La educación financiera, un tema que suele abordarse en la adultez, comienza a tener un enfoque distinto en Perú gracias a la iniciativa de Arantxa Layseca. Con el lanzamiento de “Pequeños Financieros”, una colección de cuentos infantiles orientada a estudiantes de primaria, donde se busca promover una relación temprana y sana con el dinero, abordando temas básicos de administración de finanzas para niños de primero a sexto grado.
La experta habló con Infobae Perú y sostiene que familiarizar a los niños con conceptos financieros desde una edad temprana permite a los adultos del mañana tomar decisiones informadas. “Cuando las personas ven mis libros, muchas veces me dicen: ‘Si hubiera leído esto de niño, habría evitado muchos problemas’”. Esta observación, según ella, refleja la necesidad de brindar herramientas a los niños para que, en el futuro, tengan menos estrés financiero y eviten deudas severas. La propuesta también pretende inspirar a los niños a invertir en sus oportunidades, rompiendo así posibles ciclos de endeudamiento dentro de sus familias.
La idea no es que los niños asuman decisiones financieras complejas desde pequeños, sino que entiendan principios fundamentales, como gastar menos de lo que ganan y aprender a ahorrar. De acuerdo con Layseca, inculcar estos hábitos en la infancia facilita que, en su adultez, los individuos manejen sus ingresos y construyan estabilidad económica sin dificultades.
“Pequeños Financieros” fue concebido como una herramienta didáctica que usa el relato de personajes animados para transmitir conceptos como el ahorro, la planificación de gastos y la toma de decisiones financieras. Cada cuento está diseñado para conectar con la realidad de los estudiantes a través de experiencias y personajes que resultan familiares y entretenidos, como el chanchito Giver, la gatita Catu, la vaquita Muchi y la tortuga Toru. Layseca explica que estos personajes buscan que los niños comprendan temas financieros de manera práctica, fomentando en ellos la habilidad de analizar y gestionar sus recursos.
La motivación detrás del proyecto
Arantxa cuenta que su interés por la educación financiera surgió a raíz de una experiencia personal que, aunque desafiante, la llevó a replantear su relación con el dinero. En 2017, decidió llevar a cabo un reto de un año sin comprar artículos de consumo personal, con el propósito de ahorrar y priorizar sus metas. Tras ese periodo de reflexión y autocontrol, comenzó a explorar las finanzas personales, lo que la llevó a impartir su primer curso de educación financiera, inicialmente dirigido a adultos. Sin embargo, fue durante la pandemia cuando recibió la propuesta de desarrollar un curso para niños en etapa primaria. Este proyecto le planteó el reto de simplificar los conceptos financieros para que fueran comprensibles y atractivos para un público joven.
A partir de este trabajo, creó a los personajes de “Pequeños Financieros” y un curso en formato de presentación visual que, al tiempo de desarrollarlo, visualizó como una serie de cuentos. En 2021, se publicó el primer libro de la colección, un logro que hoy se consolida con la ampliación de la serie a seis títulos, alineados con el plan lector del Ministerio de Educación del Perú.
Un enfoque educativo respaldado por docentes
El lanzamiento de “Pequeños Financieros” tuvo lugar en el colegio Magister, institución a la que Layseca tiene un vínculo especial, pues allí estudió durante su infancia. Este evento convocó a docentes interesados en explorar el potencial de los cuentos para enseñar finanzas a sus alumnos, lo que permite prever un alcance considerable de la iniciativa. “Los docentes son realmente la fuerza de nuestro movimiento”, sostiene, quien considera clave la colaboración de los maestros para que el conocimiento financiero llegue a los estudiantes y se convierta en una competencia básica.
Para la experta, enseñar a los niños sobre finanzas tiene un impacto profundo. En sus sesiones, ha observado el interés que los niños muestran por temas financieros, en especial cuando estos se mencionan en el entorno familiar. “Me ha sorprendido preguntas como las de un niño de segundo grado, quien me preguntó cómo se calculan las tasas de interés de una deuda. Ellos escuchan sobre dinero en casa, lo que hace aún más urgente educarlos, para que comprendan de manera adecuada lo que escuchan”, relata.
Una herramienta accesible para la enseñanza de finanzas
Los cuentos de “Pequeños Financieros” se encuentran disponibles en la tienda virtual de Eureka, lo que permite a maestros, padres y alumnos contar con una guía práctica y accesible para la enseñanza del dinero de forma lúdica y entretenida. A través de estos relatos, los niños pueden comprender conceptos como el uso de tarjetas de crédito, la administración de deudas, el rol de las instituciones financieras y, en especial, la importancia de ahorrar.
Además, recalca que la mejor manera de conectar con los niños es a través de sus talentos y habilidades innatas. Para ella, estos talentos no solo representan una vía para que los niños generen ingresos en el futuro, sino también una herramienta clave para una buena gestión financiera. “Lo más importante es que los niños comprendan que el dinero es una herramienta, y que para manejarlo bien, deben confiar y desarrollar sus propias capacidades”, concluye.