Cámaras de seguridad registraron a Aldo Cóndor Aroni, de 26 años, conocido como “Makanaki”, en el momento exacto en que, disfrazado de indigente, abordaba un bus del Consorcio Roma con un objetivo específico de sustraer el celular de una pasajera distraída. A plena luz del día y en pleno transporte público, el hombre aprovechó el descuido de su víctima para arrebatar el equipo, acción que desencadenaría en una violenta huida que terminó con su detención.
El incidente comenzó cuando el sujeto se acercó a la pasajera por la ventana y en un movimiento rápido, tomó el celular de la mujer justo cuando ella intentaba realizar una llamada. Una vez logrado su objetivo, el detenido descendió del vehículo, pero no sin antes enfrentar la resistencia de testigos. Para intimidar y evitar ser retenido, lanzó una piedra contra el bus, causando daños en una de las lunas del vehículo y dejando herida a la víctima en las costillas. Su intento de fuga fue frustrado pocos metros después, cuando el cobrador y algunos pasajeros lograron detenerlo y entregarlo al grupo terna de la policía.
El sujeto contaba con varios antecedentes
En la intervención policial, el coronel Carlos López, jefe del Escuadrón Verde, confirmó que el detenido posee antecedentes por tráfico de drogas y otros delitos contra el patrimonio, según registros en la base de datos policial.
Durante la detención, ‘Makanaki’ admitió tener antecedentes, aunque intentó restarle importancia al afirmar que no eran por robo, sino relacionados con drogas. Sin embargo, según la policía, su historial evidencia una práctica constante de actos que afectan la seguridad de los ciudadanos, particularmente en zonas de alta afluencia y vulnerabilidad, donde la vigilancia suele ser limitada.
“Al revisar los antecedentes en nuestra base de datos, se registra que tiene antecedentes por tráfico de drogas, alteración del orden público y delitos contra el patrimonio. Es decir, es una persona que habitualmente causa daño a la sociedad. En las esquinas del Agustino, sube a los transportes públicos, ingresa a los mercados y arrebata celulares con gran ferocidad, cometiendo todo tipo de robos”, señaló el agente policial a Latina Noticias.
Crece la inseguridad en Lima y Callao
El episodio delictivo en el Consorcio Roma es solo una de las muchas situaciones que alimentan el creciente clima de inseguridad en Lima y Callao, donde un 94% de los ciudadanos manifiesta temores al transitar por las calles, de acuerdo con una reciente encuesta de Datum. A pesar de que 14 distritos fueron declarados en estado de emergencia para intentar frenar el aumento de delitos, los reportes semanales de robos, extorsiones y homicidios no disminuyen.
La capital peruana registra el mayor número de homicidios en 2024, con 638 casos hasta la fecha, según cifras del Sistema Nacional de Defunciones (Sinadef). Esta situación coloca a Lima como la región con la mayor incidencia de muertes violentas, seguida de La Libertad, con 198 homicidios, y Callao, que ha reportado 90 casos.
La inseguridad en Lima y otras regiones del país se enmarca en un contexto de violencia generalizada que afecta la vida cotidiana de los peruanos. Según datos de Datum, un 87% de la población se siente insegura al transitar por las calles, una percepción que se acentúa en Lima y Callao. La mitad de los encuestados afirma haber sido víctima de algún tipo de delito en los últimos tres meses, lo que incrementa la desconfianza hacia las instituciones encargadas de la seguridad.
Además, la encuesta muestra que un 87% de los peruanos desconfía de los jueces, mientras que un 86% tiene la misma percepción hacia los fiscales. Incluso, los serenos distritales, en comparación, gozan de mayor confianza que la Policía Nacional del Perú, lo que evidencia una crisis de credibilidad en las fuerzas del orden.