El cambio climático sigue alterando los patrones meteorológicos, y Lima no es la excepción. La capital peruana experimenta condiciones variables que hacen indispensable consultar el clima antes de salir de casa, especialmente durante las festividades de fin de año.
Este sábado 21 de diciembre, se espera que la temperatura alcance un máximo de 23 grados y descienda hasta un mínimo de 18 grados. A pesar de ser verano, las mañanas podrían ser frescas, por lo que se recomienda usar ropa ligera pero con una capa adicional para los momentos más fríos.
En cuanto a la nubosidad, el cielo estará parcialmente cubierto, con un 23% de nubosidad durante el día, que disminuirá al 17% en la noche. Esto significa que habrá algunas horas de sol, aunque no tan intensas como en días completamente despejados.
Por otro lado, las probabilidades de lluvia son bajas pero no nulas, con un 13% durante el día y un 20% en la noche. Si tienes aviones al aire libre, es poco probable que te sorprenda una lluvia significativa, pero siempre es útil estar preparado.
Respecto al viento, se esperan ráfagas que podrían alcanzar los 32 kilómetros por hora durante el día, bajando a 26 kilómetros por hora en la noche. Estos vientos moderados podrían generar algo de frescura, especialmente en las zonas más abiertas de la ciudad.
Mantente informado y planifica tu jornada con base en este pronóstico.
En el departamento de Lima se reportan una docena de tipos de clima, determinados por su cercanía al mar al oeste y la altitud hacia el este, presentado regularmente un estado del tiempo árido y templado, así como una nula humedad a lo largo del año.
De todos los estados del tiempo, el predominante y que abarca alrededor del 50% del territorio de dicho departamento es el árido seco.
Este estado del tiempo resulta peculiar dadas las condiciones geográficas de la ciudad, pues está ubicada en una zona tropical y prácticamente a nivel del mar. La clave para entender el tipo de clima en Lima viene de la cercanía con la Cordillera de los Andes, así como de la fría corriente peruana o corriente de Humboldt, proveniente del sur.
El clima se extiende desde la provincia de Cañete al sur y hasta la provincia de Barranca al norte, pasando por la ciudad capital de Perú, prácticamente un desierto, donde las lluvias caen muy poco y solo entre los meses de julio y septiembre.
En medio de este clima árido se forman los ecosistemas de “lomas” en las provincias de Cañete, Lima, Huaral y Huaura, desarrolladas por la influencia de neblinas y lloviznas invernales, creando un entorno fresco y húmedo en medio del desierto.
En las zonas más alejadas de la costa y con ello una mayor altura, el estado del tiempo pasa de árido a semiárido y más al este aparecen los fríos e incluso las lluvias un tanto más constantes en verano.
Perú y sus 38 climas
En Perú se sienten hasta 38 tipos de clima, de acuerdo con el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), esto como resultado de la interacción entre diferentes factores climáticos y geográficos.
Estos factores principales, detalla el Senamhi, son su posición geográfica en el Trópico de Capricornio y la cercanía de la Cordillera de los Andes.
De los 38 climas, el Senamhi destaca tres principales que se definen de acuerdo a la zona del país en la que se encuentren.
En la costa del país sudamericano, que da con el Océano Pacífico y abarca apenas el 11.6% del territorio nacional, el estado del tiempo que predomina es árido y templado, siendo su característica climática principal la escasez de lluvias.
En la sierra, la zona cercana a la Cordillera de los Andes y que ocupa el 28.1% del territorio peruano, el clima es lluvioso y frío principalmente.
Mientras que en la selva, donde más se cumple el clima tropical de Perú ocupando el 60.3% de su superficie, el estado del tiempo es definido como muy lluvioso y cálido.