Una llama constante arde en el Perú. Su calor no solo alimenta las brasas, sino también la evolución de una cultura gastronómica que encuentra en la parrilla un nuevo punto de encuentro. Inspirado en técnicas ancestrales y en la influencia del asado argentino, el país ve cómo la parrilla se transforma en una propuesta que abraza la innovación sin abandonar sus raíces.
El fenómeno parrillero en el Perú no se limita al acto de asar carnes. En los últimos años, esta práctica culinaria experimentó un crecimiento que la sitúa como una de las tendencias gastronómicas más relevantes del momento. Desde la clásica preparación de cortes hasta la incorporación de propuestas creativas como pizzas al carbón o sushi con carnes ahumadas, la parrilla se ha convertido en un laboratorio de experimentación.
Stefano Zapatier, reconocido chef y líder de la Sociedad Peruana de Parrilleros, destaca este cambio. “En el Perú, la parrilla dejó de ser una actividad ocasional. Ahora es una expresión gastronómica que reinventa los sabores locales, combinándolos con técnicas internacionales. Esto nos ha permitido mostrar la versatilidad de nuestra cocina”, afirma, quien también lidera el restaurante El Jefe Smoked BBQ.
La Sociedad Peruana de Parrilleros es un catalizador de este movimiento. Mediante talleres, competencias y eventos, esta organización creó un espacio para que tanto profesionales como aficionados perfeccionen sus habilidades y comprendan la importancia de las técnicas en el manejo del fuego y los cortes.
Un homenaje al fuego
En esta coyuntura de creciente interés por la parrilla, Parriland emerge como un festival que busca rendir homenaje a esta práctica. Este sábado 30 de noviembre, el Parque de la Exposición en Lima será el escenario donde 16 restaurantes especializados presentarán sus mejores propuestas al carbón.
Entre las ofertas gastronómicas, los asistentes podrán disfrutar de preparaciones únicas que incluyen carnes ahumadas, embutidos caseros, vegetales asados y, por supuesto, los infaltables cortes tradicionales. Técnicas como el ahumado lento y la cocción a fuego directo estarán presentes, mostrando la diversidad que el arte de la parrilla puede ofrecer.
El evento también contará con música en vivo, sumando a la experiencia una atmósfera festiva. Artistas como Miki González, Los Yacks y Cristina Luyo serán parte de la programación, prometiendo un espacio que combine gastronomía y entretenimiento. Las entradas tienen un costo de S/ 40 y pueden adquirirse a través de la plataforma Joinnus.
Parriland forma parte del portafolio de eventos gastronómicos organizados por FILO, una plataforma que desde 2016 ha buscado resaltar la riqueza culinaria peruana. Con más de 49 ferias realizadas en ciudades como Lima, Chiclayo y Piura.
Referencias internacionales
El auge de la parrilla en Perú no ocurre en un vacío. La reciente premiación de Don Julio, un restaurante de Buenos Aires, como el mejor de Sudamérica generó un interés por las técnicas asociadas a este tipo de cocina.
En el evento donde fue reconocido, Pablo Rivero, propietario de Don Julio, destacó la dedicación de su equipo y el enfoque en la sostenibilidad. El restaurante emplea animales de razas Hereford y Angus, cuyas carnes pasan por un exclusivo proceso de maduración. Este enfoque, que combina tradición con técnicas modernas, le ha permitido redefinir la parrilla argentina en clave contemporánea.
El éxito de Don Julio ha puesto nuevamente en el centro de atención a las parrillas argentinas, inspirando a países vecinos como Perú a continuar explorando este formato desde perspectivas locales. Otros establecimientos como Gran Dabbang y Mishiguene, también en Buenos Aires, figuran en la lista de los mejores de Sudamérica, demostrando la fuerza de esta propuesta culinaria.
De la mano de chefs, restaurantes y eventos que apuestan por este arte, la parrilla continúa consolidándose como una expresión que celebra la tradición mientras apunta hacia la innovación.