En el marco de un creciente ambiente de inseguridad en nuestro país, las estadísticas policiales recientes han revelado una preocupante estadística en los casos de extorsión a lo largo del año 2024.
Según el boletín informativo de la Policía Nacional del Perú (PNP) desde el 1 de enero hasta el 7 de noviembre, las operaciones contra actos delictivos han enfrentado una presión creciente debido a la diversificación y proliferación de estos crímenes.
En cuanto a las modalidades de este delito, se reportaron 14.163 casos de coacción típica u ordinaria, 793 por “gota a gota”, 731 relacionados con el cobro de cupos, 410 por chalequeo y 107 clasificados como otros.
Durante el período reportado, se han registrado 16.204 incidentes de extorsión. Estas cifras indican una alarmante situación, ya que destacan especialmente el impacto en las víctimas, quienes comprenden una variedad de perfiles: comerciantes independientes (3.639), profesionales (3.468), amas de casa (2.256), transportistas (1.251), entre otros grupos afectados.
Esta amplia gama de ocupaciones muestra que la extorsión no discrimina y afecta transversalmente a diversas comunidades en el país:
- Comerciantes independientes: 3.639
- Profesionales: 3.468
- Amas de casa: 2.256
- Transportistas: 1.251
- Empleados: 931
- Estudiantes: 633
- Agricultores: 628
- Construcción civil: 264
- Funcionarios públicos: 248
- No indica: 113
Sicariato y homicidio
Según los registros de la Dirección de Investigación Criminal, se documentaron 1.843 homicidios, de los cuales el sicariato constituyó un delito significativo con 522 casos. Además, se identificaron 145 calificados y 121 simples, mientras que los robos con subsecuente muerte sumaron 85 incidentes.
El análisis demográfico revela que la mayoría de las víctimas son hombres, con un total de 1.628 frente a 215 mujeres. Las causas referidas para estos actos violentos incluyen ajustes de cuentas, bandas criminales organizadas y negativas al pago de cupos.
De las víctimas, un número significativo eran ciudadanos peruanos, aunque también se reportan víctimas venezolanas y colombianas.
La modalidad delictiva muestra que en 81 % de los casos se emplearon vehículos y el 56 % de los hechos ocurrieron en vías públicas. Las armas de fuego y vehículos motorizados, como las motos lineales, son los medios más empleados por los delincuentes.
Estos datos reflejan un desafío crítico para las autoridades peruanas y resaltan la necesidad de intensificar las medidas preventivas y las operaciones policiales para enfrentar el fenómeno del sicariato y los homicidios en el país.
¿Qué dice el Código Penal sobre la extorsión?
Según el artículo 200 del Código Penal, la extorsión es definida como “el que mediante violencia, amenaza o manteniendo en rehén a una persona, obliga a ésta o a otra a otorgar al agente o a un tercero una ventaja económica indebida o de cualquier otra índole, será reprimido con pena privativa de libertad no menor de seis ni mayor de doce años”. El tiempo en prisión puede aumentar si es que el accionar es más grave.
Canales de ayuda
La creciente ola de extorsiones en el Perú está afectando a miles de personas. Las víctimas pueden comunicarse con los siguientes números para obtener apoyo de las autoridades:
Línea 111
Servicio gratuito y confidencial para realizar denuncias inmediatas sobre extorsiones. Además, podrán recibir asistencia rápida por parte de la Policía Nacional del Perú.
Línea 105
Número de contacto directo con la Policía Nacional del Perú. El uso indebido de esta línea podría acarrear una multa de hasta S/19.800 o la suspensión del servicio.