“Solo quedan tres”. Con estas palabras, la abuela de Jherico Cueto Mayta muestra su preocupación por la vida de su nieto y recuerda con pesar como, el grupo de 10 amigos con los que solía pasar el tiempo se redujo porque sus integrantes fueron asesinados. La mujer teme que su nieto sea el siguiente.
Jherico Cueto Mayta tiene 18 años y pasó tres recluido en Maranguita. Fue detenido cuando cumplió 15 y en ese entonces ya había intentado matar a una persona. En febrero de este año, el joven egresó del centro juvenil con una constancia que certificaba que había cumplido con la rehabilitación ordenada por el Poder Judicial.
Su familia dice que “salió renovado” y que desde entonces se ganaba la vida vendiendo emoliente. La Policía de Homicidios tiene otra versión sobre la “nueva vida” de Cueto. Lo conocen como “el sicario de la bicicleta” y lo vinculan con seis asesinatos por encargo.
La historia recogida por el semanario Hildebrandt en sus trece, narra como una vez más un menor víctima de la violencia, la pobreza, pone en evidencia la deficiencia y la corrupción dentro del sistema penal juvenil.
Niñez
Como casi todas las historias de violencia, esta también inicia con la pérdida de un miembro de la familia. Jherico Cueto fue criado por su abuela materna, en la Calle Washington, en La Perla, donde era común encontrar a vendedores de droga. Pese a eso, la familia asegura que fue un niño bueno, hasta que su papá, quien trabajaba como sereno en San Miguel, murió. Jherico o ‘Araña’ tenía 7 años.
A partir de ese momento comenzó a escapar de casa y tener problemas con su madre, quien lo denunció por agresión. Cuando ‘Araña’ fue detenido y recluido en ‘Maranguita’ había sido acusado por intento de robo, extorsión y homicidio. En enero de 2021, un mes antes de ingresar al centro juvenil, Cueto caminaba junto a tres amigos cuando un hombre comenzó a disparar contra ellos. En el lugar del ataque, la Policía encontró 17 casquillos de bala, lo que evidenció la brutalidad y violencia del atentado.
Asesinatos
Pese a que la madre de alias ‘Araña’ asegura que desde que salió de Maranguita lo ve maduro y con ganas de “ser cantante”, la PNP lo ubica como el responsable de seis asesinatos, todos con una marca común: el autor huyó en una bicicleta.
El más reciente y uno que tuvo gran cobertura mediática fue el de Christopher Castañeda, quien fue asesinado de varios disparos en la cara. El hecho ocurrió el pasado 15 de octubre, en una plaza en el Callao. Cámaras de seguridad de la zona captaron al supuesto autor corriendo y a pocos metros de la escena del crimen la PNP encontró una bicicleta vieja.
Agentes de la División de Investigación de Bellavista, liderados por el comandante Ronald Risco, identificaron un patrón tras hallar una bicicleta abandonada en la escena del crimen de Christopher Castañeda. Según la Policía, este vehículo estaría relacionado con al menos seis asesinatos por encargo, cometidos en distintas ubicaciones.
En cuatro de estos casos, el sicario llegó en bicicleta, mientras que en uno de los escenarios el vehículo fue dejado atrás. La principal hipótesis apunta a que todos los crímenes habrían sido cometidos por el mismo perpetrador.
Elizabeth Mayta, madre de alias “Araña”, sostiene que su hijo no es responsable de los homicidios que se le imputan, ya que asegura que durante el primero de ellos él se encontraba internado “Maranguita”.
Sin embargo, la PNP sospecha que el joven pudo haber salido del centro con la complicidad de malos funcionarios. Lo cierto es que, tras las investigaciones, el joven volvió a ser recluido, aunque esta vez en una prisión para adultos.