La convocatoria del juez supremo dirimente se dio por parte de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema de Justicia al tener dos juezas supremas que apoyaban la medida de prisión preventiva, versus tres que se mostraron a favor de confirmar la comparencia con restricciones.
La fiscalía interpuso dicha medida cautelar como parte de las investigaciones en curso, que buscan esclarecer los hechos relacionados con el caso. El punto central para definir que su libertad sea restringida es la pérdida del dispositivo móvil de Peralta, ya que se considera que podría contener información relevante para el caso y evidenciaría un interés en obstaculizar la investigación.
“Solo para aclarar con respecto a los teléfonos, el que siempre he usado lo brindé y entregué cuando entraron a mi oficina. Sí es cierto que he usado el otro número hasta hace 2 meses, pero yo ya no lo porto porque se me perdió y por eso me compro un nuevo teléfono que lo brindo cuando fui a declarar. [...] El día que fui a declarar ese teléfono se cayó y a la asistenta que me estaba acompañando le pedí que lo arreglaran y ya lo arreglaron. Después de mi declaración, y por el tráfico, he llegado a mi casa y a los 10 min caen a mi casa donde ni siquiera tuve opción [de darlo] porque lo di a arreglar”, mencionó Peralta durante la audiencia.
Como se recuerda, en la sesión del pasado 8 de noviembre, los cinco jueces que ratificaron la medida impuesta al conductor de ‘Porque hoy es sábado con Andrés’, no lograron ponerse de acuerdo para decidir sobre la apelación fiscal que buscaba revocar la comparecencia con restricciones impuesta contra Peralta y variarla a una prisión preventiva por 18 meses.
La fiscal Alejandra Cárdenas sostiene que son tres hechos diferentes los que se le atribuyen, relacionados con los delitos de corrupción y tráfico de influencias. En ese sentido, criticó las razones del juez que inicialmente negó la prisión preventiva a Peralta, calificándolas de contradictorias.
Según la fiscal, no se consideró adecuadamente el riesgo de que Peralta pudiera obstaculizar la investigación y obstruir la verdad, un peligro que, según ella, fue señalado por el propio personal del despacho, al negar el número con el que se comunicaban diariamente.
Por su lado, el abogado de Peralta Benji Espinoza indicó al juez que se manipuló y adulteró las pruebas recabadas por la Fiscalía cuando tuvieron la visita inopinada en la oficina de la fiscal de lavados de activos.
Medio millón de soles injustificados en su cuenta
En la víspera, el dominical Cuarto Poder reveló que Peralta tenía S/ 462,659 en una cuenta de Scotiabank, una cifra que no se corresponde con su salario mensual de aproximadamente S/ 18,000.
El auditor financiero Óscar Falconi, consultado por el programa, señaló que el nivel de ahorro de Peralta no se alinea con sus ingresos habituales. Según Falconi, si la fiscal no hubiera gastado nada de su salario mensual, habría acumulado alrededor de S/ 200,000 en un año, lo que hace sospechosa la cantidad encontrada en su cuenta.
Además, el programa informó que Peralta había obtenido un préstamo hipotecario de más de S/ 330,000 en 2018, el cual logró cancelar en un tiempo récord de nueve meses, a pesar de haberse comprometido inicialmente a pagarlo en tres años. Este pago anticipado incluyó una amortización de S/ 230,000, lo que incrementa las dudas sobre el origen de sus fondos.
La situación de la fiscal Peralta se complica aún más debido a su relación con Andrés Hurtado, quien también está bajo investigación por su presunta participación en actividades ilícitas. La conexión entre ambos ha sido objeto de escrutinio, dado que Hurtado es una figura pública conocida en el país al que se le acusa de haberse jactado del poder que tenía por su amistad con la fiscal.