La presidenta de Perú, Dina Boluarte, protagonizó un momento controvertido durante la promulgación de la ley que autoriza el nombramiento de docentes contratados en universidades públicas. En el evento, realizado en el Palacio de Gobierno, la mandataria recibió como obsequio una estatua de la Justicia. Sin embargo, sus declaraciones generaron sorpresa al sugerir un desconocimiento sobre el significado simbólico de la figura.
“Muchas gracias. Está ciega la justicia, le vamos a quitar la venda”, expresó la mandataria durante el evento. Cabe mencionar que sus declaraciones surgen en medio de los cuestionamientos que su gestión enfrenta por presuntos actos de corrupción, generaron una amplia repercusión mediática y política.
El comentario llamó la atención, especialmente porque la venda en la figura de la Justicia tiene un profundo simbolismo. Representa la imparcialidad del sistema judicial, enfatizando que las decisiones deben basarse únicamente en los hechos y las leyes, sin influencias externas o prejuicios. Según interpretaciones tradicionales, esta ceguera simbólica asegura la igualdad ante la ley, independientemente de la identidad o estatus de las personas involucradas.
Dina Boluarte rechaza corrupción en su gobierno
En el mismo evento, Boluarte reiteró su compromiso con la lucha contra la corrupción, declarando enfáticamente: “Este Gobierno no es corrupto, y no hay en este Gobierno espacio para corruptos ni para corruptores estamos cansados de esa lacra que tanto daño han hecho al desarrollo y a la patria”. No obstante sus palabras llegan en medio de investigaciones y luego de que el Poder Judicial dictara prisión preventiva contra su hermana Nicanor Boluarte, de quien se desconoce su paradero.
De acuerdo con lo informado por Panamericana Televisión, la presidenta es señalada como una de las principales investigadas por presuntos actos de corrupción, lo que pone en duda la coherencia entre su discurso y los hechos actuales. Cabe señalar que fiscalía tiene varias investigaciones vinculadas al actual gobierno, incluyendo casos que involucran a altos funcionarios y asesores cercanos a Boluarte.
Solo 5,1 % aprueba su gestión
La presidenta Dina Boluarte enfrenta una grave crisis de legitimidad, con una desaprobación que alcanza el 89,5 % a nivel nacional, según la más reciente encuesta urbana y rural de CPI, difundida este sábado. Este alto rechazo refleja el descontento generalizado de la ciudadanía hacia su gestión, marcada por conflictos sociales, tensiones políticas y la falta de soluciones a problemas estructurales en el país.
En comparación con el mismo periodo del año anterior, la desaprobación ha aumentado más de cinco puntos porcentuales, ya que en noviembre de 2022 se encontraba en 84,3 %, según un sondeo previo de la misma firma. La encuesta, presentada en exclusiva por RPP, también muestra que solo el 5,1 % de los encuestados aprueba la gestión de la mandataria, mientras que un 5,4 % optó por no pronunciarse sobre su desempeño. En noviembre de 2023, el respaldo a la presidenta era ligeramente superior, alcanzando el 6,3 %.
“Con 10 solcitos”
La presidenta Dina Boluarte participó en un evento junto a las madres de las ollas comunes, donde intentó reconocer la labor de las mujeres que lideran estos espacios, que operan con recursos limitados. Sin embargo, sus declaraciones parecieron desconectarse de la difícil realidad que enfrentan a diario quienes gestionan estos comedores comunitarios.
Boluarte afirmó que con tan solo 10 soles es posible preparar una sopa, un plato de segundo y hasta un postre. Sin embargo, según la Encuesta Nacional de Percepción de Desigualdades (Enades) 2024, la canasta básica familiar ha aumentado en un 14% en los últimos dos años, lo que hace más complicado cumplir con estas afirmaciones en el contexto actual.
“A veces con 10 solcitos hacemos sopa, segundo y hasta postrecito. No las inventamos, así somos las mujeres, pero también acompañada de los compañeros que acompañan a ustedes”, fueron las palabras de la jefa de Estado el último viernes 22 de noviembre.