América del Sur es conocida principalmente por sus países de habla hispana y portuguesa. Sin embargo, hay tres naciones en este subcontinente donde predominan otros idiomas.
Nos referimos a Guyana, Surinam y Trinidad y Tobago. Cada uno de estos territorios ofrece una rica diversidad cultural e histórica que son dignas de destacar.
Guyana: riqueza petrolera
Guyana tiene el inglés como idioma oficial como resultado de su colonización británica, que terminó con su independencia en 1966.
Con una población de alrededor de 800.000 personas, Guyana es el único país sudamericano donde el inglés es la lengua oficial mayoritaria. Sin embargo, existe una mezcla de otras lenguas debido a su población multicultural, que incluye comunidades de origen indio, africano, amerindio, chino y portugués. Las lenguas criollas, como el criollo guyanés, son ampliamente habladas en contextos informales y reflejan la complejidad cultural del país.
Guyana es famosa por su biodiversidad. En ese sentido, destacan lugares como las cataratas Kaieteur, que son una de las cascadas más poderosas y majestuosas del mundo.
La economía de Guyana ha estado históricamente basada en la agricultura y la minería, pero recientemente ha experimentado un crecimiento económico significativo gracias al descubrimiento de grandes reservas de petróleo frente a sus costas.
Surinam: un pasado neerlandés
Surinam, el país más pequeño de América del Sur, se caracteriza por su idioma oficial: el neerlandés. Esto se debe a su pasado como colonia de los Países Bajos hasta 1975, cuando obtuvo su independencia. Con un censo de poco más de 600.000 habitantes, Surinam se distingue por su diversidad étnica, que incluye grupos hindúes, criollos, javaneses, maroons, amerindios y chinos.
Además del neerlandés, existen muchas lenguas locales en uso. Por ejemplo, el Sranan Tongo (un criollo inglés), el hindi surinamés, el javanés y varios dialectos amerindios son parte del paisaje lingüístico cotidiano.
La capital, Paramaribo, es famosa por su arquitectura colonial bien preservada y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La economía de Surinam se basa principalmente en la minería de bauxita, así como en el oro, petróleo, productos agrícolas y madera.
Durante los últimos años, Surinam ha explorado nuevas oportunidades en energías renovables y turismo para diversificar su economía.
Trinidad y Tobago: ritmos y riqueza cultural
Trinidad y Tobago, aunque se encuentra en el mar Caribe, es considerada una prolongación del territorio continental de Sudamérica. Se ubica a solo 11 kilómetros de la costa noreste de Venezuela.
Estos dos islas, Trinidad y Tobago, tienen el inglés como idioma oficial debido a su historia como colonia británica. La población de alrededor de 1,4 millones de personas es un mosaico cultural con influencias africanas, indias, europeas y amerindias, lo que se refleja en sus festividades, música y cocina.
Conocida por ser la cuna del calipso y el soca, la música es parte integral de la identidad de Trinidad y Tobago. El carnaval es una de sus celebraciones más icónicas.
Las islas también son notables por su biodiversidad y paisajes naturales, como el Asentamiento de Playa Pigeon Point y la Reserva Forestal de Tobago.
La economía de Trinidad y Tobago se destaca en la región por su producción de petróleo y gas natural, lo que la convierte en una de las más ricas en términos de PIB per cápita.
La herencia y las tradiciones que aportan estos países, junto a las imponentes maravillas naturales que poseen, los convierten en destinos que merecen una mayor exploración y reconocimiento en el panorama sudamericano y mundial.