De acuerdo con la Real Academia Española, una asociación gremial es una organización de personas naturales o jurídicas que se agrupan para promover actividades que les son comunes. La naturaleza de un gremio es esa. Defender los intereses comunes de quienes lo integran. No obstante, a partir de la experiencia compartida entre sus miembros y su equipo técnico, existe un gremio que supera largamente esa definición.
En 1989, nació la Sociedad Nacional de Exportadores. Un grupo de empresarios que veían en el mundo un mercado ampliado para sus operaciones locales. Conscientes de los retos y oportunidades que ofrecía el comercio exterior en su real dimensión: exportaciones, importaciones y servicios conexos, en 1998, se convirtió en la Sociedad de Comercio Exterior del Perú – ComexPerú. Una asociación que se dirige y orienta su política bajo tres principios: promover el desarrollo del comercio exterior; defender el libre mercado; y, alentar la inversión privada y empleo de calidad.
Tal vez el mayor reconocimiento que tiene ComexPerú, es haber sido el abanderado de la promoción y defensa de una política de apertura e integración con el mundo, la cual algunos veían como una amenaza para actividades productivas emblemáticas de nuestro país. “El agro peruano va a desaparecer”, sostenían con referencia a los acuerdos comerciales que negociaba nuestro país. Foros y marchas con bloqueos de vías se oponían. Esto se rebatió con los resultados del sector, a partir de una mayor participación de la inversión privada en el campo.
Sin el libre mercado ni la apertura, previo a los TLCs, el valor de las exportaciones de Perú al mundo ascendía a US$ 31,010 millones. Actualmente, esta cifra se ha duplicado, alcanzando aproximadamente US$ 64,622 millones al cierre de 2023. En el sector agrícola, los principales productos exportados en ese entonces eran el café verde en grano, los espárragos frescos y en conserva, y la leche evaporada; mientras que las exportaciones de uvas eran poco significativas y las de arándanos ni existían. Hoy, Perú es líder en exportaciones mundiales de uvas y arándanos frescos, con US$ 1,768 millones y US$ 1,669 millones, respectivamente.
Por otro lado, el valor de las importaciones era de US$ 30,093 millones; mientras que ahora asciende a cerca de US$ 52,293 millones. Bienes de capital y bienes intermedios para la industria son los más representativos, con más del 70% de nuestras importaciones totales. Así, el comercio exterior también contribuye al desarrollo de la industria nacional, ofreciendo maquinarias, equipos, insumos, de calidad y a precios competitivos.
ComexPerú cumple treinta y cinco años de vida institucional, y su aporte en esta y otras áreas es valorado por el sector público y privado. Hoy trabaja por un entorno favorable para la economía peruana, con el objetivo de hacer que sus beneficios alcancen a toda la población. Con dieciséis de treinta y cinco años formando parte de la organización, habiendo transitado etapas y compartido horas de trabajo con empresarios y profesionales de alto valor, doy fe del compromiso de todos con sus ideales y principios.
Como en toda organización, alguna vez hubo discrepancias, posiciones contrarias entre algunos de sus miembros al respecto de determinados temas. ¿La solución? Siempre poner al ciudadano, a la población, en el centro, como el principal beneficiado de sus decisiones y recomendaciones de política, respetando las reglas de juego. Y alguna vez por ello perdió asociados. Algunos, con los años, volvieron, convencidos de que apostar por los principios es el camino correcto.
En reiteradas ocasiones se menciona que el empresariado debería involucrarse en la actividad política. Pues no hay mejor manera de hacerlo que a través de ComexPerú. Una nueva campaña electoral está a la vuelta de la esquina. La batalla de ideas, la defensa de nuestras libertades y velar porque los recursos públicos se conviertan en servicios de calidad para todos, requieren del respaldo activo de más empresarios. Sumemos esfuerzos. Súmense a treinta y cinco años de trabajo incólume.