El panorama en los Andes peruanos se oscurece. El Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI) alertó sobre un riesgo inminente de deslizamientos, huaicos y otros movimientos en masa en 439 distritos de la sierra, ante la llegada de intensas lluvias entre el 24 y el 26 de noviembre.
Este fenómeno ha elevado la alerta en varias regiones, poniendo a las autoridades y a la población en alerta máxima, mientras se preparan para enfrentar lo que podría convertirse en una verdadera prueba de resiliencia para los habitantes de las zonas más vulnerables.
El riesgo acecha a 439 distritos
Según el informe emitido por INDECI, la región de Áncash se lleva la delantera en cuanto a la mayor cantidad de distritos con un riesgo muy alto de ser afectados, con un total de 53 jurisdicciones en alerta.
A esta le siguen Cajamarca, con 42 distritos, y Ayacucho, con 35, regiones donde las autoridades locales ya están coordinando acciones preventivas para mitigar los efectos de la temporada de lluvias. Estos eventos meteorológicos, que no son raros en la región andina, han cobrado fuerza por la creciente intensidad de las precipitaciones que podrían desencadenar huaicos, deslizamientos y otros desastres naturales.
El INDECI ha pedido a los gobiernos locales y regionales que garanticen que las rutas de evacuación estén despejadas y adecuadamente señalizadas, facilitando el paso hacia zonas seguras.
Así como se organizan rutas de escape, también se asegura la disponibilidad de centros de salud, compañías de bomberos y comisarías, quienes podrían ser los primeros en recibir a los afectados por cualquier desastre. La recomendación se extiende a la población, a quienes se les pidió reforzar sus viviendas y tener sistemas de alerta temprana listos, como silbatos, sirenas o altavoces, para comunicar cualquier emergencia de forma efectiva.
Así como un volcán puede liberar su furia sin previo aviso, las lluvias intensas que se avecinan en las próximas horas pueden desbordar los ríos y quebradas, provocando huaicos devastadores. Los pueblos más cercanos a estos cauces ya están en pie de guerra, reforzando sus viviendas, revisando planes de evacuación y pidiendo a los más vulnerables que estén alerta, pues en cuestión de horas la calma puede transformarse en caos.
De otro lado, el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) no ha dejado de monitorear la situación. Desde su sede central, las autoridades coordinan con los gobiernos locales y regionales para implementar acciones rápidas y eficaces que permitan reducir el impacto de estos desastres naturales.
Las lluvias no solo pueden dañar infraestructura, sino también arrasar con cultivos, alterar el suministro de agua potable y poner en riesgo la vida de miles de personas.
Precipitaciones hasta el 26 de noviembre
Diversas regiones podrían enfrentar fenómenos meteorológicos peligrosos en los próximos días, según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi). La entidad ha emitido una alerta naranja debido a la previsión de eventos climáticos de moderada a fuerte intensidad, que incluyen nieve, granizo, aguanieve y precipitaciones, desde el domingo 24 hasta el martes 26 de noviembre.
El Senamhi ha detallado que se espera la caída de granizo en áreas situadas por encima de los 2800 metros sobre el nivel del mar, mientras que las nevadas podrían afectar a localidades ubicadas a más de 3800 metros en la sierra centro y sur del país. Además, estos fenómenos estarán acompañados de descargas eléctricas y ráfagas de viento que podrían alcanzar velocidades de hasta 35 km/h. También se ha mencionado la posibilidad de chubascos dispersos en la costa centro y norte.