El hallazgo del cuerpo descuartizado de Susi Chuquillanqui Poma el pasado 21 de diciembre debajo del puente Maya de Brito en Pucallpa, región Ucayali, ha conmocionado a la ciudadanía y ha puesto en marcha una investigación por presunto feminicidio. Las autoridades han señalado como principal sospechoso a Jorge Castro Navarro, expareja de la víctima y padre de sus dos hijas.
La Fiscalía llevó a cabo diligencias en la vivienda de Castro Navarro, aunque los resultados de estas se mantienen en reserva debido a la naturaleza del caso debido a la naturaleza del delito que se investiga, explicó el fiscal Victor del Castillo Coral.
Por su parte, el abogado del acusado indicó que podrían hallarse rastros biológicos en la casa, incluso si se intentó limpiarlos. “Cuando en un ambiente existe sangre por una cortada o algo, esta, a pesar de ser limpiada con cloro, líquidos o ácidos, deja una huella biológica del cromosoma de la sangre que puede permanecer impregnada por muchos meses. (...) Lo que queremos es encontrar la verdad y establecer la responsabilidad a la persona o las personas que hayan realizado este hecho criminal”, mencionó.
Según el medio local Alerta Pucallpa, Francesca Chuquillanqui Poma, hermana de la víctima, reveló que el último contacto que tuvo con Susi fue antes de su desaparición. Susi recibió una llamada de su expareja, quien le pidió que recogiera algunas pertenencias de su hogar, argumentando que realizaría una “limpieza” en el local donde recientemente se había organizado una promoción para su hija. Después de esa llamada, la joven madre no volvió a ser vista.
Testigos aseguran haber observado al sospechoso salir de su vivienda alrededor de las 3:00 p.m. aquel día. Castro Navarro iba acompañado de sus dos hijas y vestía completamente de negro. Actualmente, el principal sospechoso se encuentra fuera de la ciudad junto a las menores, lo que ha generado preocupación entre los familiares de la víctima, quienes exigen justicia y celeridad en el proceso judicial. Cabe añadir que, la Fiscalía ha solicitado la detención preventiva para el presunto feminicida.
Feminicidio en Perú
El feminicidio en el Perú sigue siendo una de las problemáticas más graves y persistentes. A tan solo unos días de concluir el 2024, las cifras revelan que este año podría ser uno de los más violentos en comparación con los años anteriores.
Según el programa Aurora del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), entre enero y noviembre se han registrado 141 feminicidios. En contraste, el año pasado se reportaron 170 casos, y entre 2020 y 2022, las cifras se mantenían entre 130 y 135.
El hogar, que debería ser un espacio de seguridad y protección, se ha convertido en el escenario más recurrente para los feminicidios en el Perú. Según los datos, 46 casos reportados ocurrieron en la casa de la víctima, lo que evidencia el alto riesgo que enfrentan muchas mujeres en sus propios hogares. Le siguen los casos registrados en la vivienda compartida entre la víctima y el agresor, con 13 incidentes, y en la casa del propio feminicida, donde se reportaron 12 casos.
Además de los hogares, otros escenarios comunes para los feminicidios incluyen espacios públicos y desolados. Según los registros, 18 casos ocurrieron en calles o vías, mientras que 13 se reportaron en lugares desolados. También destacan los centros de trabajo de las víctimas y establecimientos como hoteles y hostales, con 6 casos cada uno, así como centros poblados, donde se registraron 5 incidentes.
Canales de ayuda
- Línea 100: Línea gratuita del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables que atiende las 24 horas. Brinda información, consejería y deriva casos de violencia.
- Centros Emergencia Mujer (CEM): Servicios públicos especializados en atención integral para víctimas de violencia. Cuentan con personal capacitado. Hay más de 300 CEM a nivel nacional.
- Comisarías: Todas las comisarías de la Policía Nacional están obligadas a recibir las denuncias por violencia contra la mujer.