Vapeadores: ¿son realmente inofensivos?

La situación se torna más compleja porque la población joven comienza con este mal hábito por imitación o curiosidad y termina volviéndose dependiente a la nicotina

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Colombia avanza en la salud pública restringiendo vapeadores y cigarrillos electrónicos - crédito cuartoscuro.com
Colombia avanza en la salud pública restringiendo vapeadores y cigarrillos electrónicos - crédito cuartoscuro.com

El 99% de los cigarrillos electrónicos contienen nicotina líquida y no son simples vapeadores para aspirar “vapor de agua”. Además, tienen saborizantes y aditivos. En suma, están compuestos por sustancias tóxicas probadas. En la literatura médica científica se ha analizado que estos productos poseen insumos cancerígenos como nitrosaminas, propilenglicol, formaldehido, formol, glicerina vegetal, entre otros.

Lamentablemente, la moda actual propiciada por la industria del tabaco está fabricando vapeadores dirigidos como siempre a la población más vulnerable. Jóvenes y adolescentes se inician en el vapeo antes de empezar a fumar influenciados por publicidades engañosas que los orillan a tomar malas decisiones para su salud.

Además, la situación se torna más compleja porque la población joven comienza con este mal hábito por imitación o curiosidad y termina volviéndose dependiente a la nicotina. No es para menos. Ahora, existen cigarrillos electrónicos con un sinfín de saborizantes que resultan muy atractivos para los más chicos. Estos dispositivos necesitan mayor concentración de recarga de nicotina líquida, entre otras sustancias nocivas.

En cuanto a las consecuencias negativas de los vapeadores a corto, mediano y largo plazo para la salud, en la práctica médica se observa con frecuencia que los fumadores de cigarrillos electrónicos presentan diversos cuadros respiratorios. Desde episodios simples, como alergias, alteración de las mucosas de la orofaringe, hipofaringe hasta severas inflamaciones de la mucosa del árbol respiratorio y pulmones. De igual forma, se reportan casos de asma bronquial y bronquiolitis en jóvenes que en ocasiones producen la muerte.

En conclusión, a la luz de los resultados de diversos estudios y del conocimiento actual de los vapeadores y sus contenidos, si bien contienen menor número de cancerígenos comparado con un cigarro convencional, no dejan de ser pocos saludables para el organismo. Así que lo mejor es no consumir este producto.

Cáncer de pulmón se incrementa en adultos jóvenes

En el Perú, se diagnostican 2,900 nuevos casos de cáncer de pulmón al año. Afecta a hombres y mujeres por igual. Lamentablemente, la mayoría de las veces se detecta en estadios muy avanzados. Por ello, es una de las neoplasias que causa más muertes en el mundo.

Desde hace poco, cada vez es más frecuente diagnosticar a adultos jóvenes e incluso a adolescentes de 16 años con esta enfermedad. Al parecer, esto se debe al mayor grado de polución ambiental, alteraciones genéticas secundarias, exposición a irritantes, a tóxicos inhalantes respiratorios y al tabaquismo.

En sus inicios, esta afección no causa molestias. Recién genera síntomas cuando ha desarrollado masa tumoral en el pulmón. Ahí es cuando el paciente presenta tos persistente que no cede al tratamiento, dolor de tórax, fatiga, pérdida de peso importante, decaimiento, malestar sostenido, falta de apetito y aumento sensorial del olfato y gusto (le da asco la comida, inclusive, sus platos favoritos).

El tratamiento varía según la fase del cáncer. El médico efectúa estudios de extensión para evaluar si existe metástasis, es decir, si el mal se ha propagado a otros órganos. Según los resultados, existen dos tipos de pacientes: los de estadios tempranos y los avanzados. Cuando la afección recién comienza se sugiere practicar una cirugía para remover el tumor más los ganglios regionales. Cuando está moderadamente avanzada se da tratamiento biológico, inmunoterapia combinada con quimioterapia o sola para redecir el tumor y la carga tumoral y luego -solo en casos seleccionados- se realiza una intervención quirúrgica. En tanto, en casos avanzados (que son la mayoría) se brinda quimioterapia y radioterapia para el control del padecimiento. Hay estudios clínicos que establecen el manejo terapéutico con medicamentos biológicos e inmunoterapia con quimioterapia. Un grupo importante de pacientes recibe tratamiento paliativo para controlar el dolor.

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