En el marco de la Cumbre APEC 2024, el Primer Ministro de Japón, Ishiba Shigeru, anunció un compromiso de financiamiento para promover la inclusión financiera en las regiones más vulnerables del norte del Perú. Se espera que dicho compromiso, que contempla un préstamo senior por US$50 millones, se formalice en 2025.
Este préstamo sería otorgado por la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) a Mibanco, a fin de seguir promoviendo la inclusión financiera de las mypes y las mujeres en el Perú.
El 70% de este financiamiento se destinaría a las regiones de Tumbes, Piura, Lambayeque, La Libertad, Cajamarca, Amazonas, San Martín y Loreto. La elección de estas regiones se basa en su alta tasa de pobreza y la necesidad de fomentar un desarrollo económico más equitativo.
Además, JICA ha establecido un objetivo ambicioso de destinar al menos el 30% de los fondos a mypes lideradas por mujeres a nivel nacional, con el fin de cerrar la brecha de género en el acceso al financiamiento.
“Estamos convencidos de que la inclusión financiera es clave para impulsar el desarrollo económico y reducir la pobreza”, afirmó Nishimura Takashi, Representante Residente de JICA en el Perú.
“Este compromiso de financiamiento se encuentra en etapa de negociación y permitiría a la entidad financiera llegar a las poblaciones más vulnerables y promover un crecimiento económico más inclusivo”, agregó.
La institución financiera utilizaría sus productos y servicios existentes para atender las necesidades de las Mypes en las regiones del norte. Se espera que la operación entre ambas instituciones se formalice en el 2025.
“Nos permitirá fortalecer nuestro alcance para seguir brindando mayores oportunidades a las micro y pequeñas empresas, especialmente a aquellas lideradas por mujeres”, señaló Javier Ichazo, CEO de Mibanco.
¿Qué es la Agencia de Cooperación Internacional del Japón?
La Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), es una agencia oficial del gobierno de Japón, cuenta con 96 oficinas en el extranjero, opera aproximadamente en 140 países y territorios y sus operaciones en el año fiscal 2022 ascendieron a 2.745 millones de yenes japoneses.
La cooperación de JICA tiene como objetivo resolver los problemas socio económicos en cada país, a través de diversos esquemas tales como la cooperación técnica, el financiamiento de proyectos públicos y el financiamiento y la inversión en el sector privado.
JICA en el Perú, además de trabajar en el campo de la mitigación de los efectos del cambio climático, también implementa proyectos en las áreas de gestión de residuos sólidos, gestión de riesgo de desastres, promoción de la industria e inclusión financiera.
De esta manera, busca promover la innovación de manera transversal en estas áreas y trabajando en colaboración con entidades públicas y privadas, ONG, academia, entre otros, con el fin de contribuir al desarrollo socio económico sostenible del Perú.
¿Cuál es la relación económica entre Perú y Japón?
Japón es el tercer socio comercial del Perú en Asia (6% del total) y el séptimo en el mundo. Perú exporta a Japón, principalmente, bienes minero-energéticos (89% del total), siendo el tercer mercado más importante del cobre y el cuarto de gas natural. Por su parte, Japón provee al Perú bienes automotrices y maquinaria (56% del total).
Tras el récord logrado en 2022 (US$4.152 millones), el comercio de bienes Perú-Japón cayó 20,6% en 2023 debido a la menor exportación (-27,8%), afectada, principalmente, por la estabilización de los precios de los productos energéticos y de los minerales. En contraste, la importación creció 2,2%.
Los menores precios internacionales en 2023 redujeron las exportaciones energéticas y mineras; de US$1.064 millones a US$461 millones en el primer caso (-56,7%), y de US$1.750 millones a US$1.568 millones en el segundo (-10,4%). La exportación de cobre, primer bien exportado a Japón, cayó 4,6% respecto al año pasado.
Igualmente, la exportación no minero–energética (11% de la exportación) cayó 27% en 2023 como resultado de las menores ventas agropecuarias, pesqueras y textiles. En la esfera agropecuaria, la exportación de fruta fue récord (US$68 millones) tras el ingreso de la uva, que aportó ventas por US$8 millones.