Elmer Schialer defiende designación del hijo de Dina Boluarte en la ONU: “Es una promesa de la diplomacia peruana”

El nombramiento de David Gómez Boluarte, hijo de la presidenta Dina Boluarte, como tercer secretario del servicio diplomático de la Representación Permanente del Perú ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), continúa generando suspicacias en la población. Consultado sobre ello, el canciller Elmer Schialer defendió el desempeño del mayor de los engreídos de la mandataria y negó nepotismo.

Desde el Congreso de la República, el titular del Ministerio de Relaciones Exteriores halagó al familiar de la dignataria y lo calificó de “promesa de la diplomacia peruana”; asimismo, mencionó que “probó tener todo lo necesario para ir a las naciones unidas a la representación permanente”.

En ese sentido, negó que la sucesora de Pedro Castillo haya utilizado su cargo para designar a su hijo mayor, al margen del principio de mérito y capacidad, e incluso mencionó que ni siquiera él decide quiénes van a qué puestos, pese a que las resoluciones necesitan su firma para ser oficiales.

Como se recuerda, el documento que oficializa su cargo fue anunciado el 27 de noviembre. La nueva posición de Gómez Boluarte en la ONU implica que sus gastos serán cubiertos por el presupuesto del Ministerio de Relaciones Exteriores. Una vez que se definan las fechas, el vástago de la jefa de Estado asumirá sus labores.

Mientras algunos de sus compañeros de promoción fueron designados a países como Indonesia, Canadá, Israel y China, ya sea como funcionarios de la Embajada del Perú o Consulado General del Perú, David Eduardo Gómez Boluarte fue anunciado como representante permanente del Perú ante la ONU con sede en Nueva York, Estados Unidos; cargo que es bastante demandado al interior de la Academia Diplomática.

David Eduardo Gómez Boluarte, hijo mayor de la presidenta de Perú, es un joven economista que estudió en la Academia Diplomática del Perú Pérez de Cuellar. Fue admitido en el Servicio Diplomático del Perú en marzo de 2021, antes de que su madre asumiera la presidencia junto a Pedro Castillo.

Su ingreso fue aprobado tras obtener una de las 25 plazas disponibles, y posteriormente, luego de concluir con éxito sus estudios en 2022, se oficializó su inscripción como tercer secretario mediante la resolución suprema N.º 168-2022-RE.

“Sse resuelve Incorporar al Servicio Diplomático de la República e inscribir en el Escalafón del Servicio Diplomático con la categoría de Tercer Secretario, a partir del 1 de enero del año 2023, a los siguientes veinticinco (25) alumnos de la Academia Diplomática del Perú Javier Pérez de Cuéllar”, señala el documento.

A pesar de las dudas que puedan surgir, no se puede hablar de nepotismo en este contexto, ya que la ley del servicio civil no se aplica a la ley del servicio diplomático. Esta última se rige por normativas especiales, similares a las que regulan al Ejército peruano y a la Policía Nacional del Perú, entre otras instituciones que operan bajo sus propias estructuras y competencias.

El proceso de selección de la Academia Diplomática es altamente competitivo y se enfoca en identificar a los candidatos más calificados para representar al Perú en el ámbito internacional. No se especifica una carrera universitaria en particular, pero se valoran formaciones en áreas como las ciencias sociales, humanidades, derecho, economía y relaciones internacionales.

La evaluación de los postulantes incluye pruebas de competencias en idiomas, lo que subraya la importancia del dominio de lenguas extranjeras en el ejercicio de la diplomacia, además de ser peruano de nacimiento y tener como máximo 30 años al 31 de diciembre del año de la convocatoria.