Durante la celebración de la Nochebuena, se registró un notable aumento en los niveles de contaminación atmosférica en Lima, según el último reporte del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi). Este fenómeno, asociado al uso masivo de fuegos artificiales y quema de materiales, afectó distintas zonas de la ciudad y alcanzó picos preocupantes en la calidad del aire.
De acuerdo con el monitoreo realizado por Senamhi, las estaciones ubicadas en San Martín de Porres y San Juan de Lurigancho registraron las mayores concentraciones de material particulado PM2,5, alcanzando 64,3 microgramos por metro cúbico (µg/m³) y 60,9 µg/m³ en las primeras horas de la Navidad.
Estas cifras superan los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que establece como valor seguro una concentración media anual de 5 µg/m³ para este contaminante, dada su peligrosidad para la salud humana.
Impacto de la pirotecnia
El material particulado PM2,5, compuesto por partículas microscópicas capaces de penetrar profundamente en el sistema respiratorio, aumentó considerablemente tras el uso masivo de artefactos pirotécnicos durante la medianoche.
El gráfico compartido por Senamhi en redes sociales evidencia un incremento sostenido desde las 20:00 horas del 24 de diciembre, con un ascenso más pronunciado entre las 23:00 horas y la 01:00 del 25 de diciembre.
Además de las estaciones mencionadas, otros puntos de monitoreo como Puente Piedra, Villa María del Triunfo, Santa Anita y el Campo de Marte también registraron incrementos significativos, aunque en menor magnitud. La tendencia al alza refleja el impacto directo de actividades humanas en la calidad del aire durante fechas festivas, especialmente en zonas urbanas densamente pobladas.
Riesgos asociados
El PM2,5, clasificado como uno de los contaminantes más nocivos por su capacidad de ingresar al torrente sanguíneo, está vinculado a enfermedades respiratorias, cardiovasculares y otros problemas de salud crónicos. Según datos de la OMS, la exposición a altos niveles de este material puede agravar afecciones preexistentes como asma y bronquitis, además de aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
En este contexto, Senamhi advirtió sobre los peligros de la exposición prolongada al aire contaminado, especialmente en grupos vulnerables como niños, adultos mayores y personas con problemas respiratorios. Las autoridades recomendaron evitar actividades al aire libre en las horas de mayor concentración, así como el uso de mascarillas como medida preventiva.
Tendencias históricas
El incremento en la contaminación durante las festividades navideñas no es un fenómeno nuevo. En años anteriores, estudios realizados por organismos nacionales e internacionales ya habían alertado sobre la relación directa entre el uso de pirotecnia y el deterioro de la calidad del aire. Sin embargo, este año se reportaron concentraciones más elevadas en comparación con las navidades pasadas, según cifras preliminares.
Las autoridades del Ministerio del Ambiente (Minam) y Senamhi reiteraron la necesidad de promover alternativas responsables y sostenibles para celebrar estas festividades. Entre las propuestas destacan campañas para reducir el uso de fuegos artificiales y educar a la población sobre los efectos negativos de estas prácticas en la salud y el medio ambiente.
Asimismo, se subrayó la importancia de fortalecer los sistemas de monitoreo y regulación ambiental para mitigar los impactos de este tipo de actividades.
Perspectivas futuras
El incremento de contaminantes en Lima coincide con una tendencia global observada en otras grandes ciudades del mundo durante celebraciones similares, como el Año Nuevo chino o las festividades de Diwali en la India. En estos casos, los niveles de PM2,5 también se disparan, afectando la calidad del aire y generando consecuencias a corto y largo plazo en la salud de la población.
Con miras al Año Nuevo, Senamhi anticipa que podrían registrarse picos de contaminación similares, instando a la ciudadanía a optar por celebraciones menos contaminantes. Además, se recordó la importancia de consultar reportes sobre la calidad del aire en tiempo real, disponibles en la página web del Senamhi, para planificar actividades con mayor seguridad.
Por otro lado, expertos en salud pública señalaron que las cifras reportadas deberían servir como un llamado de atención para adoptar medidas más estrictas que reduzcan los efectos de estas prácticas, considerando que el impacto del PM2,5 no solo se limita a la calidad del aire, sino que también contribuye al cambio climático al ser un componente de los aerosoles atmosféricos.