Videos muestran cómo una una aeronave perdió el control e impactó contra el mar de la playa limeña Curayacu, San Bartolo. En un operativo de rescate, el equipo de Lobos del Sur de la Municipalidad Distrital de San Bartolo respondió a la emergencia tras la caída de la avioneta en el mar.
El incidente ocurrió el lunes 11 de noviembre a las 9:00 a.m., según informó el grupo de socorristas a Infobae Perú. El pescador Domingo Rivas, quien se encontraba en su bote artesanal, logró rescatar al piloto Juan Carlos Torres Ticlla y llevarlo a la orilla, destacaron los rescatistas.
Según la municipalidad, la aeronave había despegado del aeroclub Lib Mandi y fue vista realizando maniobras peligrosas a baja altura sobre las playas Norte y Sur antes de precipitarse al agua.
El equipo de rescate, compuesto por Alonso Vega, quien operaba una moto acuática con camilla de rescate, junto a Jorge Villalobos, Russel Huaringa y Anderson Cama, se sumergió en el agua para realizar un procedimiento de buceo en apnea. Su objetivo era localizar la aeronave sumergida y verificar la presencia de posibles víctimas adicionales. Durante aproximadamente una hora, los socorristas buscaron en el área sin encontrar más personas afectadas.
La intervención fue coordinada con la municipalidad local, y el equipo de Lobos del Sur destacó su disposición para asistir en situaciones de emergencia. Con ayuda de Sunset Board por proporcionar la logística necesaria, como tablas de rescate, boyas y camillas, que facilitaron el operativo.
Rescate del piloto
El rescate del piloto fue posible gracias a la rápida intervención del pescador y surfistas que se encontraban en la zona. Estos ciudadanos lograron llevar al piloto a la orilla, donde recibió los primeros auxilios de personal paramédico de Seguridad Ciudadana, Serenazgo y efectivos policiales de la Comisaría de San Bartolo.
Una vez estabilizado, el piloto fue trasladado en una unidad móvil al Centro de Salud de San Bartolo para recibir atención médica. La municipalidad destacó la colaboración de la comunidad local, que fue crucial para evitar una tragedia mayor.
Las autoridades locales coordinaron con la Comisaría para seguir los procedimientos legales pertinentes y notificaron a la Dirección General de Aeronáutica Civil y al Ministerio Público para que se inicien las investigaciones correspondientes. Además, la municipalidad hizo un llamado a los pilotos para que operen sus aeronaves de manera responsable, evitando vuelos a baja altura cerca de áreas residenciales.
En 2020, avioneta desapareció en vuelo recreativo
También en San Bartolo, hace cuatro años, una aeronave ultraligera desapareció durante un vuelo recreativo. De marca Haley y modelo Monso, la avioneta despegó a las 3:35 de la tarde del 18 de agosto de 2020 desde el autódromo del distrito, pero no regresó a su punto de origen. A bordo se encontraban dos ciudadanos extranjeros: Juan Carlos Villalba Barragán, un piloto ecuatoriano de 55 años y José Molla Esquidenas, un copiloto español de 65 años, quienes realizaban un vuelo de instrucción.
La Marina de Guerra del Perú y la PNP realizaron operaciones de búsqueda en la zona de Chilca, donde se esperaba que la avioneta sobrevolara durante aproximadamente dos horas. Incluso utilizaron el buque oceanográfico polar BAP Carrasco para localizar a los dos pilotos.
La última referencia que se obtuvo fue que en Cuculí se escuchó el sobrevuelo de la avioneta, pero no se logró obtener más información sobre su paradero. Las autoridades indicaron la posibilidad de que la aeronave haya caído al mar
El hallazgo de un cuerpo en playa Curayacu meses despúes de la desaparición
Semanas después de la desaparación del vuelo recreativo, en setiembre de 2020, se halló un cadáver en las inmediaciones de la playa Curayacu, en el balneario de San Bartolo. Según informó RPP Noticias, el cuerpo podría pertenecer a Juan Carlos Villalba, un ciudadano ecuatoriano de 55 años que desapareció el 18 de agosto mientras volaba en ala delta al sur de Lima.
El capitán de Navío Ludwig Zanabria, en comunicación con el programa Conexión de RPP, explicó que la identificación preliminar se basó en las prendas encontradas en el cadáver, las cuales coincidían con las que Villalba llevaba al momento de su desaparición.