Crisis hídrica en Piura: agricultores bloquean la Panamericana Norte en protesta por falta de agua

Alrededor de 500 agricultores del Valle del Chira bloquearon hoy un tramo de la carretera Panamericana Norte en el distrito de Sullana, Piura, como medida de protesta ante la crisis hídrica que afecta sus cultivos y les genera grandes pérdidas económicas. Los manifestantes obstruyeron el tránsito en la vía utilizando piedras, ramas y un tráiler cargado de sacos de cebolla, afectando el tránsito y obligando a numerosos pasajeros a caminar para sortear el bloqueo.

Los agricultores, quienes iniciaron la protesta a las 6:00 a.m. en el sector conocido como La Golondrina, y también se posicionaron en otras vías estratégicas de Sullana, reclaman el suministro de agua que fue suspendido de forma inesperada después de haberse autorizado la siembra para esta temporada.

Los protestantes, que extenderán su medida de fuerza hasta el jueves 14 de noviembre, también exigen la destitución de funcionarios de instituciones clave, entre ellas el Proyecto Especial Chira Piura (PECHP), la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y la Administración Local de Agua (ALA). Los manifestantes piden la intervención urgente del Gobierno Regional de Piura y demandan al Gobierno Central un bono de emergencia desde noviembre hasta enero debido a las pérdidas en la producción agrícola, que se estiman en cerca de 300 millones de soles, según datos de la Cámara de Comercio de Piura.

Además, los agricultores exigen que el Gobierno Nacional concrete el trasvase de agua desde las lagunas de la represa de Poechos para lograr un último riego que permita salvar parte de sus cosechas. Solicitan también la elevación del muro de la represa de Poechos en 5 metros para aumentar la capacidad de almacenamiento, así como la construcción de nuevas represas.

En otra de las zonas afectadas, el Valle de San Lorenzo, en Tambogrande, los agricultores también se han movilizado para exigir a las autoridades cinco días de riego para salvar sus cultivos, tras 17 días sin agua. Estos manifestantes, de la Asociación Agraria de Productores de Arroz y Riego (AAVASL), se presentaron en las oficinas del Proyecto Especial Chira Piura (PECHP) para advertir que, de no obtener una respuesta inmediata, podrían perder hasta el 90% de sus sembríos, lo que implica la pérdida de su inversión y graves dificultades financieras, con deudas bancarias y posibles remates de sus tierras.

En el valle de Sechura, la situación es igualmente crítica. Tras el cierre de las compuertas de la represa de Poechos, los agricultores de la zona han quedado sin acceso a agua para sus cultivos, según indicó Víctor Garrido Lecca, presidente del Consejo Directivo del Proyecto Especial Chira Piura (PECHP). “No hay opción de dar agua para uso agrícola; solo se garantiza el abastecimiento para consumo poblacional hasta enero”, explicó Garrido Lecca al diario El Tiempo.

Ante la falta de respuestas a esta crisis, los agricultores de Sechura realizaron ayer una protesta frente a la Municipalidad Provincial de Sechura, y advirtieron que podrían movilizarse hacia el Gobierno Regional de Piura si no se toman medidas urgentes. La situación afecta su capacidad de producción y los expone a pérdidas financieras, al igual que en otras regiones de Piura, donde la falta de agua amenaza la estabilidad del sector agrícola.

El paro agrario coincide con una huelga de empresas de transporte urbano e interurbano en Piura, las cuales denuncian altos niveles de extorsión e inseguridad. Las empresas afectadas, entre ellas Guadalupe, Super Star, Emutsa, 6M, Sol de Piura y Entrubapi, se unieron al Paro Nacional de Transportistas y han paralizado su flota en reclamo por la falta de seguridad, lo que ha afectado a unos 50,000 usuarios de las “combis” que dependen de este servicio de transporte en la ciudad. Los transportistas estacionaron sus vehículos en frente al Gobierno Regional y la prefectura de Piura en señal de protesta.

Además, los mototaxistas de Piura también se unieron a las marchas, paralizando sus actividades en toda la región desde el día martes 12 de noviembre. Según el dirigente Julio Farfán, más de 3,000 mototaxistas de 130 paraderos formales suspendieron sus servicios en reclamo por la falta de seguridad y los elevados niveles de delincuencia que afectan a sus gremios.