el arroz, los cuales atraerían la prosperidad y la abundancia.
La cábala de la prosperidad y la abundancia: lentejas y arroz
Históricamente, estos alimentos se han relacionado con rituales de protección y prosperidad. En el caso de las lentejas y el arroz, su uso durante la víspera del Año Nuevo está vinculado a creencias antiguas que los consideraban símbolos de riqueza, fertilidad y estabilidad.
Las lentejas, por ejemplo, por su pequeño tamaño y su gran capacidad para multiplicarse, simbolizan la multiplicación de los bienes y la prosperidad. El arroz, por su parte, es un alimento esencial en muchas culturas y su consumo está asociado a la idea de fertilidad, abundancia y crecimiento económico.
En las culturas asiáticas, tanto el arroz como las lentejas tienen un simbolismo especial. El arroz, considerado un alimento básico, representa la vida, la fertilidad y la prosperidad. En países como China, Japón y Corea, el arroz es más que una simple fuente de sustento.
Por otro lado, las lentejas también tienen una carga simbólica en las culturas asiáticas. En la India, por ejemplo, las lentejas son vistas como un símbolo de prosperidad y fertilidad. Su forma redonda representa la continuidad y el ciclo de la vida, y se cree que su consumo durante las festividades asegura la llegada de nuevas oportunidades y estabilidad.
Habiendo explicado esto, surge la pregunta de cómo utilizar estos alimentos el 31 de diciembre. Existen diversas formas de incorporarlos en las celebraciones, pero lo que realmente marca la diferencia es la fe y la convicción de que el año venidero traerá consigo prosperidad. Esta creencia se fortalece con los esfuerzos personales que se realizan para asegurar que las expectativas se cumplan.
Formas de realizar la cábala de las lentejas y el arroz
A través de su canal de YouTube, Rosa María Cifuentes explicó diversas maneras de realizar la cábala de las lentejas, un ritual que se lleva a cabo en la víspera del Año Nuevo, bajo ciertas condiciones.
El ritual que explicó implicaba la participación de varios integrantes de la familia, ya que las lentejas debían caer sobre el cuerpo de las personas ubicadas en cualquier piso, excepto en el primero.
“Faltando tres minutos para las 12, abres una bolsa de kilo de lentejas. (...) Todos deben estar en posición de ataque, listos para protagonizar una guerra de lentejas, mientras se desean prosperidad”, señaló.
En otro momento de su alocución, la periodista, coach ontológico y especialista en lectura de rostro y comunicación no verbal, mencionó que las lentejas deben permanecer en el piso de la casa hasta el 2 de enero, día en que deben ser recogidas por la mañana.
La especialista también compartió otra cábala que involucra el uso de arroz y lentejas. “Recuerda que puedes colocarlos en todas las esquinas de la mesa donde vas a recibir el Año Nuevo”, manifestó.
Es importante señalar que la “guerra de lentejas” simboliza la atracción de prosperidad, mientras que el trigo, arroz y lentejas crudas guardados en un saquito de color oro, que se lleva durante toda la noche, atraen la abundancia.
Más información:
La cábala de las 12 uvas en Año Nuevo
Comer 12 uvas al dar las campanadas del Año Nuevo es una práctica que se originó en España y que hoy une a millones en todo el mundo. Cada uva simboliza un mes del año que comienza, cargado de deseos y metas personales. Este sencillo ritual se realiza con la esperanza de atraer salud, fortuna y éxito en los próximos 365 días.
Más allá de su aparente simplicidad, esta tradición se ha convertido en un momento de introspección y renovación. Las uvas no solo representan propósitos individuales, sino también la conexión con la familia y las raíces culturales. Este acto breve y simbólico guarda la esencia de un nuevo comienzo lleno de ilusión.